Venezuela será sede de reunión contra el abuso en arbitrajes de compañías transnacionales

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El embajador de Ecuador en Venezuela, Leonardo Arízaga, anunció que la próxima semana se realizará una reunión en Caracas con los representantes de los países latinoamericanos afectados por los arbitrajes interpuestos por las compañías transnacionales, con la intención de definir la posición a tomar en el campo internacional.

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Durante su intervención en el Conversatorio “Chevron-Texaco contra la República del Ecuador”, realizado en el Instituto de Estudios Diplomáticos “Pedro Gual” de la Cancillería venezolana, el diplomático ecuatoriano afirmó que “estas demandas se han venido multiplicando en los últimos años y vemos como Argentina tiene como 30 demandas, Venezuela tiene dos y ahora Ecuador es víctimas de estas maniobras de las corporaciones extrangeras”.

Precisó que “el principal reto que tiene los países latinoamericanos son estos arbitrajes internacionales que se encuentran en los acuerdos bilaterales de inversiones, que suscriben nuestros países con la intención de buscar tecnología para el desarrollo y que han sido impuestos desde hace años por las compañías transnacionales durante los años del neoliberalismo y que perjudican las finanzas de nuestras naciones”.

Al referirse al caso de Chevron-Texaco recordó que esta compañía petrolera estadounidense explotó por 28 años campos petroleros en el Amazonía ecuatoriana, contaminando y destruyendo los sistemas ecológicos y dañando la salud de muchas comunidades indígenas, cuyos habitantes han sido afectados por múltiples enfermedades y dañando el hábitat de trabajo de esas poblaciones, privándolos de los medios de sustento.

El embajador Leonardo Irrízaga dijo que esta compañía petrolera estadounidense ha tratado de chantajear al Estado ecuatoriano y amenazados a los grupos indígenas que decidieron introducir una demanda en los tribunales de Estados Unidos, ante la negativa de los directivos de pagar por los daños causados.

Agregó que “el gobierno de Ecuador decidió voluntariamente renunciar a las preferencias comerciales ante el chantaje de las autoridades estadounidenses de revocárselas, si no persuadían a los demandantes de retirar sus acciones judiciales”.

En este sentido, afirmó que “el gobierno ecuatoriano no se deja chantajear y que apoya a los demandantes en su lucha por buscar una reparación justa por los daños causados a su forma de vida y lograr restablecer el equilibrio ecológico de la zona contaminada, por la explotación petrolera, la cual se pudo evitar si hubieran desarrollada una tecnología adecuada para la protección del ecosistema y de sus comunidades”.