Miles de personas se manifiestan en España contra el terrorismo hipotecario

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Tras la muerte de una nueva víctima del terrorismo hipotecario en la localidad vizcaína de Barakaldo, miles de personas se manifiestan en las calles de esa localidad para protestar contra la legislación de los desahucios y las políticas que conducen a un deterioro de la protección social.

Víctor J. Sanz – Tercera Información

Varios miles de personas, 8.000 según los organizadores, salieron ayer viernes a las calles de la localidad vizcaína de Barakaldo para protestar por la muerte de su vecina Amaia Egaña, de 53 años, quien se lanzó al vacío al no poder resistir la presión del inminente desalojo de su casa.

Portando pancartas con mensajes como “Amaia, te recordamos” o “No es un suicidio, es un homicidio”, los vecinos protestaron contra la actual legislación en materia de desahucios, que data de hace más de cien años y que permite a los bancos actuar contra los ciudadanos, con la injustificada premura y la intolerable violencia de que vienen haciendo gala en los últimos años.

Además, se pudieron ver otros lemas, como “No al paro, no a los desahucios. Por la protección social”, “Hay que parar el terrorismo financiero”, “Ningún desahucio sin respuesta” o el ya clásico “No es una crisis, es una estafa”.

La manifestación fue convocada por las Asociaciones de Vecinos y Vecinas de Barakaldo, Asamblea de Parados de Barakaldo, Barakaldo Gazte Asanblada, Berri-Otxoak, Centro Asesor de la Mujer “Argitan” y los sindicatos ELA, LAB, ESK, STEE-EILAS, CGT y CNT. Participaron concejales de Bildu en el Ayuntamiento de Barakaldo, el portavoz de Alternatiba, Oskar Matute y la representante de Stop Desahucios Bizkaia, Marta Uriarte.

La marcha partió del Palacio de Justicia alrededor de las 19:30 y durante su recorrido un grupo de manifestantes, utilizando aerosoles de color rojo y negro, dejaron su mensaje a los bancos en los ventanales de diversas sucursales bancarias: “asesinos”, “culpables” o “banqueros asesinos”. Además, lanzaron botes de pintura sobre una sucursal de La Caixa.
Populismo político e institucional

El eco mediático que ha provocado el asesinato de la última víctima del terrorismo hipotecario, Amaia Egaña, ha llevado a partidos políticos e instituciones a realizar declaraciones populistas sobre el asunto.

Desde el Gobierno, el Partido Popular ha dejado pasar cuatro años de crisis y más de 500 desahucios al día hasta creer que “es urgente avanzar en una propuesta relativa a esos periodos de carencia para impedir que se hagan efectivos los desalojos de las familias afectadas”. Se da la circunstancia de que el Partido Popular bloqueó el pasado mes de marzo una propuesta de ley, por la que se pretendía regular la dación en pago como alternativa a los abusos de las entidades financieras.

Por su parte, el líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba ha pedido en una a carta a los presidentes de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA) y al de la Asociación Española de la Banca (AEB) que suspendan los desahucios. Se da la circunstancia de que en la anterior legislatura, el PSOE en el poder impidió que se aprobara una propuesta de ley que regulaba la dación en pago como alternativa al desahucio.

La opinión del cardenal arzobispo de Madrid, Antonio Rouco Varela, en su primera y única referencia al asunto de los desahucios en los más de cuatro años de crisis, es que se debe buscar una solución “justa, equitativa y solidaria” al “problema angustioso de los desahucios”.