La marcha campesinas llegó a Caracas: no los recibió Maduro sino un piquete policial

Marcos Salgado - Question

Después de caminar por veinte días y recorrer más de 400 kilometros a pie, llegó finalmente a Caracas la Marcha Campesina Admirable, pero en lugar de ser recibida por el presidente Nicolás Maduro, se encontró con un fuerte cordón policial-militar que les impidió llegar al Palacio de Miraflores. Finalmente, fueron recibidos por el presidente de la Asamblea Consituyente, Diosdado Cabello.

“Es inaceptable que a la #MarchaAdmirableCampesina se la detenga con un piquete policial y no se le permita llegar a #Miraflores. Es soberbia esa actitud de negarse a oír al #PuebloCampesino. La movilización y la interpelación de la gente es vital para la #DemocraciaRevolucionaria”, tuiteó la campesina Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora

La Corriente felicitó a los hombres y mujeres que digna y valientemente realizaron la #MarcaCampesinaAdmirable. Sin lugar a dudas, esta movilización implicó un esfuerzo enorme, legítimo por demás, por hacer visible de modo directo a las principales autoridades del gobierno bolivariano un conjunto de realidades, problemas, atropellos que viene sufriendo el sector campesino, los cuales han sido suficientemente denunciados por distintas vías, institucionales y públicas, sin que se obtenga la respuesta firme y contundente que se espera.

“Es un signo positivo, síntoma de vigor y fortaleza, que desde las bases chavistas, populares, se asuma la movilización, la interpelación y la crítica a la institucionalidad como práctica política. Es ésta una forma de reafirmar el espíritu y compromiso revolucionario y de contribuir a construir y dar vitalidad a la democracia revolucionaria. Sin pueblo organizado y movilizado, crítica y conscientemente, díficilmente pueda una revolución avanzar en la conquista de sus propósitos históricos”, añadió.

AlbaTV|

Sus protagonistas, campesinas y campesinos de diferentes lugares del país, salieron el pasado 12 de julio de Guanare (estado Portuguesa) rumbo a Miraflores. Su propósito: hacer escuchar su voz, hacer valer sus derechos y entregar sus propuestas ante el Gobierno Nacional.

Pertenecen a colectivos, consejos campesinos y fundos zamoranos de diferentes estados del País, agrupados en la Plataforma de Luchas Campesinas, organización convocante la marcha. Muchos de ellos protagonizan experiencias de rescates de tierras ociosas y han vivido en su propia piel la arremetida latifundista contra el campesinado venezolano, recrudecida en los últimos dos años y caracterizada por procesos de hostigamiento, desalojos ilegales y violentos, judicialización, criminalización y hasta el asesinato de campesinos.

Recordemos como la intensidad de esa arremetida, que involucra la complicidad de funcionarios públicos corruptos, haya requerido la intervención y el firme pronunciamiento del Presidente Nicolás Maduro, el pasado 9 de abril.

“¡Ésta no es una una Revolución cómplice de los terratenientes! Ésta es una Revolución de los campesinos, de las campesinas, de la justicia!” afirmó con fuerza, ese día, el Presidente, ordenando crear una comisión especial en seno a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) para investigar los hechos e identificar así a los responsables y a los cómplices internos a las instituciones.

Seguido a ese pronunciamiento, y a la orden de detener la ola de desalojos en contra de esas comunidades, las organizaciones campesinas se ha dirigido al Instituto Nacional de Tierras (INTi) en busqueda de soluciones, ya que los retrasos administrativos de los que es responsable este ente son un factor de peso en este contexto.

Se trata, por ejemplo, de procedimientos administrativos que deberían durar algunos meses y que terminan extendiéndose por seis y siete años. De esta forma, se genera una situación de inseguridad administrativa y jurídica que termina envolviendo los procesos de rescate y se propicia la restauración del latifundio y la violencia contra las comunidades campesinas, como vienen denunciando desde la Plataforma de Luchas Campesinas.

Si bien el INTi haya atendido muchos casos, la mayoría de los rescates más emblemáticos sigue sin solución, así como sigue la violencia latifundista. Hace poco más de dos meses, fueron secuestrados y asesinados en el estado Barinas, Jesús León y Guillermo Toledo, campesinos del rescate Palo Quemao; sus asesinos serían sicarios al servicio del terrateniente Carlos Pardi. Hay más de 300 casos como este, ocurridos en estos años de Revolución y todos aún impunes.

Junto con las reivindicaciones en términos de derecho a la tierra y de justicia, otra componente central de la Marcha Admirable Campesina es el tema de la producción.

Las comunidades campesinas son quienes proveen el 70% de los alimentos que se consumen en el País, y se reconocen como el eslabón primordial de la cadena alimenticia del venezolano. Su rol ha sido clave para la alimentación de todo el pueblo en este contexto de la guerra económica y financiera que busca aniquilar a la experiencia bolivariana.

Sin embargo, a pesar de la importancia fundamental que juega la agricultura campesina ( inclusive en la construcción de modelos productivos sustentables) las recientes políticas agrarias implementadas por el Gobierno Bolivariano no reconocen esta realidad, y por lo contrario beneficiarían como interlocutores preferenciales a los representantes del agronegocio, aunque sean parte activa en la guerra económica, según afirman desde la Plataforma de Luchas Campesinas.

Las y los marchantes han reiterado más de una vez su apoyo al gobierno de Nicolás Maduro, junto con la necesidad de presentar “críticas constructivas” y ser tomados en cuenta para buscar una solución a los problemas que está enfrentando el País.

Su recorrido por el País, ha venido trascendiendo las problemáticas campesinas. En cada etapa de su largo camino a pie, han contado con el apoyo y la solidaridad del pueblo organizado, quien se ve reflejado en las mujeres y hombres de esta Marcha Admirable y que en este momento, desde su diversidad de experiencias y expresiones, los está acompañando en la entrada a la capital.

Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora|

Es tiempo de unidad para defender las conquistas campesinas y luchar por lo que falta

Es un mensaje contradictorio para el chavismo que en Miraflores se den encuentros para el diálogo con sectores de la empresa privada, de la banca, de la oposición política, y que esto no ocurra de la misma forma con un sector del campesinado que ha realizado, además, un importante esfuerzo de movilización pacífico, claramente definido como solidario y consecuente con la revolución bolivariana, con el gobierno bolivariano y con el presidente Maduro. Porque no se trata de un asunto menor lo que pone sobre la palestra pública la #MarchaCampesinaAdmirable, no se trata de una protesta por meras reivindicaciones sectoriales: se trata de un tema central para la economía del país, se trata de la defensa de la política agraria legada por el Comandande Hugo Chávez, que ha venido siendo severamente atacada en los útlimos años por sectores que pretenden restaurar el modelo agrario anterior a la ley de tierras de la revolución bolivariana.

En un complejo momento para la revolución bolivariana, sometida al asedio del imperialismo con un bloqueo y un conjunto de sanciones económicas que tienen como uno de sus objetivos quebrar la moral y la unidad del pueblo venezonano por la vía del desabastecimiento de alimentos y la hiperinflación, no debería eludirse ni posponerse el debate sobre el modelo productivo, sobre la urgente necesidad de avanzar en la conquista de la soberanía alimentaria y de actuar con medidas urgentes en esa materia. Y mucho menos debería eludirse ni posponerse ese debate con el sector clave en ese tema: el campesinado.

En ese sentido, la Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora hace un llamado al gobierno nacional a que se abran finalmente las compuertas para un debate franco, transparente, sin guiones ni cortapisas, de cara al país, sobre estos aspectos neurálgicos para la vida y la continuidad de la revolución bolivariana. ¿Cuál es la política agraria que asumiremos en esta etapa crítica de la vida nacional? ¿Cuál es el modelo agrario que privilegiará la revolución de cara a la superación de la crisis económica y productiva?

¿Se evaluará a profundidad la situación de paralización o baja productividad de las empresas del Estado en el área agrícola y alimentaria para determinar causas, castigar responsables y activar un plan de reimpulso de las mismas? ¿Se construirá un plan serio, con metas a corto, mediano y largo plazo, para avanzar en la impostergable democratización de la tierra? ¿Se asumirá una política clara y contundente para combatir las mafias agrarias y la corrupción enquistada profundamente en la institucionalidad del gobierno nacional y de los gobiernos regionales y municipales, así como en el sistema de justicia en todos los niveles y en los cuerpos de seguridad del Estado? ¿Se dará libertad plena a los cientos de campesinos y campesinas actualmente sometidos a regímenes de presentación, con causas abiertas ante la justicia y medidas cautelares como forma de combatir la presión y amedrentamiento de que son víctimas? ¿Se investigarán a fondo los más de trescientos casos de sicariato ocurridos en la lucha por la tierra y los atropellos y violaciones a los derechos humanos de los campesinos y las campesinas cometidos por los cuerpos de seguridad?

En este contexto, La Corriente hace un llamado a todo el movimiento campesino del país a que avancemos en el logro de la máxima unidad. La defensa de las conquistas campesinas y del legado agrario del Comandante Chávez así nos lo exige. Es imprescindible unificar los esfuerzos y construir una agenda de trabajo y lucha común, debatida y consensuada por todas las fuerzas campesinas organizadas, que nazca de un debate popular profundamente democrático. En este sentido, convocamos a toda la dirigencia campesina, a los hombres y mujeres que en cada territorio están en lucha por la democratización de la tierra y dan la pelea por la producción de alimentos, a una Gran Asamblea Nacional Campesina a realizarse el 11 de agosto en el estado Yaracuy. Vamos al encuentro, al diálogo de la gente, de nosotros y nosotras, los y las iguales. Que salga de nuestro esfuerzo una ruta común para continuar defendiendo nuestras conquistas y luchando por lo que falta. Desde la Corriente Revolucionaria Bolíva y Zamora estamos convencidos(as) de que éste es el camino y continuaremos haciendo nuestros modestos esfuerzos por avanzar en esa dirección.