La izquierda reconquistó Roma

352

ELENA LLORENTE| El centroizquierda ganó 54 municipios, el centroderecha 14 y 19 algunas listas independientes que no responden a ningún partido. Pero el movimiento de Beppe Grillo esta vez consiguió sólo dos municipios.it ignazio marino, alcalde romaPágina 12
Aunque el centroizquierda ganó la gran mayoría de los municipios que fueron a elecciones en Italia entre mayo y junio, después de la segunda vuelta electoral, que se hizo el domingo y lunes pasado, los comentarios y conclusiones no han sido optimistas, sobre todo por el elevado abstencionismo que habla de la falta de credibilidad y de confianza de la gente en los políticos y en las instituciones.

El centroizquierda ganó 54 municipios, el centroderecha 14 y 19 algunas listas independientes que no responden a ningún partido. Pero lo más curioso es que el Movimiento 5 Estrellas de Beppe Grillo, que en las elecciones parlamentarias de febrero obtuvo unos resultados asombrosos, colocándose como segundo partido en algunas regiones, esta vez consiguió sólo dos municipios. Algunos indicaron como razón de este descalabro el empecinamiento de Grillo en no hacer alianzas con ningún partido, que obligó al centroizquierda a unirse a Silvio Berlusconi para hacer el actual gobierno. Otros dicen que el excesivo sarcasmo de Grillo, como buen humorista político que era, y su dogmatismo, está alejando a mucha gente, que esperaba que el cómico consiguiera implementar las medidas sociales y económicas que no habían conseguido otros partidos. Pero hasta ahora poco se ha visto.

Un cirujano del Partido Democrático (centroizquierda), Ignazio Marino, es el nuevo alcalde de Roma, según los resultados definitivos. Marino consiguió el 64 por ciento de los votos contra el 36 por ciento que obtuvo su principal opositor y hasta hoy alcalde de la capital, Gianni Alemanno, exponente del centroderecha. “Estoy muy emocionado por la responsabilidad que me toca. Agradezco a todos los que han creído en mí”, dijo Marino al conocer los resultados. Genovés, 58 años, médico cirujano formado en Inglaterra y Estados Unidos y especializado en transplantes, Marino fue el primero en realizar en Italia, en 2001, un transplante a una persona con VIH. El flamante alcalde fue elegido senador en 2006. El pasado 22 de mayo presentó su renuncia al Senado, caso bastante insólito porque todavía no se habían hecho las elecciones municipales y él no sabía si sería elegido.

En 142 municipios de Sicilia, el domingo y ayer se realizó la primera vuelta electoral, pero hasta el cierre de esta edición el panorama no era muy claro sobre cuántos municipios debían ir a la segunda vuelta electoral y cuál era la coalición o partido predominantemente vencedor.

Al final de todas estas pruebas electorales, lo que ha preocupado a muchos analistas y políticos es la escasa asistencia a las urnas en un país donde el voto no es obligatorio, pero que históricamente ha conseguido elevados porcentajes de votantes, a menudo superiores al 80 por ciento. Aunque en los últimos años ese porcentaje ha bajado, esta vez las cifras oficiales hablan del 48,5 por ciento, es decir que más de la mitad de los que tienen derecho a votar no lo hicieron. En Roma en particular, en la doble vuelta votó sólo el 44,9 por ciento de los electores, casi un 8 por ciento menos que en la primera vuelta. En Sicilia los votantes fueron el 66 por ciento.

“La baja asistencia a las urnas no puede ser atribuida esta vez al mal tiempo, como se hizo en la primera vuelta, sino que se debe, guste o no, al descreimiento de los electores en la política. Si no hay un cambio de ruta, la próxima vez irán a votar sólo los políticos. Si bien es importante, está claro que el debate sobre las reformas de las instituciones no apasiona a la gente, que en cambio espera medidas drásticas que reactiven el mercado laboral. Es evidente que los italianos no están más dispuestos a ir a votar tapándose la nariz”, comentó Barbara Contini, del Centro Democrático (centroizquierda), aludiendo a los que van a votar aún soportando el “olor a podrido” del mundo político.

No fue menos condescendiente el ex juez anticorrupción Antonio Di Pietro, del partido Italia de los Valores. “Hoy el gran ganador ha sido el abstencionismo y eso no es una buena noticia porque habla del fracaso de la política y de las instituciones. Espero que esto sea una lección para el mundo político, aunque me temo que no lo será, dado que tanto a nivel local como nacional, los políticos hacen todo lo contrario de lo que prometieron en la campaña electoral.”

“De estas elecciones surge de modo claro e impresionante que la gente pide cambios. La coalición de centroizquierda puede y debe liberar a Italia del berlusconismo”, comentó el máximo dirigente de Izquierda, Ecología y Libertad (SEL), Nichi Vendola. SEL está en la coalición de centroizquierda, pero ha sido muy crítico sobre la formación del gobierno de Enrico Letta, que incluyó a la gente de Berlusconi.

Letta, sin embargo, no coincide en el análisis. “Este resultado está premiando el esquema de gobierno de amplio espectro que hemos hecho. Así lo leo yo y eso me empuja a trabajar mucho más”, dijo.