Colombia: las negociaciones de paz pueden postergarse por órdenes de captura

La instalación formal de la mesa de diálogo entre el gobierno de Colombia y las FARC, prevista para el 8 de octubre en Oslo, Noruga, podría demorarse al menos dos o tres días por complicaciones en la suspensión de las órdenes de capturas de los insurgentes que deben participar de las negociaciones, informó la prensa.

Télam

Si bien la fecha del 8 de octubre hasta el momento es extraoficial -de hecho primero se habló del 5 del mismo mes-, el diario bogotano El Espectador y la radio RCN afirman hoy que el inicio de la mesa de negociaciones se podría demorar por complicaciones logísticas para llegar a tiempo con la suspensión de las órdenes de captura que pesar sobre los guerrilleros que debe trasladarse a Noruega.

No se trata de crisis ni de problemas de la agenda acordada, destaca el diario colombiano, y agrega que a lo largo de la semana, en La Habana se han llevado a cabo varias reuniones para definir la situación y todo parece indicar que la instalación de los diálogos sería entre el miércoles 10 y el viernes 12 de octubre, aunque incluso se ha hablado de correrla hasta el lunes 15.

“El asunto ha resultado muy complejo y los mismos miembros de las FARC lo han entendido. Por ejemplo, hay algunos de ellos que están judicializados bajo el régimen anterior al Sistema Penal Acusatorio.

Estamos analizando todos los casos y seguramente hoy se definirá la fecha”, le dijo a El Espectador una fuente cercana al proceso, que además recalcó que no se trata de ninguna crisis y que las intenciones de comenzar a hablar del fin del conflicto siguen intactas en las dos partes.

De hecho, durante su reciente viaje a Nueva York para participar en la asamblea anual de la Organización de las Naciones Unidas, el presidente Juan Manuel Santos habría tenido una reunión privada con el primer ministro laborista de Noruega, Jens Stoltenberg, para tratar la herramienta jurídica que utilizará el Gobierno para levantar la orden de captura de por lo menos cinco negociadores de la guerrilla y permitir su trasladado hasta Oslo en la primera semana de octubre.

Asimismo, la idea era abordar la duración de la instalación de las negociaciones. Lo que se ha dicho en el Gobierno es que se quiere que ésta no dure más de dos o tres días y que tampoco haya shows mediáticos.

La intención es que una vez establecido el inicio formal de los diálogos, a la semana siguiente los negociadores se trasladen a La Habana, Cuba, para entrar de lleno y de manera ininterrumpida con la agenda acordada.

Cuando se conoció el inicio de un proceso de paz en firme, la Fiscalía General de la Nación dio a conocer que los jefes guerrilleros nombrados por las Farc para estar en la mesa de diálogo tienen un total de 340 medidas de aseguramiento, órdenes de captura y condenas en su contra en Colombia.

Por ejemplo, de acuerdo con el barrido realizado por el ente acusador en todos los juzgados y fiscalías del país, Iván Márquez, miembro del Secretariado y vocero de las FARC en la mesa, tiene un total de 66 medidas de aseguramiento, 132 órdenes de captura y 28 condenas.

Por su parte, Ricardo Téllez, mas conocido como Rodrigo Granda, tiene 10 órdenes de captura, cuatro medidas de aseguramiento, fue condenado a 15 años de prisión y es acusado por los delitos de rebelión, enriquecimiento ilícito, reclutamiento ilícito y desaparición forzada.

En cuanto a Jesús Emilio Carvajalino, alias Andrés París, tiene tres ordenes de captura, acusado por los delitos de concierto para delinquir, terrorismo, rebelión, desaparición forzada y desplazamiento forzoso. Luis Alberto Albán Urbano, alias Marco León Calarcá, tiene 15 órdenes de captura y sobre él pesa una condena de 32 años de prisión y siete medidas de aseguramiento.

En el caso de Simón Trinidad, detenido actualmente en Estados Unidos y a quien las Farc han pedido como negociador, registra en su contra 11 medidas de aseguramiento y 28 órdenes de captura.

Lo anterior sin contar a los otros cinco integrantes del equipo de apoyo (miembros no plenipotenciarios) en el proceso: Jesús Santrich, Hermes Aguilar, Bernardo Salcedo, Rubén Zamora y el Sargento Pascuas.

Lo cierto es que se trabaja a toda marcha para definir la fecha de la instalación de la mesa de diálogo en Oslo y también sobre la resolución que se debe expedir reconociendo a los negociadores de las FARC y que le permitiría al fiscal general suspender las órdenes de captura que se hayan dictado o se dicten en su contra, por el término que el Ejecutivo considere conveniente.