Siria dio el primer paso para adherir a la convención internacional que prohíbe las armas químicas

 

Siria inició hoy los trámites legales para unirse a la Convención Internacional para la Prohibición de las Armas Químicas (CIPAQ), en línea con la propuesta rusa de que Damasco ponga estas armas bajo control internacional, anunció la ONU.

Télam

“Hemos recibido un documento de adhesión y estamos en el proceso de traducirlo y estudiarlo”, anunció ante la prensa el portavoz del organismo internacional, Farhan Haq, citado por la agencia de noticias EFE.

Es un “documento de adhesión” y el “primer paso” para unirse al tratado, indicó el vocero sobre el proceso elegido por las autoridades sirias, que tiene los mismos efectos jurídicos que la ratificación, la aceptación o la aprobación.

El trámite se enmarca en la propuesta rusa de poner bajo control internacional, para su posterior destrucción, el arsenal químico sirio, plan que evitó -por ahora- una represalia militar de Estados Unidos contra Siria, país al que acusa de utilizar estas armas contra civiles el 21 de agosto en las cercanías de Damasco.

También hoy, en sus primeras declaraciones desde que Rusia presentó el plan, el presidente sirio Bashar Al Assad anunció que su gobierno remitirá a la ONU y a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) los documentos necesarios para la firma del acuerdo y la entrega de su arsenal químico.

El mandatario dijo al canal de noticias ruso Rossiya 24 que su país pondrá su arsenal químico bajo control de la comunidad internacional un mes después de firmar la CIPAQ.

El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, y el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, analizan hoy y mañana en Ginebra como implementar la propuesta de Moscú para que Siria ponga este arsenal a disposición de la comunidad internacional.

Según la propuesta rusa entregada a Estados Unidos, Siria se incorporaría a la Convención Internacional sobre la Prohibición de Armas Químicas, declararía su producción y sus existencias, y autorizaría la entrada de inspectores internacionales.