Paliza del Frente Amplio a toda la derecha uruguaya junta

El oncólogo progresista Tabaré Vázquez venció este domingo con cerca de 54 por ciento de los votos en las elecciones presidenciales de Uruguay al diputado y abogado derechista del Partido Nacional, Luis Lacalle Pou, quien consiguió entre 40 y 42 por ciento de los votos, según encuestas de salida, con lo que el Frente Amplio (FA) triunfó por tercera vez consecutiva desde 2004.

Vázquez, quien ocupó la presidencia de 2005 a 2010, se benefició de la popularidad del saliente José Mujica, quien termina su mandato de cinco años con una aprobación popular de 60 por ciento.

La Corte Electoral comenzó la noche de este domingo el escrutinio manual, pero los resultados finales estarán listos hasta la madrugada de este lunes. Cuando se había computado 93.7 por ciento de boletas, Vázquez tenía un millón 137 mil 791 y Lacalle 886 mil 55. La sucesión presidencial será el 1º de marzo de 2015.

De acuerdo con la consultora Factum, el frenteamplista consiguió 53.9 por ciento de los sufragios y su contrincante 40.6 puntos. En la capital, Factum registró 56.9 por ciento para Vázquez y 37.2 para Lacalle. En el interior del país, la relación fue de 51.8 por 42.9.

En su primer discurso como virtual presidente electo, Vázquez –de impecable traje oscuro y corbata que contrastan con la informalidad de Mujica– convocó a la formulación de un gran acuerdo nacional para atender áreas claves como seguridad, educación, salud e infraestructura.

Quiero contar con todos los uruguayos, pero no para que me sigan, sino para que me guíen y me acompañen, señaló Vázquez, de 74 años, y el cuarto mandatario uruguayo relecto en la historia del país, después de Fructuoso Rivera (1830-1934 y 1839-1843), José Battle y Ordóñez (1903-1907) y Julio María Sanguinetti (1985-1990), todos del conservador Partido Colorado.

No será más de lo mismo, porque el Uruguay de hoy no es el del año 2005 ni el de 2010, declaró ante cientos de personas reunidas en su casa de campaña, en el centro de Montevideo.

Lacalle, hijo del ex presidente Luis Alberto Lacalle, y bisnieto del principal caudillo del PN, Luis Alberto de Herrera (1873-1959), reconoció su derrota pocos minutos después de la difusión de los datos de las encuestadoras.

Llamé al doctor Vázquez para reconocerle y felicitarle por haber triunfado legítimamente en estas elecciones, sostuvo Lacalle, de 41 años.

El triunfo también le dará al FA el voto que le faltaba para tener mayoría en el Senado, ya que en Uruguay el vicepresidente accede al Senado como su presidente. Ese lugar le corresponderá al compañero de fórmula de Vázquez, Raúl Sendic.

Addendo

Sigue gobernando el Frenteuru gana fa
Mercedes López San Miguel-Página 12

Uno de los éxitos de la década frenteamplista, en opinión del historiador Gerardo Caetano, es que la sociedad esté más movilizada y exigente. “Hoy el movimiento sindical tiene cuatro veces más afiliados; es fuerte, ya que conquistó derechos. No va a aceptar una mera administración que mantenga el statu quo.”

Fernando Pereira, coordinador de la central sindical PIT-CNT, calificó de revolucionaria la última década y enumeró lo ganado. “No sólo se trata de la negociación colectiva, de las ocho horas de trabajo para el peón rural, también se trató del cambio de modelo de relaciones laborales; veníamos de un mercado laboral desregularizado.” Consultado acerca de lo que falta resolver, Pereira señaló que es un imperativo achicar la brecha entre ricos y pobres. “El 20 por ciento más rico concentra el 50 por ciento de la riqueza. Hay sectores que deberían gravar más.”

Asimismo, la agenda de derechos se amplió con la aprobación de leyes como matrimonio igualitario, aborto y regulación de la marihuana. “Organizaciones sociales, feministas y derechos humanos van a reclamar más cambios, es decir, que la agenda no se termina acá”, sostuvo Caetano, analista de la Universidad de La República.

El estilo auténtico del actual mandatario también sedujo al electorado. José “Pepe” Mujica goza de una alta aprobación, su partido Movimiento de Participación Popular (MPP, ex Tupamaros) fue el más votado dentro del Frente Amplio, con lo que hará valer su liderazgo en asuntos en los que discrepe con Tabaré. Uno de esos aspectos tiene que ver con la política exterior: mientras que Mujica tuvo una vocación integracionista, cercana a Venezuela y dialoguista con Argentina, Tabaré es más proclive a flexibilizar el Mercosur, a fin de que cada socio pueda acordar tratados comerciales por fuera del bloque.

Tabaré sabe de enfrentamientos con la vecina orilla, a raíz del litigio por la instalación de las papeleras. En ese sentido, la relación con Argentina será uno de los principales desafíos en política exterior. A todo esto, las corrientes más de izquierda dentro del oficialismo se vieron favorecidas en la composición del Congreso, con la presencia de Constanza Moreira –quien compitió en las internas con Tabaré–, Macarena Gelman y Luis Puig.

La situación es compleja para la oposición uruguaya, después de que el oficialismo retuviera el control parlamentario y a la luz de los resultados de ayer. El experto Jorge Lanzaro señaló diferencias importantes entre el Partido Nacional y el Partido Colorado. “Los nacionalistas tienen dos sectores, el de Lacalle Pou y el de Jorge Larrañaga, siempre es mejor tener dos sectores que uno. Y si bien se pensó que el perfil de Larrañaga (a quien llaman El Guapo, por ser confrontativo) podría desdibujar a Lacalle Pou, éste mantuvo su estilo y lo seguirá cultivando”, aseguró el politólogo de la Universidad de La República. Puertas adentro, algunos nacionalistas criticaron la estrategia de Lacalle Pou “por la positiva”, eludiendo atacar a su rival. Para Lanzaro el liderazgo colorado de Pedro Bordaberry perdió peso y se erosionó.

“Bordaberry no armó fórmula con José Amorín Batlle. Muchos batllistas no acompañaron a Bordaberry en su respaldo a Lacalle Pou y decidieron votar por Vázquez. Es decir, lo desafiaron.”