El hambre no es coba

Cástor Díaz – Aporrea

La brutal guerra económica que la derecha venezolana, con apoyo de intereses foráneos ha desatado en contra del pueblo, está causando efectos demoledores en los sectores más vulnerables, que son el blanco que busca la contrarrevolución, cuyos líderes no tienen memoria para lo que no les interesa, pero cuando se trata de armas contra la república, la tienen fresca y clara.

Esa derecha apátrida, golpista, no olvida que la caída del punto fijismo tuvo su epicentro en el cerco de hambre a que fue sometida la clase popular, por el paquetazo de Carlos Andrés Pérez y Miguel “Paquetico” Rodríguez, que tuvo como respuesta el 27F de 1989, conocido como “El Caracazo” y que dejó cerca de dos mil muertos masacrados por los cuerpos de seguridad, en la escalada represiva que duró hasta el 10 de marzo aproximadamente, cuando la fuerza armada y la policía de la época, actuaron com o un ejercito de ocupación en los sectores más humildes de las grandes ciudades del país y de manera especial en el 23 de Enero de Caracas, por ser uno de los reductos más rebelde en contra la austeridad ordenada por el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, con el beneplácito de la mayoría de AD y COPEI, en la Cámara de Diputados y del Senado (Congreso Nacional) de entonces, que pretendieron hacerle creer al pueblo que el FMI y el BM; era la única alternativa para sacar al país de la crisis, en que la había sumido el gobierno neoliberal, los banqueros ladrones, Fedecámaras, Fedeagro, Consecomercio y demás mafias enemigas históricas del pueblo venezolano.

La llama revolucionaria que en barriadas, caseríos, organizaciones, sociales, culturales obreras y estudiantiles, titilaba, como legado de la lucha armada, que fracasó militarmente, pero triunfó políticamente, encontró en el paquetazo de Pérez y en la trampa de Rafael Caldera y Teodoro Petkof, el combustible que necesitaba, para a la luz de la valiente insurgencia del Comandante Hugo Chávez y la oficialidad joven , el 27F y luego la del General Visconti Osorio el el 29N de 1992, prender en el corazón del pueblo y fortalecer el bolivarianismo, que hoy , tras 15 años de asedio imperialista se mantiene al frente del país, defendiendo su dignidad y soberanía.

Sabemos del esfuerzo que está haciendo el gobierno del presidente obrero Nicolás Maduro y su equipo para enfrentar esta batalla de vida o muerte, pero es necesario redoblarlo y meter lupa en donde tenga que hacerlo para corregir los entuertos creados por algunos compatriotas que están en ejercicio de gobierno pero no están comprometidos con el proceso y eso lo advierte el pueblo de a píe; cuando ve como las mafias le meten la mano en sus bolsillos, con los precios de asalto y no hay quien ponga freno a ese bandolerismo. No es posible que un garrafón de agua de 20 litros, hasta febrero costaba 40 bolívares y a esta fecha 17 de julio, cuesta 100 bolívares ¿De donde importan esa agua a Dolar Today? Los transportistas que tenían el pasaje para los buses en seis bolívares, de la noche a la mañana lo llevaron a 15 sin consulta alguna, que un kilo de papas cueste 380 bolívares, que el pollo aumente a un ritmo de 20 bolívares mensuales. Al menos esto ocurre en Ciudad Bolívar, no sabemos si en el resto del país pasa lo mismo.

También hay que corregir las fallas en organismos, como Agropatria, que de acuerdo a fuentes de los productores agrícola de esta zona, hace tiempo que no funciona como lo requiere el momento y ello obvio que contrae la producción. El seguimiento a los créditos otorgados con fines productivos, revisar, porque el bachaqueo es cada día mayor y pese a la cantidad de alimentos importados por el Estado, la escasez no baja y otras acciones indispensables para poner orden en casa.

Gracias a la conciencia que sembró el Comandante Eterno Hugo Rafael Chávez Frías, el pueblo está resistiendo el chaparrón y soportando que el hambre toque a sus puertas, mientras identifica al enemigo para no caer en las provocaciones y así lo demostró el pasado 28 de junio, cuando mas de tres millones de activistas se movilizaron a votar en las elecciones internas del PSUV, lo que preludia que va a ocurrir en diciembre venidero con las parlamentarias. Pero esa conciencia y lealtad del pueblo al legado del Presidente Hugo Rafael Chávez Frías, necesita reforzarla. Excelente lo ocurrido con la OBE, no pudo haber mensaje más contundente a los apátridas que sueñan con subastar la patria. Igual el paso al frente que han dado los docentes, porque precisamente en la educación están las fortalezas para la refundación de la república. Pero más allá de eso, es urgente parar la depauperación de las masas, por aquello de que “amor con hambre no dura”, porque el hambre no es coba.