Mientras Maduro Madura, los burócratas siguen prefiriendo al Dólar Verde
HERSH ZAKHEIM | Da cierta esperanza en estos días leerlo al Compañero Presidente, “Estamos en Tiempos de Revolución y debemos elevar la Calidad política, la Eficiencia en el trabajo y acelerar la construcción del Socialismo”, escribió en su cuenta en la red social Twitter, @NicolasMaduro.
Aporrea
Si contrastamos estas frases, con otras en las que el mismo Maduro, sigue reclamándole a la oposición, su apoyo en la defensa del plan económico y quejándose, del abandono de la misma oposición a la mesa de Paz, resulta difícil entender cuál es el criterio rector de ese discurso.
No obstante es evidente, que el compañero Presidente ha recibido una serie de rechazos, a su política de pacificación y acercamiento con la oligarquía.
La continuidad y carácter de dichos rechazos, por otra parte previstos en todos los análisis, de los críticos a la política de Maduro, están comenzando a hacerlo reflexionar.
Pero mientras” Maduro madura “, es también evidente, que no se ha producido cambio alguno, en la continuidad de la política económica, aquella que cuenta con el beneplácito, de los burócratas del Gobierno Bolivariano, que manejan la entrega de dólares a la oligarquía, y miran con simpatía, que la propiedad y la dirección de la economía, siga en manos de los privados.
Aquellos que cierran los ojos a la realidad, de que el pueblo Venezolano esta desapoderado y de que la Banca, el Comercio exterior e interior y la producción, estén en pocas manos, de ricos empresarios y monopolios extranjeros
Por eso, mientras Maduro puede ir y venir con sus frases, la continuidad, que es lo decisivo en la política económica de base, la manejan los burócratas del gobierno Bolivariano, que evidentemente consideran, que el capitalismo es el sistema que debe regir en Venezuela.
Debemos recordar que nadie entre aquellos que son responsables, de la sustentación del sistema capitalista, hace nada que no le produzca beneficios personales.
Y eso, porque que el Capitalismo, no es un sistema social solidario, que vele por la suerte de todo el pueblo, sino solo por la de una elite minoritaria y privilegiada, los dueños de los medios de producción, y financieros.
En consecuencia, aquellos burócratas que defienden desde el Estado, la continuidad del capitalismo, y no solo en Venezuela, solo tienen con la lógica razón del capitalismo que defienden, “intereses individuales de enriquecimiento personal”.
Lo doloroso, es que todavía sean ellos, los que pueden volcar la balanza, en contra de los derechos económicos del pueblo trabajador en Venezuela, país que comenzó con Chávez a marchar hacia el Socialismo. Y que si todavía se mantiene en el camino hacia la Revolución, es por los pasos que alcanzo a dar el Comandante, en dirección a los intereses de la mayoría.
Es en esos hechos positivos de Chávez, en la defensa de los derechos igualitarios del pueblo de Venezuela, que se sustenta “todavía”, no sabemos por cuanto tiempo, la posibilidad actual del ir y venir de las ideas, del compañero Maduro.
Pero es fundamental, que el compañero Maduro recapacite, comprendiendo que su mayor poder, reside en su origen de clase trabajadora.
Poder que es consecuencia del desarrollo histórico, y así como en las Monarquías, los reyes obtenían su poder en un origen de sangre. Con el Capitalismo el poder lo ejerce la oligarquía, gracias a la propiedad privada de los medios de producción. En el socialismo el poder lo debe ejercer la clase trabajadora, pues es la mayoría de la población, y es la que produce con su fuerza de trabajo, todo lo que se consume.
Por eso el compañero Maduro debe comprender, que su fuerza reside en unirse a los compañeros de su clase originaria, que son la mayoría abrumadora en Venezuela, y proponerse manejar la economía, en el camino de los intereses de esa clase mayoritaria, eso es DEMOCRACIA REAL y no la falsa democracia capitalista.
Además entender que queda poco tiempo, para crear planes, comisiones, ministerios originales cada día, cosa con los que el compañero Maduro, mantiene en permanente tensión la actualidad mediática, pero que desgraciadamente parecen convenirle mucho a la derecha, por la confusión que siembran dichos planes improvisados , en medio de un “golpe de color “ en plena y cuidadosa preparación.
Todo ese esfuerzo y creatividad debería volcarse a educar a la clase trabajadora venezolana, en el contenido humanista, igualitario y lógico del Socialismo, en la necesidad de adoptarlo y defenderlo ante el ataque de la Clase oligárquica explotadora.
Para ello es imprescindible formar, un frente de unidad con todas las organizaciones obreras leales al socialismo, dejando de lado las “mesas reformistas pro capitalistas “, con los enemigos jurados de la Revolución.
Y notar esa tremenda contradicción, que representa el caso de Venezuela. Donde la financiación de este “golpe de color”, es solo minoritariamente otorgada por el Imperio Yanqui.
El grueso de la financiación, proviene del propio Gobierno Bolivariano, a través de la entrega masiva e incesante, de los dólares de la renta petrolera, propiedad de todo el pueblo Venezolano, a la oligarquía golpista, con la excusa insostenible en la lógica, de su propia incapacidad de manejar la simple economía venezolana.
Es que a los burócratas de clase media, infiltrados en el Gobierno Bolivariano, no les interesa, que el compañero trabajador Maduro madure, prefieren que el Dólar siga verde.