Stelling: Maridaje transmedia/Hadda: Migraciones /Díaz Rangel: Lo que va de ayer a hoy

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Maridaje transmedia

Maryclen Stelling|

Es evidente que cada vez más el orden político se interrelaciona con el sistema mediático en una suerte de maridaje, unión intima que pretende ser armoniosa.

Hoy día se reconoce, denuncia y se lidia con el poder transmedia, aquel que se despliega en el marco de una comunicación multimodal, multidimensional y multidireccional. Aquel donde se generan nuevos escenarios de convergencia del poder político con los medios y la cultura; donde se construyen y circulan relatos que constituyen un universo narrativo “coherente” y comprensible; aquel que destierra el mito de la neutralidad periodística y bloquea cualquier intención de objetividad; aquel que nos convierte en acríticos consumidores virtuales; aquel que nos atrapa en una prisión transmediática de la que parece imposible liberarse.

Vertiginosamente cambian los escenarios y las formas de conocer, de representar e imaginar, de informar y educar; afectando las relaciones intersubjetivas entre las personas. Sin duda alguna nos encontramos a merced de las narrativas transmedias que, en su accionar y obviando cualquier pretensión de objetividad, actúan sin tapujos. El control de los discursos de poder se relaciona directamente con el control sobre las narrativas transmedias. Gradualmente ese poder transmedia va tornándose en una comunidad ético-moralista, suerte de religión transmediática, donde tiene lugar una cruzada por la creación de significados.Resultado de imagen para maridaje transmedia

El rotundo triunfo del ultraderechista Bolsonaro en Brasil, es una clara demostración de cómo el orden político está intrínsecamente relacionado con el sistema mediático, la estructura social y la cultura. Analistas destacan las narrativas del odio, frustración y valores reaccionarios que caracterizaron la campaña transmedia del recién electo presidente.

Sin ir más lejos y sin negar la crisis multidimensional que aqueja al país, nuevamente alertamos sobre la politización y polarización de la crisis y los miedos. Alertamos sobre los discursos y narrativas transmedias que el poder y el contrapoder construyen sobre la crisis, las causas y las consecuencias. Destacamos específicamente las representaciones del miedo, que estarían configurando comunidades del miedo y, peor aún, comunidades de odiadores y odiadoras.

Devenidos en habitantes transmediáticos de geografías del miedo, de comunidades del miedo y del odio…

Migraciones y el caso Venezuela

Beltrán Haddad|

El drama de la migración hacia el Norte se ha convertido en un grave conflicto y quizá el más deshumanizante. Es la tragedia de hombres, mujeres y niños que desesperados por la pobreza y las guerras tratan de llegar a Europa desde África del Norte; o desde Centroamérica que, llevados por el hambre y la violencia, marchan hacia Estado Unidos, sin nada que los detenga.

Las guerras, la pobreza y la persecución política o religiosa hacen que miles de personas traten de cruzar el Mediterráneo o viajen a través de los Balcanes para llegar al Norte de Europa, a riesgo de la muerte en el fondo del mediterráneo, en un refugio o en el camino. Por su parte, los emigrantes centroamericanos que hoy van en caravana pretenden llegar al Norte de América, van con su aflicción continuada. Ya no existen las visas humanitarias para llegar a Estados Unidos, pero ellos llevan su ropaje de indocumentados, a riesgo de no llegar nunca a causa de las bandas criminales y del narcotráfico, los secuestros, las desapariciones o la muerte en la frontera.

Hoy Europa nos muestra la cara del nuevo racismo con la persecución a los inmigrantes. Ya no sólo se habla del odio por motivos de raza, exclusivamente. Se habla ahora de un racismo para estigmatizar a ciertos grupos; pero también de otro tipo de racismo que buscan justificarlo en la inseguridad y su explicación en la discriminación de la inmigración. Se dice que en las crisis de Estados nacionales con sus flujos migratorios hacia los países desarrollados, la ciudadanía ya no es un factor de inclusión y de igualdad. Estamos ante una realidad que conmueve y puede convertir en violencia esa distancia entre el Norte y el Sur del planeta.

Ahora surge esta pregunta: ¿Por qué emigra el venezolano? Ya lo advierten de que es un proceso de migración extraño por ser distinto a las migraciones que van hacia el Norte, como las de África o las de Centroamérica. No existiendo guerra ni crisis humanitaria, las causas pudieran estar en una conglobación de la caída de los precios del petróleo con su impacto en una economía rentista, la alteración de la conducta consumista, el bombardeo mediático político que instiga a la emigración con mensajes de estar el país arruinado y la debilidad de sectores en su identidad con la Patria o distante de ella para afrontar una crisis económica, más o menos prolongada. Pero hay algo cierto, Venezuela no es para emigrar.

Lo que va de ayer a hoy

Eleazar Díaz Rangel|

No hay excepciones entre los últimos presidentes de Estados Unidos respecto a sus políticas hacia los países de América Latina. Entonces fueron su patio trasero. Fuentes de materias primas, votos donde los necesitó (ONU, OEA, etc.). Y en relación con la Venezuela que comienza con Chávez, todos en Washington se incomodaron con un país independiente y soberano, y pretendieron lo mismo: desconocer esa independencia y esa soberanía. No han podido, ni podrán, en tanto subsista la unidad pueblo-Fuerza Armada. Hasta quien por su color se creía gobernaría distinto, todavía tiene plena vigencia la declaración de Obama de que somos un país que amenaza la seguridad y la política exterior de EEUU. ¿No la habrán olvidado?

Pero si es de buscar antecedentes de esa política, la historia nos los muestra con facilidad. Hojeando las páginas de “El hombre de La levita gris”, Enrique Bernardo Nuñez nos cuenta un episodio de hace mas de 100 años.Resultado de imagen para cipriano Castro

Después del bloqueo a Venezuela en 1902, cuando las potencias europeas hundieron o capturaron los barquitos de nuestra Armada y cañonearon varios castillos, Estados Unidos era prácticamente dueño de la situación, imponía las doctrina Monroe, y asumió como el cobrador de deudas a Venezuela, reales o supuestas, en todo caso exageradas. Hubo un momento propicio para un ultimatum. Cuenta Núñez que el 6 de febrerote 1905, el Secretario de Estado John Hay, había enviado este ultimátum al canciller general Alejandro Ibarra: “Si el Gobierno de Venezuela se niega fundamentalmente a consentir en un arbitraje…el gobierno de Estados Unidos puede lamentablemente verse obligado a tomar todas las medidas que juzgue necesarias paras lograr la completa reparación, sin acudir al arbitraje”.

La respuesta del canciller, atendiendo las instrucciones del presidente Castro no podía ser otra “…que el gobierno para considerar esa nota , necesita saber si de lo que se trata es de la soberanía e Independencia, es decir, si el Gobierno de Estados Unidos respeta y acata la legislación de la República y la honorabilidad de sus Tribunales o no…”

Cuenta EBN que entonces el embajador “Bowen aconseja la ejecución del plan Parker, el agregado militar norteamericano, para el desembarco de tropas, la detención de Castro (el general Cipriano, Presidente), el establecimiento de un gobierno provisional y el embargo de las aduanas por agentes americanos”. Hoy no se ocuparían de las aduanas, sino de un negocio mas provechoso: el petróleo.

Como podrán observar, los procedimientos de hace mas de un siglo son bastante parecidos a los que hoy utilizan para amenazar a Venezuela, cuando EEUU se ha transformado en imperialismo. Existen diferencias, una de ellas muy importante, como es la presencia dentro de Venezuela de grupos opositores que demandan y apoyan esa política de agresión, mientras a comienzos de siglo no las había, todo lo contrario, lo que hubo fue unidad patriótica en defensa del país, comenzando por José Gregorio Hernández, que acudió pronto a inscribirse en el Ejército y el mas famoso opositor de la época, el General José Manuel Hernández, el popular Mocho, que salió de la cárcel a sumarse a las fuerzas de resistencia.

Deben apreciar las profundas diferencias.

-En Managua, no casualmente escogida como sede de esa reunión, hubo el encuentro del Comité Político del ALBA, para estudiar estrategias respecto a la situación política de la región y las amenazas concretas de Washington contra Cuba, Nicaragua y Venezuela. El presidente Daniel Ortega pronunció un discurso estelar la noche del jueves ante una multitud que revela el apoyo popular a su gobierno, al contrario de lo que revelaban los grandes medios de la región. Hizo denuncias a Estados Unidos y a la Unión Europea en respuesta a las que desde esas regiones se hacen contra países latinoamericanos, particularmente en el caso de los supuestos presos políticos, que si los hay en cárceles de EEUU y de países europeos. Pero seguramente, nada de esto fue de interés noticioso para las agencias internacionales.

-Como tampoco debió serlo la multitudinaria movilización de universitarios y trabajadores en Bogotá y otras ciudades, el jueves, en rechazo a reformas de ley tributaria propuestas por el presidente Duque, que afectan a la mayoría de la población, incluidos gentes del campo, mientras beneficia a los empresarios que seguirán pagando menos impuestos.¿Como tratarían las agencias si protestas masivas como esas se produjeran en Venezuela? Fácil imaginárselo.

-El giro a la derecha de Lenin Moreno en Ecuador parece no tener límites. No conforme con el ensañamiento contra el expresidentes Correa, ahora la cogió con el exvicepresidente Jorge Glas, a quien tiene preso sin que se muestre una sola prueba de los delitos por los que se le acusan. La defensa ha exigido una sola prueba, “una, o la mitad de una prueba”, y nada que desde el poder puedan mostrarla. Parece que copian los métodos usados contra Lula en Brasil, premiado ahora nombrando al juez Moro que lo tiene preso, como ministro de Justicia!! y contra Cristina en Argentina. Y ahora hasta pretende obstaculizar el asilo al periodista Julian Asange, asilado en su embajada en Londres.