¿Milei tambalea? Duro golpe en el Senado
A menos de 100 días del comienzo de su gobierno, el presidente de la Argentina, Javier Milei, recibió un duro golpe en el Congreso argentino. La cámara de Senadores, votó por amplia mayoría en contra del decreto de necesidad de urgencia (DNU) con el ultraderechista pretendía gobernar sin pasar por el Congreso.
Marcos Salgado |
Es la primera vez desde la reforma constitucional de 1994 que el congreso rechaza un decreto de necesidad y urgencia del poder ejecutivo. De cualquier forma, por ahora vigente, porque para quedar sin efecto demanda también el voto negativo de la cámara de diputados, que podría tratarlo pronto.
Por 42 votos contra 25, el Senado se pronunció en contra del DNU 70/23, considero por los propios partidarios de Milei como el corazón ideológico del “cambio” que pretende llevar adelante el libertario. La otra pata es la llamada Ley Ómnibus, que también fue rechazada. Mientras el senado se disponía a rechazar el DNU, el ejecutivo reenviaba al Congreso un nuevo proyecto de ley ómnibus, con menos artículos.
El Decreto 70/2023 que Milei publicó en el Boletín Oficial el 21 de diciembre de 2023, a días de asumir la presidencia, rige en Argentina con fuerza de ley desde el 29 de diciembre, ocho días después de su publicación. Con él se derogaron y/o modificaron más de un centenar de normas, en un intento brutal de transferencia de recursos de los trabajadores a los más poderosos, en varias áreas.
Las medidas del DNU vinculadas a derechos laborales fueron suspendidas preventivamente por la Justicia. Sin embargo, las económicas, siguen vigentes, al menos hasta que la Cámara de Diputados, eventualmente, también lo rechace.
Aunque en la Cámara Baja los números de la oposición no son tan holgados, algunos analistas aseguran que están cerca de alcanzar la mayoría simple para derogar el DNU. El interrogante es, primero, si la oposición intentará el tratamiento rápido en Diputados, y después si -a diferencia de la vicepresidenta Victoria Villarruel, que como jefa del Senado dio luz verde a la sesión- el oficialismo logra demorar el tratamiento.
Mientras tanto, el presidente trolea
Mientras la noticia ocupaba todos los titulares, el presidente se dedicaba al juego que mejor juega y que -parece- es el que más le gusta: leer posteos en la red X y retuitear cuentas que, con creciente violencia, señalan a los senadores que votaron contra el DNU o incluso, más allá, a la vicepresidenta Villarruel.
https://twitter.com/TommyShelby_30/status/1768388669226815878
Es el caso de la cuenta Milei Shelby que publicó una foto de Milei con un bate de beisbol, que fue retuiteada por el mandatario. Se sabe que esa es una de las formas favoritas del ultraderechista de decir sin decir, aunque en Argentina ya nadie duda que esos reposteos deben tomarse como indicios concretos de lo que el mandatario piensa u opina.
Otra de las cuentas favoritas de Milei es una autodenominada Escuela Austríaca de Economía. El ultraderechista reposteó un listado de los senadores que votaron en contra, a los que califica de “delincuentes que votaron en contra de acabar con los curros de la política”.
https://twitter.com/DiegoMac227/status/1768410972287316043
¿Qué pasa ahora con Villarruel?
Las mismas cuentas en X que expresan al presidente Milei se han encargado de denostar en las últimas horas a la vicepresidenta Villarruel, desde que se conoció el orden del día de la sesión de este jueves. Mientras tanto, analistas de diferentes signos políticos y en medios de comunicación con intereses contrapuestos alertaban sobre un cisma en el gobierno de La Libertad Avanza.
Villarruel no viene del partido del presidente, su soporte político son especialmente las fuerzas de derecha vinculadas fuertemente al otrora partido militar, que aboga por el final de los procesos por crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura militar (1976-1983) y por la reivindicación sin cortapisas del terrorismo de Estado.
Antes de la toma de posesión de Milei, se especulaba con que Villarruel asumiría el control de las áreas de seguridad y defensa del gobierno libertario. Pero esto no ocurrió. En este corto devenir desde diciembre, la vicepresidenta quedó relegada a un segundo plano, pero con el rechazo al DNU en su cámara vuelve al ruedo, y revela lo que puede ser el comienzo de un cimbronazo mayor.
Ahora sigue lo que suceda en la Cámara de Diputados, donde el resultado del DNU es incierto. Por lo pronto, Milei recibió el golpe político más fuerte desde que llegó a la presidencia, mientras no aparecen sectores dispuestos a respaldarlo en las calles, ante un crisis económica y formidable recesión cuyas consecuencias más duras recién comienzan a verificarse.
¿Tambalea Milei? ¿Sus aliados se preparan para abandonarlo? Tal vez es demasiado aventurado, al menos por ahora, ese panorama. Pero con un personaje de las características psicológicas del mandatario argentino, se pueden esperar raptos de ira, golpes en mesa y -seguro y sobre todo- más violencia verbal. Un cóctel explosivo que puede terminar en derrumbe.