Julio Escalona: Acompañar a la gente en sus problemas y tomar en cuenta al pueblo opositor
AlbaCiudad|
El constituyente, intelectual, escritor y excomandante guerrillero Julio Escalona fue el invitado especial de la ministra del Poder Popular para la Cultura, Alejandrina Reyes, en su programa “Soy lo que somos”. Resaltó que Venezuela está siendo sometida a la doctrina del shock planteada por el economista liberal Milton Friedman en sus libros, que ya se aplicó a la Chile de Allende.
Eacalona instó a los funcionarios públicos a acompañar al pueblo en su sufrimiento y problemas: deben dar el ejemplo y renunciar a privilegios para evitar causar contradicciones. “Nosotros no sabemos cómo dirigirnos al pueblo opositor”, resaltó. Instó a escucharlos, hablarle en sus códigos e involucrarse en sus problemas.
Para el constituyente, la jornada del fin de semana -los ejercicios “Soberanía Bolivariana 2017”- fue una señal para el pueblo mismo que participó, para los pueblos de Amṕerica Latina y para las fuerzas que quieren liquidar este proceso revolucionario. “La verdadera guerras que hay ahora busca tratar de separar al pueblo de ese proceso que se vive en Venezuela. Es un proceso imperfecto, con errores y fallas, pero que ha despertado una esperanza no sólo en Venezuela sino para todo el continente”.
Recordó que una de las líneas del Comandante Hugo Chávez era la geopolítica. “Toda la geopolítica que conocemos anterior a Chávez, era la geopolítica de la dominación”, a diferencia de la planteada por Chávez, que definió como la geopolítica de la liberación y que es el título de uno de sus libros.
Escalona señaló que Milton Friedman, “autor y padre de la geopolítica contemporánea neoliberal hecha para dominar a los pueblos”, fue el autor de la Teoría del Shock que se aplicó a Chile durante la presidencia de Salvador Allende, buscando doblegar a los pueblos que apoyaban a la izquierda revolucionaria. Su intención era colocar al pueblo en un caos general y en un estado de shock que lo haga vulnerable y capaz de aceptar cualquier cosa. “Lo políticamente imposible se hace políticamente inevitable”, decía Friedman según Escalona.
“La grandeza del pueblo venezolano es que ha sido sometido a un caos en la vida cotidiana, y no ha sido posible destruirlo, ni siquiera con eso“, resaltó.
Funcionarios públicos deben acompañar al pueblo y renunciar a privilegios
Sin embargo, no escondió que “hay muchos problemas” y que “la gente está sufriendo de verdad. Creo que eso hay que entenderlo, y le toca entender sobre todo al gobierno y a los funcionarios gubernamentales, porque hay un sufrimiento que no siempre es acompañado por los funcionarios públicos”.
“Creo que esto obliga a quienes sean funcionarios públicos a comprender que, o se renuncia a esos privilegios y se hace uno más como pueblo, o es mejor que renuncie“. Indicó que “estos tiempos exigen una gran entrega, una gran convicción y una gran posición ante la vida. O nos acompañamos todos y somos solidarios de verdad, o nos destruimos”.
“Hay escasez, pero no todos vivimos en escasez, y el pueblo se da cuenta”, explicó Escalona. “El pueblo se da cuenta de que hay gente que tiene, que le sobra. Y otra que no”. Son cosas que, en su opinión, el chavismo tiene que discutir muy en serio.
La ministra Reyes respondió que “si alguien tiene privilegios, es porque ya no es pueblo. Se distanció”. Hay una tendencia a “masajear el ego” de una persona cuando asume un rol, de hacerla sentir superior a los demás. Esa cultura y esos códigos, en su opinión, deben ser transformados.
Resaltó Escalona que, en los ejercicios del fin de semana, se vio a generales que antes no participaban con la gente, trabajando en los ejercicios junto con ellos. “Eso es un gran logro de este proceso”.
Tomar en cuenta al pueblo opositor
Señaló la existencia de un pueblo “que no es chavista, pero que es pueblo, y que espera también de nosotros. Lo primero que tenemos que hacer es tomarlo en cuenta, saber que existe, que está ahí y que también está sufriendo”. Es un pueblo que padece “muchas confusiones, sometido al estado de shock”: el mismo al que fue sometido el pueblo de Chile en 1973, que generó duda, desconfianza, miedo y terror. “En ese estado la gente puede hacer cualquier cosa, y eso es lo que ellos están apostando”.
La ministra respondió citando al maestro Simón Rodríguez sobre el entreayudarnos, y recordó que “no solo te entreayudas con el que te gusta y te quiere. Tienes que tratar de captar a ese otro que no habla igual que tú”.
En opinión de Escalona, no se trata solamente de captar gente, sino de comprender al pueblo, incluyendo a aquel que se opone al chavismo. “Nosotros no sabemos cómo dirigirnos al pueblo opositor”, resaltó.
Recordo que “queremos hacer una revolución. La otra gente (la oposición) a lo mejor también, pero su revolución es más sencilla: tener algunas cosas que no tienen, descifrar muchos códigos que nosotros utilizamos. El estilo chavista es bueno para el chavismo, pero para otra gente se ha hecho crítico. Si no comprendemos eso, que hay gente que esperamos que también le hablemos a ellos; en su código, en su lenguaje, en lo que ellos aspiran”. Y esperan que reconozcamos que nos hemos equivocado en aquellas cosas donde nos hemos equivocado.
Reconocer las fallas y retrocesos
Recordó que hoy día, producto de las circunstancias que vive el país, la calidad de la educación y la salud pública han disminuido notablemente. “No son los mismos que los de hace unos años”. Por ello, criticó que hablemos a la población diciéndoles: “en este país, donde hay educación gratuita, salud gratuita”, porque “estamos hablando como lo hacíamos hace unos años atrás. Eso hoy no es así. Tenemos serios problemas. La gente está descontenta, en parte, porque hay una realidad que también ha cambiado. La derecha, en su proceso de caotización, ha destruido muchas cosas y no hemos sabido cómo recomponerlas en términos de esas aspiraciones, que no son las mismas nuestras”.
“Muchas cosas que decimos no concuerdan con la vida cotidiana. Y nos cuesta comprender que la vida cotidiana se ha deteriorado”. Explicó que no es sólo el tema de la escasez, que es un arma peligrosa. “Si supiéramos compartir la escasez, la gente comprendería mejor. Porque hay funcionarios públicos que dan mensajes que mucha gente diga: ‘¿Y ellos dicen que son revolucionarios? ¿Y ellos dicen que comprenden nuestros problemas?’ Hay contradicciones”.
En ese sentido, resaltó el ejemplo del Presidente Maduro, cuyo mensaje es el más claro. “No se ha separado de su origen, e independientemente de que tiene que tomar medidas de seguridad, él anda con la gente“.
Dar el ejemplo
Instó a los funcionarios a dar el ejemplo. “El Libertador Bolívar se ganó a los llaneros cuando se montó en un caballo al pelo (sin silla), y pudo andar en ese caballo al pelo. Y cuando se tiró al río y lo pasó al río. El llanero no perdona que tú lo vayas a mandar, pero no hagas lo que él hace. Cuando la gente del pueblo ve esa disposición y esa conducta, te perdona otras cosas y te ayuda. Cuando ve que tú tienes la voluntad pero no tienes la fuerza de subir, va y te ayuda”.
Pero el pueblo “también se da cuenta cuando eres tramposo”, dice Escalona, “porque muchas veces la gente (los funcionarios) se hacen que no puede, para no hacer. O se hace el que no sabe. Pero la gente se da cuenta de que sí sabe, o sí podría saber”.
Resaltó que el pasado 30 de julio, en las elecciones para la Asamblea Constituyente, fue posible encontrarse con los opositores gracias a los errores de la propia dirigencia opositora. “Hay un límite al que la gente no va”.
Escalona concluyó diciendo que “hablar de la paz es algo muy serio. Si hablas de la paz, tienes que suponer que no hay hambre, que no hay sufrimiento y que la gente va llegando a la felicidad. Con hambre y sufrimiento no es fácil oír la palabra paz, y ese es un secreto que hay que conocer hoy día”.
La ministra invitó a Escalona a desplegarse por todo el país a través de los gabinetes culturales, junto a los otros Constituyentes del mundo cultural, para escuchar al pueblo que votó por ellos.