Francia advirtió que la Unión Europea aplicará nueva sanciones a Rusia si no baja la tensión en Crimea

El ministro de Relaciones Exteriores francés, Laurent Fabius, advirtió hoy a Moscú que si no da pasos para bajar la tensión en Crimea, tras las medidas adoptadas ayer por la Unión Europea, se adoptarán nuevas sanciones que podrían afectar al “entorno cercano” del presidente ruso, Vladimir Putin.

Télam

En una entrevista concedida a France Info, Fabius señaló que “es muy importante que Europa esté unida, como lo está”, respecto a la crisis en Ucrania y dejó claro que tras las medidas adoptadas ayer de congelar las conversaciones para la supresión de visados y la negociación para un nuevo acuerdo bilateral “si no hay resultados muy rápido habrá nuevas medidas contra responsables y empresas rusas”.

Estas nuevas medidas podrían incluir “la congelación de fondos” o la “denegación de visados”, que afectarían “al entorno próximo” a Putin “si los rusos no comprenden que hay que volver a una relación normal”.

Fabius rechazó de plano que el presidente ruso haya “ganado” en su enfrentamiento a Estados Unidos y la Unión Europea (UE) respecto a Crimea y subrayó que aunque Moscú controla “de facto” esta región del sur de Ucrania, gracias a la presencia de sus tropas, todavía no se produjo una anexión formal.

En este sentido, afirmó que llegado este último caso, algo que podría producirse tras el referéndum convocado por el Parlamento crimeo para el 16 de marzo, entonces habría “consecuencias graves respecto a las relaciones entre Europa y Rusia”.

“Si un país actúa de forma tal que no respeta las fronteras y la independencia de otro país, que además no está lejos nuestro (…) no podríamos mantener la relación que tenemos ahora y volveríamos a lo que conocimos hace muchos años”, previno el ministro galo, según despacho de Europa press.

Preguntado si podría haber una guerra, Fabius descartó hablar de “ejemplos apocalípticos” y dijo que “en el plano económico la relación no podría seguir igual” lo que supondría “un golpe muy duro desde el punto de vista económico para Rusia, la caída del rublo y un retroceso de las inversiones”.

El ministro francés, que se declaró “amigo de Rusia”, sostuvo que “el partenariado no quiere decir debilidad y la amistad no quiere decir ceguera”, por lo que “hay que ser claros en esta crisis que es grave, puede que una de las mas graves desde la Guerra Fría”.