España, Grecia y Siria, las claves de estos días de junio

JUAN GUAHÁN| La crisis mundial se manifiesta de distintas maneras y en diferentes lugares. Sin lugar a dudas los tres países señalados marchan a la cabeza de las preocupaciones actuales. De todas maneras hay otras evidencias de la crisis que llaman la atención. Una de ellas es la experiencia que se está realizando en varios pueblos italianos. Allí han vuelto a los tiempos pre romanos y pusieron en marcha el trueque. El mismo sistema que –realmente- salvó a muchos argentinos hace 10 años. En cada uno de esos pueblos crearon un “registro” donde se le asigna un valor, en una moneda común que equivale a 1 euro, a cada producto para facilitar el intercambio.

España: el futuro asusta

Los españoles perciben que las formas simiescas de su futuro se asoman a su ventana. España, la cuarta economía de Europa y el país que les serviría de nexo con la América que llaman hispánica, está asustada. Hay dos palabras que niega el gobierno y teme el pueblo: “Ajuste” y “rescate”.

De la primera –“el ajuste”- hay tantas constancias que resulta difícil ignorarla. Uno de cada 4 españoles no tiene empleo, en los jóvenes esa cifra se duplica. Sí, no leyeron mal, más de la mitad de los jóvenes no tienen trabajo. Por eso encabezan la cifra de emigrados, de toda Europa, ¿adónde van? Alemania, Inglaterra y Argentina, son sus principales destinos.

El “rescate” ya fue aprobado por la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el FMI, por 125 mil millones de dólares. El gobierno lo llama “crédito”. Dice eso porque, en su campaña electoral, sostuvieron que no acudirían al “rescate”.

El gobierno de la derecha, encabezado por Mariano Rajoy tiene un rechazo del 78%, pero la oposición social-demócrata conducida por Alfredo Rucalba lo supera, el 89% no simpatiza con ellos. Más del 90% de la población cree que las cosas empeorarán.

Pero algo ha cambiado. Antes muchos pensaban que los políticos se apropiaban de la soberanía popular y gobernaban para su círculo de amigos partidarios. Hoy no es así. Consideran que ahora los gobierna una pequeña capa de tecnócratas al servicio de los grandes bancos.

Vota grecia y Europa tiembla

Nuevamente Grecia vota. Lo hace porque en recientes elecciones ningún partido logró imponer una mayoría sufiente para constituir gobierno. Había ganado una fuerza de derecha, aliado a la declinante social democracia gobernante. Pero no alcanzó a formar una alianza que le permtiera llegar a la mayoría necesaria para gobernar. Salió segunda una fuerza de izquierda radicalizada.

Ahora las encuestas hablan de un “empate técnico”. El que logre la mayoría, aunque sea por un voto, incorpora –automáticamente- otros 50 legisladores, que se suman a los que le corresponda por el régimen proporcional. Ese mecanismo hace que el ganador tenga mayores facilidades para constituir gobierno.

Europa teme que si triunfa el conglomerado de fuezas de izquierda plantée condiciones que hagan muy difícil su permanencia en la Unión Europea o en la eurozona. Cualquiera de estas hipótesis significaría una situación crítica para el conjunto de Europa y para el euro. No son pocos los que sostienen que una fisura en el andamiaje de la Unión Europea y el euro, puede hacer colapsar todo el edificio.

Siria: una mecha encendida, con futuro impredecible

Desde hace algunos días circula, en diferentes ambientes diplomáticos, una versión francamente inquietante. Según la misma se están preparando las condiciones para que dentro de un tiempo -no muy lejano- los sirios vean en sus habituales canales televisivos imágenes filmadas en estudios de la CIA e incrustadas en los canales más importantes. Allí aparecerían manifestacions populares contra el gobierno del Presidente Bashar al-Assad, rebeldes apoderándose del centro de grandes ciudades bajo el aplauso de sus habitantes, masacres que serán imputadas al actual gobierno. Es decir una serie de acontecimientos que generen la posiblidad de poner en marcha el golpe de estado que estarían preparando las potencias occidentales. De este modo los grandes medios, ya no solo apoyan a determinadas guerras, sino que son protagonistas de las mismas. Algo de eso ya los vimos en la Guerra del Golfo. También en el golpe de estado, cuando apresado el Presidente Hugo Chávez, se mostraban imágenes fraguadas de multitudes aplaudiendo su renuncia, que nunca se había producido.

Más recientemente en los sucesos de Libia se volvió apelar a métodos semejantes. Algunas, de las más importantes redes televisivas mundiales, estarían comprometidas en esta “ficción”. Los “estudios” donde se grabarían estas imágenes estarían ubicados en Arabia Saudita. Esta operación respondería a un intento, por parte de la OTAN y sus aliados, de derrocar al actual gobierno sirio y avanzar en la reestructuración de la región. Desde hace meses estos intereses vienen trabajando para ese objetivo.

El veto de Rusia y China, en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas -a diferencia de lo que ocurrió en Libia- impidió el ataque directo y la invasión de tropas extranjeras. El envío de mercenarios armados desde los países vecinos no asegura alcanzar los objetivos propuestos. De allí el intento de ayudarlo con la señalada “intoxicación mediática”. Si esto no fuera posible queda el recurso de la intervención directa. Rusia, con el aval Chino, habría hecho saber que eso sería traspasar la “línea roja”.

Ese sería el límite de Rusia, a partir de ese momento también intevendría. Occidente no está seguro si tiene las armas adecuadas para neutralizar los 2 nuevos tipos de misiles que Rusia acaba de probar. Sus alcances son de 8 y 11 mil kilómetros. Contarían con tecnología que haría muy compleja su intercepción. Esta prueba fue hecha pocos días después que Vladimir Putin reasumiera como Presidente.

Es por eso que, en esta escalada, es difícil predecir el final. Si el conflicto se agrava en Siria, seguramente sus efectos expansivos llegarán rápidamente al Líbano. No sería fácil mantener ajeno al mismo a otros países de la región. Es bueno recordar que habitan nuestro país unos 4 millones de descendientes sirio-libaneses.