Días calientes

Eleazar Díaz Rangel-Últimas Noticias

Las más recientes decisiones y declaraciones amenazantes de Washington nos dejan la impresión de que cada vez se acercan más. No a un desembarco de marines, también en mi opinión descartado, sino como factor en la agudización de un clima de inestabilidad, apoyado en factores internos bastante conocidos, y activos y señalados.

En la oposición planifican y promueven acciones violentas y, entre ellos, hay quienes siguen pensando en salidas golpistas, persuadidos de que existe ambiente para intentarlo, basados en el descontento de la gente por los acuciantes problemas de desabastecimientos y los cada vez más graves de inseguridad, apropiados para agitar hacia explosiones sociales.

No fue casual que Freddy Bernal denunciara que tendremos hasta 60 días calientes, que los paracos colombianos dominan en Venezuela 11 municipios, que hay bandas armadas y paramilitares en espera de órdenes de la ultraderecha, etc., todo en armonía con las advertencias y alertas que han venido formulando recientemente el presidente Maduro, el ministro Padrino López y el diputado Cabello, bastante concreto el pasado miércoles. ¿Qué nos resta decir? Que hay que estar mosca.

Bachaqueros: 

El gobierno ha endurecido su lucha contra el bachaqueo, pero se trata de un problema que se ha extendido y ahora es más  difícil y complejo combatirlo. Entre 100 en una cola, se estima que el 70% (familiares incluidos) compran para revender a altos precios. Hoy son centenares de miles.

*En Chacao, pese a estar contra la ley, en su mercado nuevo operan los bachaqueros libremente con exagerados precios, superiores a los ya bastante altos del “mercado” ilegal, y no hay autoridad que los meta en cintura.

Existen diversas modalidades. Las mafias organizadas  obligan a los consumidores que han comprado a que les vendan al precio pagado uno de cada dos productos que llevan. Si se oponen les advierten que tienen tipos que, incluso armados, los obligarán. En algunos centros se hacen hasta dos colas, una de ellas de gente que ha aceptado entregar parte de su compra, recibe un número bajo y puede salir de la cola en menos de una hora.

Si se multiplicaran esfuerzos que han tenido éxito a partir de ciertos mercales, como el de la avenida José Ángel Lamas, cerca del Hospital Militar, articulado con  los consejos comunales de la zona y los  comités locales de abastecimiento y producción (Clap),  sería posible erradicar esa plaga este mismo año.