Bolivia: fake news, deepfakes, debates a pedido del cliente y encuestas fraudulentas

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Diego Portal – La Época

La campaña electoral rumbo al 17 de agosto se ha visto marcada por un ecosistema de desinformación activo y sofisticado. La proliferación de encuestas falsas, audios y videos generados por Inteligencia Artificial (IA), suplantación mediática y campañas pagadas intensas han alterado el debate democrático especialmente influyendo en candidatos emergentes como Jaime Dunn, ahora ya inhabilitado para seguir en carrera, y Andrónico Rodríguez. La gran incógnita es cómo herramientas institucionales y ciudadanas podrán mitigar estos efectos para garantizar elecciones más transparentes y confiables.

A menos de dos semanas de las Elecciones Generales la ciudadanía enfrenta una ola de desinformación digital sin precedentes. Plataformas independientes como Bolivia Verifica y Chequea Bolivia han identificado al menos 45 casos, entre el 19 de mayo (cierre del registro de candidaturas) y el 11 de julio, en los que se detectaron encuestas falsas, audios y videos manipulados mediante IA, suplantación de medios y campañas de ataque pagadas en redes sociales.Ente electoral de Bolivia publica nueva cartografía para comicios de ...

A esto se suma una serie de foros-debates patrocinados por distintas organizaciones, principalmente de carácter empresarial (un dato que no es marginal)

Encuestas falsas o manipuladas: el arte de confundir

La estrategia más frecuente: encuestas fraudulentas, representa el 36% de los casos identificados. Estos sondeos carecían de ficha técnica, eran atribuidos a empresas no reconocidas o usurpaban identidades de medios formales como El País, Red Uno o Unitel.

Sin embargo, las encuestas supuestamente habilitadas por el Órgano Electoral, difundidas y patrocinadas por medios de comunicación comerciales, hegemónicos, también han perdido credibilidad ante la ciudadanía poniendo en duda sus datos, recibiendo acusaciones de los mismos candidatos –especialmente de quienes se consideran perjudicados con sus resultados– de haber sido financiadas subrepticiamente por algunas organizaciones políticas, es decir, se trataría de encuestas por encargo.

Asimismo, surgen en las declaraciones de políticos y candidatos la existencia de encuestas no autorizadas por el Órgano Electoral que dicen “no podemos publicar, pero que nos colocan como ganadores”. Esa es otra forma de desinformación que se ha vuelto cotidiana y que es amplificada por los medios de comunicación masivos sin restricción de ninguna naturaleza.

Vale la pena recordar que fue precisamente una encuesta la que disolvió el proyecto de unidad de la derecha que venía trabajándose desde el año pasado, cuando Jorge Quiroga pateó el tablero de juego acusando a Samuel Doria Medina de haber manipulado la encuesta incluso antes de ser conocidos los resultados del sondeo.

Samuel Doria Medina inicia ciclo de entrevistas múltiples a ...
Samuel Doria Medina

Ha sido también, supuestamente, otra encuesta de la que se ignoran los detalles de realización y resultados, a que habría llevado al empresario estadounidense-boliviano Marcelo Claure a declarar públicamente su apoyo al candidato empresario Doria Medina, desatando una guerra abierta entre los tres frentes de derecha que caminan hacia las próximas elecciones, guerra que aún no concluye y que ha puesto en evidencia compromisos, acuerdos y financiamiento dudoso hacia algunos de estos candidatos.

De modo más anecdótico, circuló el 18 de junio en TikTok una gráfica atribuida a la firma mexicana Enkoll y al diario El País de España que mostraba un “empate técnico” en el primer lugar entre Andrónico Rodríguez (21,6%) y Manfred Reyes Villa (20,4%). Tanto Enkoll como El País negaron haber elaborado o publicado dicha encuesta. Quión llevó adelante esta fake no se ha establecido, aunque habría que analizar para empezar a quién beneficia y a quién perjudica para poder deducir su origen.

Otro caso refiere que la cuenta de TikTok Stadistics Bolivia difundió encuestas que colocaban a Evo Morales con 18% de la intención de voto, basadas teóricamente en 34 mil 820 encuestados en Cochabamba, La Paz y Santa Cruz. La verificación descubrió errores en la redacción de nombres, datos inconsistentes y ausencia de metodología legítima. Las verificadoras confirmaron que ninguna encuestadora estaba autorizada por el TSE para publicar sondeos en este periodo electoral.

Chequea Bolivia contabilizó 61 contenidos basados en 14 encuestas falsas, con un impacto viral de más de 123 mil visualizaciones.

Deepfakes e IA: voces y rostros que nunca apoyaron

El 22% de los casos implicó manipulación por IA: audios y videos falsificados para simular declaraciones o apoyos ficticios.

Uno de los más difundidos fue un video viralizado el 27 de junio con la voz falsificada del presidente argentino, Javier Milei, diciendo: “ahora que Jaime Dunn está inscrito los de la vieja política en Bolivia la van a pasar mal. ¡Viva la libertad carajo!”. El material original correspondía a elecciones en Venezuela; el audio fue generado y alterado con IA.Admiten vacíos legales en elección ante deepfakes e Inteligencia ...

De forma similar circuló un supuesto mensaje del presidente salvadoreño, Nayib Bukele, felicitando a Dunn: “quiero felicitar a Jaime Dunn por la habilitación para ir por la Presidencia…”. La grabación fue artificial; jamás hubo tal mensaje oficial, según verificadores.

Muchísimos contenidos han circulado en las últimas semanas, particularmente en la red TikTok, fácilmente identificables como falsos, pero que en varios casos, por su viralización, generan corrientes de opinión y de desorientación desde luego en amplios sectores de electores, particularmente en aquellos que han dejado de guiarse por las formas tradicionales de comunicación para subsumirse dentro del poder de las redes sociales en sus variadas plataformas.

Suplantación de medios y financiamiento oculto

En el 24% de los casos se detectó suplantación de identidad de medios: uso fraudulento de logos y gráficas de canales como Red Uno, Unitel, CNN y El Deber para dar apariencia de credibilidad a noticias falsas o encuestas inexistentes.

Bolivia Verifica reveló una campaña de guerra sucia financiada con casi Bs 200 mil (28 mil 500 dólares) entre mayo y julio, mediante las páginas Click News y Bolivia News en Facebook. Estos portales difundieron contenidos falsamente atribuidos a medios internacionales.

Cuatro contenidos que usan el sello desautorizado de Bolivia Verifica ...El informe señala que “cuentas que difunden contenido falso son Click News y Bolivia News… invirtieron al menos Bs 196 mil 295 y 100 dólares en Meta Platforms”. Ambas páginas, administradas desde nuestro país y con anuncios pagados desde Cochabamba y Santa Cruz, simularon respaldo internacional para lo que era información completamente fabricada.

Plataformas clave: TikTok, WhatsApp y Facebook

TikTok fue el canal protagonista presente en 62% de los casos, especialmente en videos cortos con alta viralidad. WhatsApp estuvo implicado en el 38% de los casos, sobre todo para reenviar audios falsos o supuestas noticias urgentes. Facebook abarcó 36%, con postpatrocinados y difusión masiva de imágenes y videos falsos.

Candidatos al centro del ataque o el impulso artificial

Jaime Dunn, candidato inhabilitado, fue mencionado en el 27% de los casos, en su mayoría en encuestas y videos diseñados para inflar su carrera política. Las deepfakes asociadas a Milei y Bukele fueron parte de ese impulso errático.

Andrónico Rodríguez fue protagonista en el 24% de los casos, con campañas que lo mostraban como favorito o como renunciado falsamente a la candidatura mediante audios difundidos por WhatsApp.Asimismo es falso un video que relaciona al candidato boliviano Andrónico Rodríguez con el Cártel de Sinaloa.

Eduardo del Castillo también fue víctima de este tipo de campañas en un 15% de los casos, pretendiendo descalificarlo para seguir adelante con su candidatura.

También se detectaron campañas en contra de otros candidatos con deepfakes, audios falsos y anuncios pagados falsificando respaldos de medios extranjeros. Los menos afectados con estas campañas, sospechosamente, han sido Doria Medina y Quiroga.

El voto blanco, nulo y de los indecisos suma alrededor del 35% del electorado, según varias encuestas, lo que representa un espacio altamente vulnerable a estas tácticas de desinformación, siendo precisamente el grupo de electores a quienes estarían dirigidas estas campañas para captar su voto.

Hugo Miranda, de la Fundación Internet Bolivia, advierte que estas tácticas no son accidentales, sino que “son parte de operaciones sistemáticas para influir en la opinión pública y en los votantes”. Por su parte, Rodolfo Huallpa advierte que estas campañas apuntan a influir en votantes indecisos especialmente.

Según Enrique Revollo el acceso a internet en Bolivia alcanza al 78% de la población, y 92% de ellos son usuarios de redes sociales. Sin embargo, la reducción de equipos de verificación en plataformas como Meta, combinada con algoritmos de engagement, favorece la propagación de contenidos engañosos.

Los debates a pedido del cliente

De manera intensa, durante las últimas semanas, han proliferado los foros o debates entre candidatos, de características muy particulares. La mayor parte de estos están siendo convocados por organizaciones empresariales, el cual no es un dato menor; industriales, comerciantes, agropecuarios, en fin, los distintos sectores parecen haberse puesto de acuerdo para convocar a los candidatos que ellos consideran con “mayores posibilidades” de llegar al Gobierno para tomarles un examen acerca de sus propuestas y exigirles, en algunos casos incluso con presencia notarial, compromisos sobre lo que deben hacer y lo que no deben hacer en la eventualidad de ser elegidos en las próximas elecciones.

El canal privado Red Uno publicò una “encuesta virtual” ! liderada por el candidato del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), Eduardo del Castillo.

Situación parecida se ha dado en la mayor parte de eventos de este tipo convocados por medios de comunicación. Tres o cuatro candidatos, casi todos de derecha, preguntas aparentemente conocidas por los candidatos y ausencias reiteradas del candidato mejor posicionado, en las dudosas encuestas, de la izquierda.

Obviamente, este tipo de citas no contribuyen en absoluto a tender por un elector informado, sino todo lo contrario: manipulan y direccionan las respuestas y conclusiones a satisfacer las expectativas de los organizadores.

El gran reto democrático

La campaña electoral hacia el 17A se libra en un terreno marcado por la manipulación digital: encuestas falsas, financiación oculta, deepfakes y suplantación de identidad construyen narrativas falsas para moldear percepciones, foros y debates previamente arreglados. El impacto es real, ciertos candidatos emergen artificialmente fortalecidos mientras otros son deslegitimados sin pruebas.

Se ha perdido el contacto real con la gente, que era la forma habitual de buscar el voto. Hoy los candidatos están lejos del ciudadano. Se encierran preparando contenidos para ser difundidos por redes sociales o en spots televisivos o van a las entrevistas y debates en los medios simplemente para agradar a quienes los invitan. El ciudadano no sabe y no puede indagar nada acerca de los grandes temas nacionales que son la preocupación de las mayorías nacionales, pero que están fuera de la agenda de quienes ya se consideran candidatos ganadores.

La gran pregunta es si el Estado, a través del TSE, y la sociedad civil podrán reaccionar a tiempo. Hace falta una política nacional contra la desinformación, sanciones claras a quienes financien campañas sucias y alfabetización digital para que el electorado no sea engañado por voces o cifras manipuladas artificialmente.

La democracia se juega no solo en las urnas, sino en una batalla desigual por la verdad en los medios de comunicación y en las redes sociales. Lamentablemente ha quedado fuera la voz del ciudadano. Puede ser esa una de las razones que expliquen el enorme porcentaje de indecisos o de quienes anuncian voto nulo o voto en blanco.