Argentina: la economía es el centro de las preocupaciones
JUAN GUAHÁN| Si bien los temas que aparecen son otros, la economía está en el centro de las preocupaciones de la sociedad y el gobierno argentinos. El tema de las autopartes y el debate por inversiones de la brasileña Vale estuvo en el medio del debate con la Presidenta de Brasil. Hay que agregarle la evolución de la balanza comercial, el dólar y los “fondos buitre”. Se avanza en la aprobación de la “democratización de la Justicia”.
El gobierno y los medios de comunicación, oficialistas y opositores, tienen la mirada puesta en la aprobación de las leyes vinculadas a la propuesta oficial por la denominada “democratización de la Justicia”. Sin embargo la principal preocupación de la sociedad y el propio gobierno está en el ámbito de la economía.
Durante todos estos años el “modelo económico” funcionó sobre la base de una cuestión claramente positiva. Se trata de la confluencia de los superávits comercial y fiscal. En resumen, tanto en la famosa “Caja” del gobierno, como en nuestro comercio exterior era mucho más lo que entraba que lo que salía. En consecuencia no faltaban dólares, ni pesos. Eso ya no es tan así y allí vienen las preocupaciones. Hay necesidad de recaudar más y medir mejor en qué se gasta. Se redujeron algunos subsidios y se demoraron muchas obras.
La necesidad de dólares, para garantizar las importaciones necesarias y pagar lo que llaman deuda externa, hizo que aparecieran las restricciones en el mercado cambiario. A veces costaba conseguir las autorizaciones para determinadas importaciones, lo que motivó algunos problemas productivos y las dificultades para conseguir dólares para ahorrar o hacer viajes al exterior, trajo malestares en sectores medios.
De lo dicho se deduce la preocupación por la evolución de nuestra balanza comercial y su tendencia a que el superávit vaya disminuyendo. En marzo hubo un saldo favorable de 510 millones de dólares. Eso es un 49% menos que para el mismo mes del año pasado. Las exportaciones se redujeron un 6%, pero como los precios (en dólares) aumentaron un 2%, el descenso interanual fue del 4%. Las importaciones crecieron un 3%, pero dado ese aumento del 2% en el precio, el dato que resulta es que aumentaron el 5%.
En materia de importaciones el punto más crítico son los combustibles con un crecimiento del 58% en el volumen y a un precio que aumentó un 5%. El rubro exportable que más creció fue el automotor. Esto último que podría considerarse como un hecho halagüeño, resulta totalmente opacado por el hecho que por cada coche que fabricamos se incrementa, según información oficial, una balanza comercial negativa.
Ello se debe a que no se ha logrado incorporar una mayor proporción de autopartes locales. En este tema la sustitución de importaciones aún no ha dado los efectos esperados. Lo destacable es que el déficit, por este concepto, suma unos 6.800 millones de dólares. Esto es un 5,2% menos que el de 2011. En el mismo período la cantidad de autos producidos en 2012 ha sido un 7,8% inferior. Estas cifras son el efecto de un modelo impuesto desde la década de los 80. En las actuales circunstancias gran parte de nuestro déficit forma parte del superávit que tiene Brasil en esta materia. Es por ello que este ha sido uno de los puntos centrales de la reunión de las presidentas Cristina Kirchner y Dilma Rousseff.
¡Ay, el dólar!
Los señalados problemas llevaron a que se generara un mercado paralelo del dólar. Sus operaciones son escasamente representativas desde el punto de vista de los números grandes de la economía. Sin embargo su influencia va por otro lado. Sus valores son utilizados por muchos comerciantes para regular el precio de sus productos. Es archiconocida la imagen del comerciante o empresario que puesto a sacar una cuenta sobre el valor de un producto pone como índice, para calcular su valor de reposición, el de este dólar paralelo.
Esto genera múltiples y continuas distorsiones que se agigantan en la medida que la distancia entre el dólar oficial y este paralelo se incrementa. En estos días el crecimiento desorbitado de este dólar, que superó la barrera de los 9 pesos por dólar, trasmite una imagen que no es positiva y que se desparrama por variados sectores de la sociedad.
Los “fondos buitre”
Las empresas que manejan estos “fondos buitre” han manifestado que no aceptan la oferta hecha por nuestro país ante los Tribunales de Nueva York. Ante esa negativa se deberá oír la voz de esos Tribunales y el camino que aún le quedaría a la Argentina, en el caso que el fallo fuera negativo, es acudir a la Suprema Corte de los Estados Unidos.
La reunión de Cristina con Dilma
En la reunión entre Cristina y Dilma, más allá de los comentarios sobre las últimas películas que vieron, de “Infancia clandestina” y de las alabanzas de Dilma a Ricardo Darín y su obra “Un Cuento Chino”, hubo otros temas bastante más significativos. En materia política acordaron en la conveniencia del reingreso de Paraguay, una vez que asuman las nuevas autoridades, al seno del MERCOSUR.
Pero el tema central fue el económico. Dentro del mismo se destacaron dos cuestiones. El cierre de la minera brasileña Vale y la cuestión automotriz. Sobre Vale, una empresa con mayoría de capital estatal brasileño, que está abandonando su proyecto –en Mendoza- para explotar potasio y que afecta a miles de puestos de trabajo, la Presidenta de Brasil procuró bajar los decibles y expectativas, remitiendo la cuestión a un necesario diálogo entre las autoridades argentinas y los directivos de la empresa. Bastante más compleja es la situación, ya descripta, sobre el tema automotriz.
El convenio que regía en esta materia está culminando de modo que hay que discutir las nuevas condiciones. Allí el tema de las autopartes ocupa un lugar central y en próximas reuniones se procurará avanzar en esta materia incrementando la proporción de autopartes provenientes de la región.
Las leyes sobre democratización de la Justicia
Sobre la “Democratización de la Justicia”, de los tres proyectos más importantes -propuestos por el Ejecutivo- dos ya son leyes y el tercero vuelve en revisión al Senado. Ya son leyes la nueva regulación sobre medidas cautelares y la creación de las cámaras de casación y fue de vuelta al Senado la norma sobre el Consejo de la Magistratura.
En la nueva regulación de medidas cautelares hay una limitación de aquellas que procuran preservar los intereses de los sectores poderosos procurando eludir o dilatar la resolución sobre las cuestiones de fondo. Pero también pueden afectar a intereses amparados por derechos fundamentales de “sectores vulnerables o colectivos” frente a arbitrariedades del Estado o de particulares. Ante la evidencia de esta situación se flexibilizó este aspecto para hacerlo más compatible con algunos reclamos formulados. En términos generales avanza en un mayor poder del Estado frente a los particulares.
También es Ley la creación de tres Cámaras de Casación en lo Contencioso Administrativo, del Trabajo y la Seguridad Social, y Casación Civil y Comercial. El objetivo explicitado es descomprimir el trabajo de la Corte Suprema. No son pocos los que lo critican porque alargará la duración de los juicios. De este punto de vista lo más grave se plantea respecto a los juicios entablados por los jubilados porque con esta medida se prolonga –aún más- su reclamo.
El mismo día que se aprobaba esta Ley el juez de la Corte, Raúl Zaffaroni proponía algo mucho más sensato como sería una Corte de 19 miembros. Los 7 actuales para cuestiones de constitucionalidad general y los 12 restantes divididos en 4 salas de 3 miembros cada uno especializados en las materias específicas que hoy constituyen las respectivas Cámaras de Casación.
Por último hubo modificaciones a la norma aprobada en el Senado sobre los Consejos de la Magistratura. Su origen estuvo en una carta de funcionarios de las Cámaras de todo el país que la Corte remitió a Diputados y que motivara diversas denuncias en sentido de una negociación entre el gobierno y la Corte. La modificación afectó a dos cuestiones.
El manejo administrativo del sistema judicial queda como está, en manos de la Corte. Eso incluye el manejo del presupuesto, que es de unos 7 mil millones de pesos. También supone que los Secretarios de los juzgados no entrarán en el régimen de concurso público, que se plantea para el resto del personal judicial. La aprobación de esta norma estuvo acompañada por el escándalo fundado en que el oficialismo logró imponer la norma con 130 votos, sobre los 129 necesarios para su aprobación.
Al discutirse en particular hubo situaciones que desataron el escándalo y retiro de la mayor parte de la oposición al leerse en el “tablero electrónico” que solo había 128 votos para aprobar el artículo 2, donde se establecía la controvertida integración del Consejo de la Magistratura. Dos diputados, sobre cuyo voto en los días previos había dudas, manifestaron –luego- que su voto no había sido incorporado. Luego del retiro de oposición se volvió a votar y se ratificaron los 130 anteriores.
Los próximos pasos de esta norma serán contra reloj, la Presidenta necesita que la Ley esté promulgada antes del 13 de mayo, día en el que tiene que convocar a las elecciones del PASO (Primarias, a viertas, simultáneas y obligatorias), para el mes de agosto. Allí debería convocar también a la elección de los miembros del Consejo de la Magistratura, esa será la única sección de la boleta electoral que será la misma en todo el país.
Ya que estamos en el tema electoral recordemos que a partir del 13 de mayo empiezan a correr los plazos electorales y que los múltiples rumores y conversaciones deben transformarse en realidades. En este sentido el oficialismo lleva una gran ventaja, tiene clara la estructura y el centro de las decisiones. Lejos de ello está una oposición fragmentada y cargada de egos personales, difíciles de congeniar. Eso aparece como la realidad actual, aunque ella nunca pude considerarse definitiva.
Hay un dato que circula por diferentes corrillos políticos y que está en condiciones de conmover los armados electorales. Se trata de la posición del intenmdente de la localidad de Tigre, Sergio Massa. Si decide ir por su cuenta, sería el único en condiciones de conmover el esquema oficial. En dos o tres semanas más el misterio será develado. Es inimaginable que, ante esta perspectiva, el oficialismo se quede de brazos cruzados.