La gran guerra patria

1.-El 9 de mayo de 1945 un soldado planta la bandera roja de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas sobre las ruinas de la Cancillería del Tercer Reich Alemán. Ello decide el verdadero fin de la contienda y el futuro del género humano.

2.- Pues las dos guerras “mundiales” del siglo pasado fueron detonadas por potencias que arribaron tarde al reparto colonial del planeta y se enfrentaron con las que ya tenían asegurada su porción del botín. La demora se debió a su tardía consolidación nacional. Italia se unificó en 1861, Alemania en 1871, Japón solo logró modernizarse bajo la dinastía Meiji entre 1862 y 1912. Los dos últimos países lograron un desarrollo económico y estratégico decisivo en Europa continental y en el extremo Oriente. Solo les faltaba “Espacio Vital” o Lebensraum: un vasto imperio colonial para consolidar su hegemonía. Japón intentó conquistarlo a costa de China; Alemania en la alianza con el gran imperio otomano durante la Primera Guerra Mundial, y en el asalto contra Europa y la Unión Soviética durante la Segunda.Las tres veces que los rusos han tomado Berlín - Russia Beyond ES

3.- No se trataba solo de delirios patrioteros. Según lo señalaron Hilferding y luego Lenin, el capitalismo había llegado a su fase superior, el imperialismo, cuyas inversiones requerían la extracción de recursos y de trabajo baratos del resto del mundo. Este latrocinio solo podía ser garantizado por las armas.

4.- El geopolítico inglés John Mac-kinder codificó la lógica del pillaje planetario en 1919. Según él, la “Isla Mundial” comprende Asia, Europa y África, y dentro de ella Europa Central y Asia Oriental constituyen el Heartland o “corazón del mundo”. Luego, “quien gobierne Europa delEste dominará el Heartland; quien gobierne el Heartland dominará la Isla-Mundial; quien gobierne la Isla-Mundial controlará el mundo”. (Mackinder, H J “The Geographical Pivot of History”, Democratic Ideals and Reality, Washington D C: National Defence University Press).

5.-Violando los acuerdos de desarme que cerraron la Primera Guerra Mundial, con el apoyo de los grandes capitales, Hitler rearmó y militarizó Alemania, anexó Austria y ocupó Checoslovaquia. La invasión de Polonia en 1939 rompió el Pacto de Múnich, celebrado en 1938 entre Inglaterra, Francia, Italia y Alemania para apaciguar a esta cediéndole el dominio de la zona de los Sudetes en Checoslovaquia.

6.-La Europa continental fue cayendo tras ataques fulminantes de bombarderos y blindados contra objetivos primordiales. Francia, Bélgica, Dinamarca, Luxemburgo, Mónaco, Noruega, Grecia y los Países Bajos fueron conquistados en 1940; Hungría y Eslovaquia en 1941; Italia en 1943. Los gobiernos locales opusieron débiles resistencias. Sus sectores conservadores, casi sin excepción, colaboraron con los invasores. Con las metrópolis fueron ocupados sus imperios coloniales. La resistencia interna la llevaron a cabo fundamentalmente comunistas y socialistas.

7.- En 1941, el hasta entonces invencible ejército alemán y sus aliados europeos arrojaron 3.500.000 efectivos contra la Unión Soviética. Estados Unidos esperó hasta el ataque japonés a Pearl Harbor en diciembre de ese año para entrar formalmente en la guerra y
hasta mediados de 1944 para invadir por Normandía la Europa continental. En vano indicó Stalin, en 1943, en la Conferencia de Teherán a Churchill y Roosevelt que había llegado el momento de intervenir, pues los nazis habían dejado solo dos divisiones custodiando toda Europa.El infierno cotidiano de los soldados en la Segunda Guerra Mundial: qué  comían, el sexo y sus temores - Infobae

8.- Ya en la Primera Guerra Mundial Rusia había soportado la mayor cifra de muertos: 1,7 millones, mientras que Francia sufrió la pérdida de 1,4 millones. El poder soviético heredó la espantosa destrucción acarreada por dicha contienda, pero en apenas 24 años, a pesar de bloqueos, intervenciones y sabotajes, modernizó y fortaleció su extenso país para enfrentar y vencer al ejército más mortífero y numeroso que había existido en el planeta.

9.- La involucración de los actores se mide por el número de bajas en un conflicto que arrasó con 60 millones de existencias. La Unión Soviética venció al costo de más de 27 millones de vidas. China resistió al Japón y al Kuomintang con sacrificio de unos 20 millones de seres. Estados Unidos sufrió 450.900 bajas y el Reino Unido, 419.400 (Michel Chossudovsky; The Loss of Life: From the First and Second World Wars to the So-called “Post-Cold War Era”). Las sumas invertidas en el gasto bélico en ella se elevan a $1.075 trillón para 1945; calculando la devaluación para 2005, equivaldría a $11.292.682.078.166, 46 (http://caseagainstbush.blogspot. com/2005/04/fi nancial-cost-of-world-war-ii1u.html). La pérdida económica total sigue siendo incalculable.

10.- Ni una sola bomba cayó en territorio estadounidense. Por el contrario, el gasto armamentista rescató su economía sumida en crisis desde 1929, su influencia estratégica le permitió imponer el dólar como divisa de referencia mundial con los Acuerdos de Bretton Woods en 1944 y comenzar una política de “Guerra Perpetua” que se prolonga hasta hoy, con 37 intervenciones mayores y 20 millones de víctimas. Los demás actores heredaron de la contienda vastedades en ruinas.Bretton Woods: 70 años de un orden económico mundial – DW – 27/06/2014

11.- De no haber resistido los soviéticos, Europa y gran parte de Asia habrían caído bajo el dominio del Eje de Alemania y Japón imperial. Ambos habrían repetido contra los países conquistados sus políticas de limpieza étnica, genocidio sistemático y esclavitud de la fuerza de trabajo. Entre ambos se habrían repartido el extenso imperio colonial asiático y africano de los países europeos.

El movimiento de descolonización que liberó decenas de países como la India, Pakistán, Corea del Sur, Cuba, Argelia y Vietnam quedaría postergado. Inglaterra y Estados Unidos se habrían acomodado con los vencedores; bajo la presión de estos partidos fascistas locales, habrían terminado por conquistar el poder o influir en él decisivamente. Es probable que la competencia entre los imperios vencedores hubiera detonado un nuevo Armagedón.

12.- Todos aquellos que no están hoy tras las alambradas de un campo de concentración o en sus oficinas administrativas deben agradecerlo a la Unión Soviética y a la República Popular China. Su desmesurado sacrificio abrió el paso a cambios que todavía nos permiten alternativas.