Carnaval
Luis Britto García|
• Una vez más el Carnaval que disfraza de infancia la vetustez de las ciudades.
• Vuelve cada doce meses el intento de no ser quienes somos siendo
quienes jamás fuimos.
• Nunca es más feliz el papel liberado de soportarlo todo en el
vendaval del papelillo.
• La serpiente disfrazada de pájaro aletea en la serpentina.
• La liberación sólo llegará cuando las cadenas tengan la levedad de bambalinas.
• Allá va el papel verde disfrazado de dólar.
• Enmascara el Imperio sus genocidios como humanitarios.
• Se traviste la oleada terrorista de oposición democrática.
• Desfilan el asesino y el alcahuete pintarrajeados de defensores de
derechos humanos.
• Allá desfilan esbirros maquillados de víctimas, sicarios
travestidos de disidentes, descuartizadores trajeados de mártires.
• Allá va el político maula disfrazado con los símbolos de su adversario.
• Se despeña la comparsa de quienes creen que se convertirán en
millonarios votando por ellos.
• Aquí viene el Rey verdadero con corona de cartón.
• Allá van las coronas de verdad con reyes de cartulina.
• La felicidad sería poderse quitar y poner a capricho la máscara del rostro.
• Pasa la comparsa de los celulares que disfrazan las voces de estática.
• Allá desfila quien se disfraza sucesivamente de todas sus personalidades.
• Debe prohibirse a la mujer que amamos que se disfrace de otra cosa
que de ella misma.
• Pobrecitos los niños a quienes sus padres imponen el disfraz de
vaqueros, de piratas, de califas antes de que las academias los
disfracen de abogados, de ingenieros, de matasanos.
• Insólito en el Carnaval ir disfrazado de uno mismo.
• Lo que nadie ha probado es disfrazarse de disfraz.
• Allá van las damas con las eternas máscaras de las cirugías
estéticas, los teñidos, las fajas, los maquillajes extremos.
• El colmo llega con el concurso de payasos tristes tratando de
hacerse reir unos a otros.
• Intenta el Carnaval con la máscara de un día disculpar la que
llevamos todo el año.
• Cesará el gran carnaval del mundo cuando todos andemos desnudos.
• A la ceniza van todos los disfraces y los disfrazados al polvo.