“Los presidentes latinoamericanos deberían reconocer que fue una barbaridad integrar la Minustah”
MARIO HERNÁNDEZ|En dos entrevistas reunidas en esta nota, Henry Boisrolin, del Comité Democrático Haitiano, habla de las gestiones realizadas junto al senador Jean Charles Möise por el retiro de las tropas uruguayas de Haití. Hace pocos días atrás el presidente José Mujica comunicó la decisión de retirar el contingente uruguayo en febrero.Rebelión/Argenpress
–¿Qué información tenés de esta noticia difundida por el diario uruguayo La República, incluso haciendo referencia a la reunión mantenida con el presidente uruguayo?
.Hay distintas versiones de la presentación hecha por Mujica en un Consejo de Ministros. Una es la que mencionaste, en Haití se comenta que Mujica dio un ultimátum al presidente Martelly que en caso de no realizar elecciones,
Uruguay se retiraría en el plazo de tres meses, lo que implica una condición. Hay una tercer versión que vincula esta decisión uruguaya a la voluntad de retirarse de Brasil y Bolivia que ha prorrogado la permanencia por seis meses en vez de un año porque van a llamar a una reunión legislativa para examinar el retiro. Significa que estamos en un momento bastante delicado donde hay que manejarse con prudencia frente a esta catarata de informaciones contradictorias.
Mujica escuchó atentamente las razones por las cuales nosotros exigimos el retiro de la Minustah, cuyas tropas fueron enviadas supuestamente por 6 meses y van a cumplir 10 años y en vez de estabilizar, el país está desestabilizado, en vez de ayudar a institucionalizar, como ellos dijeron, hace 3 años que ni siquiera pueden organizar una elección.
Le hemos planteado el fracaso de esta política en todos los sentidos haciéndole ver que es un atentado a la dignidad del pueblo haitiano por todos los actos cometidos y por atribuirse el derecho de inmiscuirse en los asuntos internos del país. La historia ha demostrado que nunca un pueblo puede desarrollarse y alcanzar niveles de respeto si está ocupado por tropas extranjeras.
Mujica estuvo acompañado por el canciller Luis Almagro y el vice-ministro de Defensa, Menéndez, quienes no plantearon ningún argumento en contra a todo lo que les describimos, incluso a nuestra caracterización respecto al Presidente Martelly y su Primer Ministro. No hemos escuchado ninguna objeción, solamente preguntaron quién iba a reemplazar a Uruguay si retiraban las tropas ya que pensaban que esa medida no iba a modificar absolutamente nada de la situación.
Le respondimos que nosotros éramos conscientes que el retiro de las tropas uruguayas no será el fin de la Minustah, pero representa simbólicamente un hecho importante, más que simbólico, porque la unidad que venía desarrollándose fuertemente durante 10 años si ahora un país se retira, por más chico que sea, significa que se ha producido una fisura y también sería un aliento para el pueblo haitiano en su lucha por reclamar el fin y el retiro total de las tropas de ocupación del país.
Al plantear esta situación, el presidente Mujica nos dijo que le gustaría visitar Haití y que si dependiera de él sacaría las tropas inmediatamente y que no puede hacerlo sin antes consultar y se comprometió a hablar con Brasil y Argentina. También nos pidió nuestros datos personales para seguir comunicados.
Dio la impresión de que había hechos que no conocía y cuando le planteamos el caso del joven haitiano violado en Port Salud por militares uruguayos, ni él ni el canciller salieron a defender la posición oficial del gobierno uruguayo. No contestaron absolutamente nada. Se limitaron a escuchar. Esto significa que nuestros argumentos son sólidos por el sencillo hecho que corresponden a la verdad de lo que está ocurriendo en Haití.
Es verdad cuando le dijimos que el gobierno fue impuesto por la comunidad internacional. Que están las tropas de Brasil, Argentina, Uruguay, etc., pero las compañías que están explotando las minas de oro son canadienses, norteamericanas y francesas.
-Te voy a agregar una cuarta versión: que el retiro de las tropas uruguayas estaba condicionado a que lo hiciera Brasil.
– Esta última versión se complementa con que unos días antes de la declaración de Mujica estuvo en Montevideo el canciller de Brasil muy enojado planteando que se retirarían por r violaciones a la Constitución haitiana, el tema electoral, etc.
–También hubo gestiones en Brasil de dirigentes políticos opositores de tu país.
-Lo cierto es que se ha puesto en agenda algo que antes no se discutía. Es el primer dato objetivo de la realidad. Para hacer un análisis político no podemos dejar de ver la resistencia permanente y continua in crescendo del pueblo haitiano en contra de la ocupación desde los primeros instantes. Nadie puede negarlo y eso tiene su peso a la hora de tomar estas “decisiones” de salida de las tropas de Brasil y Uruguay.
-Ustedes le advirtieron al canciller uruguayo Almagro que iban a haber movilizaciones muy importantes y las tropas de la Minustah se iban a ver obligadas a reprimir.
– Que iban a tener un costo político que pagar. Un segundo elemento es que no pueden salir diciendo que durante nueve años se han mandado macanas, que fue un error, etc. Para mí están buscando un pretexto para salir con la frente un poquito alta.
Está el tema del cólera, de las violaciones de niños, de la represión, de las medidas arbitrarias, dictatoriales que están tomando miembros del gobierno de Martelly. Es una situación bastante incómoda, además de las movilizaciones que se están dando en este momento, casi diarias, pidiendo la renuncia de Martelly y el retiro de la Minustah.
Hoy estaban interpelando en el Senado a tres ministros, los de Justicia, Defensa y RR. EE. La Constitución haitiana dice que en caso de interpelación tiene que terminar con un voto de confianza o de censura. La idea sería dar este último, lo que significa la remoción de los ministros. El próximo paso será interpelar al Primer Ministro, el Jefe de Gobierno. Hacen falta 16 votos, no creo que los reúnan, pero de cualquier manera es una situación bastante crítica.
También llamaron a los partidos políticos para anotarse en las elecciones y los principales grupos políticos como Lavalas, OPL, etc., no se han presentado sino un montón de grupúsculos que apoyan a Martelly. La razón fundamental es que no puede haber elecciones sin Ley electoral, cosa que no existe, porque Martelly sostiene que es la de 2008, desconociendo la Constitución posterior y actualmente en vigor, que no es compatible.
Acá hay una maniobra clara y eso es lo que están cuestionando los brasileros y uruguayos. Se agarran de este hecho para justificar su retiro. Una decisión que aparentemente tiene un costado de chantaje hacia el gobierno haitiano pero también hacia el pueblo. Parece que estuvieran diciéndonos: fuimos a ayudarlos a consolidar las instituciones democráticas, pero frente a la resistencia de los gobernantes haitianos, nos retiramos.
Estamos frente a un escenario complejo, que se ensucia día a día, al mismo tiempo que no respetan la dignidad del pueblo haitiano. Por eso al comenzar te decía que hay que tener prudencia para analizar estos anuncios y también ver realmente qué va a pasar cuando vuelva a su actividad Cristina Kirchner, qué posición asumirá Argentina.
-Que tiene el otro contingente más numeroso junto con Brasil.
– Y que suministra a la Minustah el único hospital que tienen en Haití.Exigimos el retiro de todas las tropas de manera incondicional.
-Hemos escuchado varios argumentos para justificar la presencia de las tropas latinoamericanas.
-Algunos te quieren correr por izquierda diciendo: “si no estamos nosotros, lo harán los norteamericanos”. Yo repito siempre que no entiendo por qué si la Minustah está para impedir la llegada de los norteamericanos, después del terremoto los yanquis desembarcaron 20.000 soldados, casi el doble de los efectivos de la Minustah. Ocuparon el aeropuerto de Puerto Príncipe, no dejando aterrizar a nadie, ni siquiera a un avión francés que venía con insumos y tuvo que hacerlo en Santo Domingo y entrarlos por tierra.
Le conté al presidente Mujica que en oportunidad del terremoto personalmente vi en la puerta del hospital estatal de la Universidad de Puerto Príncipe a soldados norteamericanos que decidían quién entraba y quién no. También vi en la bahía de Puerto Príncipe siete buques de guerra norteamericanos, dos portaaviones nucleares y un solo barco hospital. ¿Dónde estaba la Minustah en ese momento?
El otro argumento es que si se van las tropas, los haitianos vamos a matarnos entre nosotros. Le dije a Mujica que hay argumentos de “izquierda” que no son serios. Nadie va a creer que el Consejo de Seguridad envió las tropas para evitar que nos matemos. Eso no ocurrió en Ruanda ni en Congo ni en ningún lugar. Cada vez que intervienen es porque lo deciden los países centrales. En nuestro caso, fundamentalmente el imperialismo norteamericano. Cuando se plantea este argumento para evitar la salida de las tropas, lo rechazamos y aprovechamos para decirle que hay otros intereses en juego, donde el pueblo haitiano ha sido sacrificado y nadie desde la izquierda puede creer que un pueblo sin soberanía, sin autodeterminación puede hacer algo. Los objetivos primordiales son éstos.
Tanto el senador Moïse como yo insistimos que además de la falta de respeto a la dignidad, estamos totalmente convencidos que la inmensa mayoría del pueblo haitiano está en contra de la Minustah y por el retiro de las tropas.
-Mencionaste el tema del cólera y estuve leyendo unas declaraciones de funcionarios de la ONU que son vergonzosas en relación a una presentación reclamando indemnizaciones para los afectados.
– La ONU se niega porque no acepta reconocer su responsabilidad. Está probada, absolutamente, por distintos estudios realizados por científicos internacionales que fueron a Haití. También de universidades norteamericanas concluyeron lo mismo. No hay ninguna duda pero no lo reconocen.
– Que el cólera fue introducido por soldados nepaleses miembros de la Minustah.
– Exactamente. Y lo más grave es que son más de 8000 muertos y 600.000 personas infectadas. Son cosas muy graves. A mí me gustaría escuchar a los presidentes latinoamericanos reconociendo que fue una barbaridad integrar la Minustah y ver de qué manera pueden sentarse con los haitianos, de forma mutuamente respetuosa, para hablar de solidaridad, no de ayuda porque da la idea de caridad.
Solidaridad significa comprensión igualitaria de los problemas de quien está en frente mío, de sus problemas, y ver cómo podemos solucionarlos. Cuando vos decidís lo que yo necesito es una visión imperial, paternalista. Eso no conviene al pueblo haitiano. Además, no puede haber ayuda ni solidaridad sin que recobremos nuestra soberanía y el derecho a la autodeterminación.
Será a partir de ahí que podremos sentarnos a una mesa y definir nuestras prioridades, en caso contrario, los demás lo harán desarrollando programas como el Pro-huerta, cloacas o construir un hospital un día, prestar plata, dar becas, pero eso no es lo que necesita el pueblo haitiano sino, en primer lugar, que respeten su dignidad, su soberanía y su derecho a autodeterminarse. Eso para nosotros no es negociable.
En primer lugar, exigimos el retiro de todas las tropas de manera incondicional. No porque estemos en contra de Martelly vamos a aceptar que el presidente Mujica dé un ultimátum. Más allá que Martelly haya sido elegido ilegalmente, no queremos que nadie se meta en nuestros asuntos internos. Ese principio es sagrado y va en línea directa a la lucha por nuestra independencia y a nuestros héroes, sobre todo, Dessalines.
Lo repito, analizamos con prudencia, no cantamos victoria, sería bueno que las tropas se retiraran pero queremos verlo en los hechos.
Fuentes: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=176672 yhttp://www.argenpress.info/2013/10/henry-boisrolin-mujica-se-comprometio.html