Renunció canciller peruano y ya tiene reemplazo

310

El canciller peruano, Rafael Roncagliolo, finalmente renunció a su cargo y ya fue reemplazado por Eda Rivas, quien fue juramentada esta misma tarde por el presidente Ollanta Humala para conducir el Ministerio de Exteriores. Roncagliolo estaba al frente de la diplomacia peruana desde la llegada de Humala al poder en julio de 2011.

AVN

De acuerdo a la presidencia peruana, su dimisión se debe a razones de salud. Durante el acto de juramentación de la nueva canciller, Humala hizo votos por la pronta recuperación del exministro.

“Todos hacemos votos para que pronto tengamos a Rafo Roncagliolo restablecido en su salud”, manifestó el Presidente.

Sin embargo, un mar de elucubraciones ha despertado la renuncia de este canciller. Roncagliolo se vio recientemente involucrado en gestiones poco transparentes alrededor de la Unasur que casi producen un impasse diplomático con el gobierno venezolano del presidente Nicolás Maduro.

La causa de este impasse se produjo cuando el canciller saliente declaró que Perú estaba promoviendo una declaración de la Unasur para emplazar al gobierno de Nicolás Maduro a “promover el diálogo y la tolerancia en Venezuela”, después que habían ocurrido los hechos sangrientos provocados por el candidato perdedor, Henrique Capriles, al desconocer los resultados electorales y llamar a la violencia en las calles del país.

El problema diplomático entre ambos países a raíz de esta declaración fue superado y no llegó a mayores gracias a la conversación directa que sostuvieron posteriormente los mandatarios Humala y Maduro, lo cual despejó cualquier duda sobre la presunta intención del Perú de estar ejerciendo presión sobre el gobierno constitucional de Venezuela.

Pero el problema persistió cuando el propio Roncagliolo, durante la gira del presidente Maduro por los países del Mercosur, insistió en declararle a la prensa que Peru seguía “haciendo gestiones” para que la Unasur se reuniera para tratar el tema de Venezuela, información que fue inmediatamente difundida por los medios opositores al gobierno bolivariano, tanto dentro como fuera del país.

La desafortunada declaración de Roncagliolo obligó a la cancillería peruana, horas después, a aclarar las declaraciones emitidas por éste y difundirlas a las distintas embajadas del Perú en los países miembros de la Unasur. En esta aclaratoria, el propio canciller saliente salía diciendo de manera categórica, y desdiciéndose, que “no está en agenda la convocatoria a una reunión de Unasur sobre Venezuela”.