Zozobra por la llegada de tropas estadounidenses a Perú
Mariana Álvarez Orellana
El anunciado arribo de tropas de EEUU genera zozobra en Perú por el contexto de preparativos de protestas sociales y por los antecedentes intervencionistas de Washington, opinó hoy un congresista peruano.
Con aprobación de la Resolución Legislativa 4766, por parte del Congreso, se autorizó el ingreso de tropas militares de los Estados Unidos de América al territorio nacional peruano, entre el 1 de junio y el 31 de diciembre de 2023.
El excanciller peruano Héctor Béjar condenó hoy la próxima llegada de 700 militares estadounidenses como apoyo a las operaciones de las Fuerzas Armadas y la Policía, cuando organizaciones sociales alistan nuevas protestas antigubernamentales. Advirtió que no es casual que este arribo ocurra el 1 de junio, cuando en Perú hay “un gobierno espúreo, resultado de un golpe de Estado y autor de 70 muertes, como respuesta a las protestas que se desarrollaron contra la presidenta Dina Boluarte”.
El secretario general de la Confederación General de Trabajadores de Perú (CGTP), Gerónimo López, calificó este hecho de injerencia extranjera inadmisible, pero aceptada por el gobierno peruano, y también encubre la presencia de bases militares de Washington.
“Luego de entregar el litio y otros recursos al extranjero, Dina Boluarte y el Congreso socavan la soberanía nacional autorizando el ingreso de tropas de Estados Unidos para ‘formación’ de policías y militares’”, declaró la ex ministra de la Mujer Anahí Durand.
El parlamentario de izquierda Guillermo Bermejo y el jurista y analista Raúl Noblecilla, se sumaron al rechazo de diversas personalidades que consideran a la intervención extranjera como amenaza para la soberanía nacional.
Bermejo señaló que los 700 militares estadounidenses, que realizarán labores de apoyo y entrenamiento a las Fuerzas Armadas y Policiales en 11 regiones peruanas y cinco de ellas fueron escenario de grandes protestas antigubernamentales en meses pasados, cuyo reinicio anuncian dirigentes sociales.
Su presencia en esas regiones “no ayudará a que exista un clima de paz” y, por el contrario, genera zozobra “porque la gente conoce la conducta de estas tropas en otras partes del mundo”, agregó.
El decreto legislativo que autoriza la entrada de las tropas extranjeras para una permanencia de siete meses, no amenaza la soberanía nacional porque su objetivo no es establecer una base militar, aseguró el legislador derechista Alfredo Azurín, miembro de la Comisión de Defensa, al defender el permiso otorgado.
Bermejo, sin embargo, señaló que la presencia militar de EEUU en Perú se ha convertido en permanente por la práctica congresal de renovar la autorización de permanencia una vez cumplido el tiempo fijado en el permiso original, lo que ocurre desde hace 20 años.
Desestimó también el argumento del apoyo de las tropas intrusas a la lucha contra el narcotráfico, y dijo que sus incursiones “no está ayudando en lo absoluto a luchar contra el tráfico de drogas”.
Las zonas a las que se les permitirá ingresar son lugares donde el narcotráfico está desbordado, lo único novedoso es Loreto, que por ejemplo hace diez años no era un lugar donde se sembraba coca ni se traficaba droga”, refirió.
Por su parte, ele jurista Raúl Noblecilla afirmó que las tropas, que llegarán el primer día de junio próximo, vienen a controlar las riquezas minerales peruanas y comentó que “Así funcionan los gobiernos lacayos y entreguistas”.“La presencia e injerencia del imperialismo es tener controlado su patio trasero”, advirtió.
*Antropóloga, docente e investigadora peruana, analista asociada al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)