¿Volverá Berlusconi transmutado en euroescéptico?
Parecía haber desaparecido de la escena política, sin embargo, Silvio Berlusconi ha reaparecido recientemente. El exprimer ministro ha roto el silencio con que se enfrentó a sus últimos problemas legales para subirse a la ola de euroescepticismo generada por el humorista Beppe Grillo, quien ha evocado la salida de Italia de la zona del euro, e incluso la de Alemania, si ésta no acepta fortalecer el papel del Banco Central Europeo. Según La Repubblica , esta actitud amenaza la estabilidad del Gobierno técnico de Mario Monti, que se apoya en los tres partidos principales:
Justo cuando la máxima cohesión nacional se impone, la “Grosse Koalition a la italiana” amenaza con romperse y se deja tentar por la idea de una celebración anticipada de las elecciones. Mario Monti está entre la espada y la pared a sólo dos días de la cumbre de la UE. Las cancillerías del continente lo ven como el mediador del cual depende el éxito de la operación. Las direcciones de los partidos políticos italianos lo ven como el catalizador al que se le puede atribuir la responsabilidad ante cualquier fracaso. […] El Pueblo de la Libertad [el partido politico de Berlusconi], se ha visto sacudido por una improbable e inoportuna resurrección de “Il Cavaliere”. Esta versión berlusconiana de Amanecer Dorado [el partido de la extrema derecha griega] ha prometido dos cosas: una patética guerra contra Alemania, y una batalla autárquica frente al euro.
Esta revancha populista […] es una propuesta política desesperada. El Gobierno no tiene alternativas. Monti, con todas sus limitaciones y errores, es lo más creíble que la Italia de hoy puede ofrecer. Pero sería equívoco pensar que Monti debe durar sólo por esta razón.
Los sobresaltos de Berlusconi suscitan preocupación más allá de las fronteras italianas. En el Reino Unido, por ejemplo,The Guardian teme un eventual regreso de Berlusconi. En un editorial titulado “Por favor, otra vez no”, el diario de Londres señala que
El multimillonario goza de una cantidad casi ilimitada de recursos para tirar en una campaña. En recientes comentarios ha indicado las ventajas que tendría Italia en las exportaciones si la industria hiciera sus transacciones de nuevo en liras. Berlusconi es un potencial ganador de las elecciones. Italia es más euroescéptica de lo que a menudo se piensa. Aunque sigue siendo proeuropea, en tanto que Bruselas es vista como un mejor proveedor de buena gobernanza que Roma, el euro se ha empezado a asociar con la inflación. Hoy en día se ha convertido en el icono del estancamiento. La popularidad de Mario Monti, como el tecnócrata encargado en exclusiva de reducir el déficit presupuestario, ha caído en picado.
Italia no tiene dinero en las arcas para estimular el crecimiento, como demuestra el decreto sobre crecimiento que se esperaba desde hace tiempo, y que fue aprobado por el Gabinete después de que el Tesoro eliminara sus disposiciones más radicales. No obstante, sin crecimiento, Italia no podrá pagar su creciente deuda. El euro no pinta bien y Berlusconi no es el único político que que se aferra a la idea de que Italia podría recuperar crecimiento por medio del regreso a la lira, la devaluación y un auge de las exportaciones. Pero podría posicionarse para ser el principal beneficiario.
*Presseurop , La Repubblica, The Guardian