Venezuela: se viene el “Mostacho Fest”, mientras la oposición no sale de su laberinto
Marcos Salgado |
El Consejo Nacional Electoral fijó fecha para las elecciones presidenciales de 2024 en Venezuela. Serán el domingo 28 de julio. También difundió el cronograma electoral, que incluye la presentación de candidaturas con fecha tope para el 25 de marzo.
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El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ya tiene candidato: es el presidente Nicolás Maduro, quien se presentaría así para un tercer mandato, una segunda reelección consecutiva.
Si efectivamente esta revalidación de liderazgo sucede, al promediar su nuevo mandato Maduro superaría al Comandante Hugo Chávez en tiempo al frente del gobierno en Venezuela.
Así, si del lado del chavismo los nombres están claros, en la oposición no. Para nada. Especialmente en el sector más díscolo, el que viene apostando y operando para la caída inmediata de Maduro que, se sabe, nunca ocurrió.
Primarias fallidas y dilema opositor
Ese sector comenzó el 2023 con un intento de alcanzar iniciativa política, con un llamado a elecciones primarias que se desinflaron a medida que se avanzaba hacia la fecha del comicio interno.
Finalmente fue la furibunda antichavista María Corina Machado la que copó la parada. Y se alzó con una victoria pírrica: según cálculos serios, fueron menos de un millón los que llegaron a los “centros electorales” de una elección autogestionada.
Antes varios precandidatos, como el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles Radonski, le sacaron el cuerpo a la compulsa, mientras los que se quedaron terminaron aupando a Machado.
“Maduro va a tener que venir a hablar conmigo” vociferaba Machado la misma noche de su victoria en la raída primaria. Un protagonismo que no duró nada. Sigamos esta breve cronología.
A finales de 2023, Machado se presentó ante el Tribunal Supremo de Justicia en virtud de un acuerdo entre el gobierno y los opositores ultras, para revisar los procesos administrativos contra opositores.
Machado llegó al TSJ que aborrece sobre el final del plazo, apenas acompañada por algunos periodistas, alertados por un posteo en X de la oficina de Estados Unidos para Venezuela, una especie de embajada no reconocida que despacha desde Bogotá.
“Aplaudimos a María Corina Machado y a los otros candidatos por su valentía y disposición para apelar sus inhabilitaciones” dijo la diplomacia estadounidense en la ex Twitter. “Ahora la pelota está del lado de Maduro”, ensayó entonces Machado.
MCM Inhabilitada
En enero de 2024, el TSJ convalidó la medida administrativa de la Contraloría contra Machado, sancionada con inhabilitación para ejercer cargos públicos por no presentar declaraciones juradas de bienes, y por actos contra las instituciones venezolanas.
Según el relato de Machado y los suyos, sostenido por algunos medios centrales y un puñado de políticos venezolanos fuera del país, ella es la mujer que interpreta el sentir mayoritario de Venezuela. Sin embargo, el viernes que dictaminó el TSJ no pasó nada.
Ni una movilización, ni una pequeña reacción espontánea de rechazo. Ni siquiera cacerolas desde los balcones de clase media, tan comunes en otro momento como instrumento de protesta contra el chavismo.
Las únicas aglomeraciones que logró MCM en esos días fueron con periodistas, que por decenas y decenas, muchos de ellos del exterior del país, la escucharon diciendo que la lucharía “hasta el final”.
En eso está, todavía, aunque al decir de dirigentes del gobierno como Diosdado Cabello, el final se acerca y tiene fecha: el 25 de este mismo mes de marzo, cuando termine el plazo de inscripción de candidaturas ante el CNE.
Llamados a la violencia
Desde Miami, donde juega al paddle, el ex “presidente interino” Juan Guaidó azuza a los que no se fueron como el para que acompañen a MCM a presentar su candidatura ante el CNE en Caracas. Muchos lo ven como un llamado a la violencia callejera.
Esa perspectiva no parecen acompañarla ni los medios internacionales que en su momento ensalzaron a Guaidó y mandaron a tomarle fotos de estudio, mientras otros lo llamaban “presidente” en ruedas de prensa interminables.
Será, como dice el dicho, que el que se quema con leche ve una vaca y llora, o simplemente porque las “orientaciones” desde Washington cambiaron, pero lo cierto que el seguimiento de los medios occidentales a MCM es mucho menos decidido.
¿Más sanciones o más petróleo?
En el calendario inmediato de la política venezolana no solo hay que marcar el 25 de marzo, fecha tope para la presentación de candidaturas y para la reconfirmación -ya final- de la inhabilitación de MCM.
También hay que anotar los primeros días de abril, cuando la Casa Blanca debe decidir si reinstaura o no algunas medidas coercitivas que suspendió el año pasado, que condicionan la operación de empresas estadounidenses en Venezuela.
Pero todo indica que la administración Biden no dará marcha atrás. La agencia Bloomberg aseguró esta semana que desde febrero la estadounidense Chevron reanudó la perforación de un yacimiento virgen en la faja petrolífera del Orinoco.
Bloomberg asegura que se planean perforar hasta 30 nuevos pozos hasta 2025, que permitiría a Chevron aumentar hasta en un 35% su producción en Venezuela en las empresas que gestiona con la estatal venezolana PDVSA.
Quieren producir hasta 250 mil barriles diarios, “lo que supondría un mayor suministro enviado a EE.UU”, dice Bloomberg. La pregunta, entonces: ¿interrumpirá la Casa Blanca esta expansión para respaldar a una “candidata” que no agarra impulso?
“Mostacho Fest”, hasta julio
Mientras la oposición sigue sin poder agarrar el ritmo de los tiempos, el presidente Nicolás Maduro anunció que sobre finales de mes se realizará el festival Mostacho Fest en nueve ciudades de Venezuela.
Durante la inauguración de la primera Zona Juventud de la Gran Misión Venezuela Joven en el estado Falcón (norte), Maduro explicó que la idea es brindarle a los jóvenes, espacios amenos y de diversión.
“Es la hora de mostrar la Venezuela de verdad. Caerles encima a los mercenarios tarifados que mal hablan y mal ponen de nuestro país. Ya basta“, dijo Maduro y reiteró: “Arrancan las rumbas, el baile”.
Mientras tanto, el PSUV comenzó su proceso para proclamar a través de un congreso la próxima semana la candidatura del presidente Nicolás Maduro para el próximo período presidencial, que va a de enero de 2025 a enero de 2030.
Una situación la del oficialismo mucho más clara que la de la oposición, que mientras debería estar buscando contra reloj un candidato viable, todavía parece soñar con climas de violencia que nada tienen que ver con el momento actual de Venezuela.