OIT: ¿Quién odia el poder en el sector público?
Eduardo Camin
La importancia de los estudios sociales concretos con sus estadísticas no es un simple ejercicio escolástico, sino que muchas veces determinan elementos prácticos que permite valorar la eficacia de tal o cual método.
Un reciente informe concebido por dos expertas de la OIT, Maríe-Clare Sodeergren (1), economista superior y Rosina Gammarano (2) Estadista Laboral Senior, miembros de la Unidad de Producción y Análisis de Datos del Departamento de Estadística de la OIT, (ILOSTAT) desarrollaron un trabajo científico, muy interesante vinculado a profundizar en las características y condiciones de trabajo de los funcionarios que suministran bienes y servicios esenciales y en el impacto del sector público a la hora de abordar las desigualdades del mercado laboral.
Partiendo de la base que el sector público es una piedra angular de nuestras sociedades y economías. Contrariamente a las ideas sugeridas por algunos de los actuales dirigentes delirantes caso Javier Miley que se manifiesta como el Topo al interior del Estado con fines de destruirlo, a pesar de vivir de él o ¿quién paga sus viajes?
Ambas expertas orientan el trabajo hacia el sector público que garantiza el suministro continuo de bienes y servicios esenciales como la educación, la sanidad, los servicios públicos, el transporte, las infraestructuras viarias y el reparto del correo, por citar algunos, al tiempo que desempeña un papel clave en el fomento del crecimiento y la justicia social. En el centro de estas funciones están los trabajadores del sector público, que sirven a nuestras comunidades garantizando el funcionamiento de instituciones vitales.
Alcance del sector público
Según las últimas estimaciones de la OIT, algo más de una décima parte (11%) del total mundial de la ocupación trabaja en el sector público. Aunque la ocupación varía de una región a otra, aumentando con el nivel de renta nacional. Por ejemplo, el 16% de los ocupados trabajan en el sector público en los países de renta alta, frente a sólo el 7% en los países de renta baja. La región de los Estados Árabes destaca por un sector público especialmente amplio en comparación con otras regiones, donde representa el 25% de la ocupación.
El contexto actual, marcado por una reciente pandemia, la vulnerabilidad al cambio climático, la crisis del coste de la vida y los conflictos ha provocado una demanda sostenida de bienes y servicios públicos. Sin embargo, la mayoría de los gobiernos no han aumentado la proporción de la ocupación en el sector público para satisfacer esta demanda. Por el contario en la última década, la proporción del sector público la ocupación disminuyó en 58 de los 94 países sobre los que se dispone de datos. En los 34 países en los que aumentó la proporción de la ocupación en el sector público, el aumento medio fue de apenas 1,3 puntos porcentuales.
Actividades económicas cubiertas por el sector público
El sector público desempeña un papel central en el suministro de bienes y servicios esenciales, así como en la promoción del crecimiento, la cohesión social y el bienestar comunitario. Se basa en la diversidad de su mano de obra, repartida entre distintas actividades económicas y ocupaciones. Además, el sector público parece mejor equipado para abordar las desigualdades típicas del mercado laboral, como el acceso general a la ocupación, el acceso a puestos directivos y las disparidades en el tiempo de trabajo y el salario. Como tal, el sector público puede actuar como faro para otros empleadores, guiando la promoción de un crecimiento sostenible e integrador con igualdad de oportunidades para todos los trabajadores.
Los funcionarios públicos son responsables de prestar servicios esenciales que repercuten directamente en la vida de las personas y las comunidades. Esto incluye la educación, la sanidad, el transporte, los servicios sociales y la seguridad pública. No es sorprendente que la mayor parte del sector público la ocupación en el mundo (52%) se dedique a servicios no de mercado, frente a sólo el 15% en el sector privado. Los trabajadores del sector público también están presentes en los servicios de mercado (20% frente al 32% del sector privado), la agricultura (12% frente al 27%) y la industria manufacturera (9% frente al 15%).
La distribución del sector público la ocupación por sectores varía según la región y el nivel de renta nacional. Por ejemplo, el 72% del sector público la ocupación corresponde a servicios no de mercado en los países de renta alta, frente a sólo el 54% en los países de renta baja. Por el contrario, la industria manufacturera (por ejemplo, la fabricación de productos alimenticios, prendas de vestir y textiles) representa el 31% del sector público la ocupación en los países de renta baja, pero sólo el 18% en los de renta alta.
Con el telón de fondo de la reciente pandemia, el papel de los trabajadores clave que proporcionan bienes y servicios esenciales cobra relevancia. En los países de renta alta, el 25% de los trabajadores clave están empleados en el sector público. Esto puede traducirse en unas estructuras de apoyo y unos recursos más sólidos para los servicios esenciales durante las crisis y las emergencias. Por el contrario, en los países de renta baja, donde el sector público la ocupación para los trabajadores clave es notablemente inferior al 3%, la presión sobre unos servicios públicos ya de por sí sobrecargados puede exacerbar las vulnerabilidades y dificultar las respuestas eficaces.
Ocupaciones de los trabajadores del sector público y patrones de género
Los profesionales de la enseñanza son una piedra angular del sector público. Por término medio, el 70% de los profesionales de la enseñanza trabajan en el sector público y esta profesión constituía la mayor parte de la ocupación en el sector público en la gran mayoría de los países. Cuando no era el caso, las fuerzas armadas o los trabajadores de los servicios de protección constituían a menudo la mayor parte de la ocupación el sector público.
Aparte de las funciones docentes y de defensa, otras ocupaciones destacadas con al menos una cuarta parte de la ocupación en el sector público son los directores ejecutivos, altos funcionarios y legisladores los profesionales sanitarios y asociados los profesionales jurídicos, sociales y culturales y asociados y los administrativos y otros trabajadores administrativos de apoyo. En conjunto, estas ocupaciones ponen de manifiesto la diversidad de funciones cruciales para el funcionamiento de los servicios públicos.
Por otra parte, en todo el mundo, las mujeres se enfrentan a importantes barreras para acceder al trabajo remunerado y, por tanto, están infrarrepresentadas en la ocupación. De hecho, las mujeres sólo representan el 39% de los trabajadores del sector privado mundial. Sin embargo, las mujeres están mucho mejor representadas en el sector público la ocupación, representando el 47% de todos los funcionarios públicos.
En relación con esto, a nivel mundial, el porcentaje del sector público la ocupación es mayor para las mujeres (13%) que para los hombres (10%). Esto es así en todas las regiones excepto en África. La diferencia es más pronunciada en las regiones de los Estados Árabes y Europa y Asia Central, donde la proporción de mujeres es unos 7 puntos porcentuales superior a la de los hombres. En los países de renta alta, el porcentaje del sector público la ocupación es del 20% para las mujeres, frente al 13% para los hombres.
La igualdad de acceso a los puestos de toma de decisiones, especialmente en el sector público, es esencial para lograr un trabajo digno y la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. De hecho, la diversidad y la inclusión en los altos niveles de toma de decisiones se extienden hacia abajo creando un mayor impacto. Sin embargo, cuando se trata de paridad de género, las mujeres siguen estando infrarrepresentadas en todos los niveles de toma de decisiones en todo el mundo. En 2024, el 26,9% de los escaños de los parlamentos nacionales de todo el mundo estaban ocupados por mujeres (indicador 5.5.1 de los ODS).
El techo de cristal persiste, tanto en el sector privado como en el público. No obstante, la proporción de mujeres en puestos directivos es mayor en el sector público (32%) que en el privado (27%). Esto es cierto en todas las regiones, excepto en África, y en todos los grupos de renta, excepto en los países de renta baja. La proporción de mujeres en otras ocupaciones también fue mayor en el sector público en todos los grupos principales, excepto en los trabajadores de servicios y ventas. También cabe destacar que la segregación ocupacional basada en género en el sector público es similar a la del sector privado, con altas concentraciones de mujeres en ocupaciones relacionadas con los cuidados, por ejemplo.
Condiciones de trabajo en el sector público
Las expertas destacan que los empleos del sector público suelen considerarse seguros y estables. No es de extrañar que la mayoría de los trabajadores del sector público en el mundo (77%) tengan empleos por cuenta ajena. Sin embargo, esto significa que casi una cuarta parte de los funcionarios son autónomos, ya sea por cuenta propia o como contratistas dependientes. La proporción de trabajadores del sector público que son autónomos varía considerablemente según las regiones y los grupos de renta. Por ejemplo, oscila entre un mero 3,6% en los países de renta alta y un 37,2% en los países de renta media-baja.
Además, el sector público parece ofrecer sólidas garantías de empleo formal. En casi todos los países sobre los que se dispone de datos, la tasa de informalidad es mayor en el sector privado que en el público, siendo la diferencia media no ponderada de 50 puntos porcentuales y la diferencia mediana de 54 puntos porcentuales. La diferencia aumenta con el nivel de renta nacional. Es decir, en los países de renta baja con una mayor prevalencia de la informalidad, el efecto del sector público en la protección de los trabajadores contra la informalidad se hace más fuerte.
Mientras tanto, existe la idea errónea de que los funcionarios públicos trabajan normalmente menos horas que los empleados del sector privado. La media de horas semanales de las personas empleadas en el sector público es superior en 47 de los 115 países. No obstante, la proporción de personas empleadas que trabajan demasiadas horas, definidas como 49 o más horas semanales, es menor en el sector público que en el privado en la mayoría de los países (107 de 124).
Por lo que respecta a los salarios, en 69 de los 81 países existe una prima notable para los trabajadores del sector público, ya que los ingresos medios por hora en el sector público son un 36% superiores a los del sector privado. Si bien esto podría atribuirse al mayor nivel educativo y de cualificación de los trabajadores del sector público en muchos países, es válido para cada uno de los grandes grupos profesionales.
Además, la diferencia salarial entre hombres y mujeres es mucho menos significativa en el sector público. La mediana de la brecha salarial en el sector privado es del 12%, frente a una mediana cercana a 0 en el sector público, lo que subraya el papel del sector público en la promoción de la paridad de género. Las menores diferencias salariales entre hombres y mujeres en el sector público están relacionadas con el hecho de que la prima salarial del sector público es mayor para las mujeres que para los hombres en 66 de los 81 países con datos disponibles.
Observaciones finales
Sector público la ocupación se refiere a las personas empleadas por unidades gubernamentales y empresas no comerciales. Incluye todos los departamentos, organismos e instituciones gubernamentales financiados y controlados por las autoridades gubernamentales que proporcionan bienes y servicios públicos, como las entidades gubernamentales centrales, estatales y locales, así como los fondos de la seguridad social. También incluye entidades que son propiedad o están controladas por el gobierno, como empresas estatales y corporaciones públicas. Éstas se dedican principalmente al bien público y no al lucro. Algunos ejemplos son los hospitales públicos, las escuelas públicas y otras entidades que prestan servicios gratuitos o a precios que sólo cubren una parte de sus costes.
Los datos presentados en este informe se refieren a las estadísticas del sector público la ocupación recogida a partir de encuestas de hogares, en particular encuestas de población activa. Es decir, las estadísticas la ocupación sobre el sector público dependen de que los encuestados indiquen el sector institucional en el que están empleados (es decir, privado frente a público) y, por tanto, están sujetas a la precisión de los encuestados. Puede ser difícil captar con precisión el sector público la ocupación para las personas que trabajan en instituciones sin ánimo de lucro controladas y/o financiadas principalmente por los gobiernos. Dependerá de la percepción del individuo sobre la afiliación institucional o la naturaleza de su trabajo.
Existen otras fuentes de estadísticas la ocupación para el sector público, como los registros administrativos y las cuentas nacionales. En particular, el Sistema de Cuentas Nacionales (SCN ) es el principal marco internacional para definir y recopilar datos sobre el sector público la ocupación. Aunque las estadísticas de este marco ofrecen coherencia y comparabilidad entre países y a lo largo del tiempo, existen limitaciones en lo que respecta a los desgloses. A diferencia de las encuestas de hogares, que ofrecen desgloses detallados que abarcan sexo, edad, ocupación, educación, tipo de contrato, tenencia, etc., las estadísticas basadas en el SCN carecen de tal granularidad, lo que limita su uso para este tipo de análisis. Por otra parte, las estadísticas del SCN pueden desglosarse por nivel de gobierno para proporcionar información sobre los trabajadores de la administración local y regional, que no suele estar disponible en las encuestas de hogares.Los usuarios deben tener en cuenta que las estadísticas públicas la ocupación derivada del marco del SCN y las obtenidas a partir de encuestas de hogares pueden diferir, a veces de forma significativa.
Notas
1) Sodergren es economista superior en la Unidad de Producción y Análisis de Datos del Departamento de Estadística de la OIT. Supervisa la recopilación de datos a través del cuestionario anual de ILOSTAT y es un punto focal clave de la OIT para la presentación de informes sobre los ODS. Encabezó el desarrollo del portal ILOSTAT y actualmente supervisa la creación de contenidos y es redactora jefa del blog. Anteriormente, ocupó puestos clave en la Oficina de Estadísticas Laborales de Estados Unidos, como Economista Supervisora y Jefa en funciones de la División de Comparaciones Laborales Internacionales.
2) Gammarano es Estadística Laboral Senior en la Unidad de Normas y Métodos Estadísticos del Departamento de Estadística de la OIT. Apasionada por abordar la desigualdad y las cuestiones de género y por utilizar los datos para arrojar luz sobre los déficits de trabajo decente, es autora recurrente del Blog de ILOSTAT y del SpotlightonWorkStatistics. Tiene experiencia previa en la Unidad de Producción y Análisis de Datos del Departamento de Estadística de la OIT y en el equipo del Coordinador Residente de las Naciones Unidas en México.
*Periodista uruguayo residente en Ginebra. exmiembro de la Asociación de Corresponsales de Prensa de Naciones Unidas en Ginebra. Analista Asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)