OIT explora el camino hacia la justicia social para los trabajadores migrantes
Eduardo Camín
Una antología de la OIT recientemente publicada, bajo la dirección Christiane Kuptsch y Fabiola Mieres, especialistas superiores en migración y mercado de trabajo de la OIT, llamada Temporary labour migration: Towards social justice? (Migración laboral temporal: ¿Hacia la justicia social?), explora los desafíos, las opciones políticas y los enfoques innovadores que dan forma a la migración laboral temporal en todo el mundo.
El volumen editado reúne contribuciones de distinguidos académicos y profesionales para examinar cómo los programas de migración laboral temporal han evolucionado y están impactando tanto en los mercados laborales locales como en los trabajadores migrantes. El volumen se estructura en torno a cuatro temas clave, entre ellos los cambios de paradigma sobre la migración laboral temporal, un análisis de los nuevos programas de movilidad y ámbitos que afectan a la gobernanza de la migración como el comercio internacional, herramientas políticas para la protección de los migrantes y lecciones históricas que ayuden a mejorar las políticas migratorias.
Sin dudas este trabajo surge en un momento clave en la historia de la humanidad en gran retroceso frente a las migraciones y la justicia social ya que una mayoría de dirigentes mundiales actúan frente a esta problemática como el chivo expiatorio de todos los males.
En muchos contextos, se ha demostrado que los programas de migración laboral temporal exponen a los trabajadores a déficits de trabajo decente, derechos restringidos y exclusión de la legislación laboral. A
l presentar perspectivas de diferentes regiones del mundo, disciplinas y periodos históricos, el libro ofrece recomendaciones políticas concretas para unas políticas migratorias más justa, las autoras Christiane Kuptsch y Fabiola Mieres profundizan en las dimensiones económica y jurídica de la migración laboral temporal para presentar un análisis completo. Destacando además la necesidad de justicia social en las políticas migratorias, reclamando igualdad de trato, mecanismos de protección reforzados y coherencia política para contribuir a que la migración temporal sea más justa. Por otra parte, la OIT tiene el mandato constitucional de trabajar sobre la migración, y la migración laboral temporal ha preocupado durante mucho tiempo a los responsables políticos.

En 2022, mientras las autoras preparaban un informe de antecedentes para un debate sobre la migración laboral temporal en el Consejo de Administración de la OIT, llegaron a la conclusión de que era necesario aclarar los diferentes aspectos de la migración laboral temporal para ayudar mejor a los responsables políticos a tomar decisiones informadas sobre esta cuestión.
Este trabajo ofrece sin dudas nuevas investigaciones sobre políticas innovadoras para ayudar a hacer frente a algunos de los acontecimientos más importantes que están configurando la migración temporal en la actualidad. Entre ellos se incluyen los conflictos prolongados, la degradación medioambiental, los cambios en los modelos de producción y la expansión de los acuerdos de libre comercio. Explora las lecciones del pasado para que podamos aprender de los errores y contribuir a que los actuales programas de migración temporal sean más justos y equitativos.
¿Qué diferencia a la migración laboral temporal y por qué es importante?
Las autoras señalan que; Un migrante laboral temporal es alguien que se desplaza a un país extranjero para trabajar y se espera que regrese a casa una vez terminado el trabajo. Por ejemplo, los trabajadores agrícolas estacionales, el personal de las estaciones de invierno y los trabajadores transfronterizos son todos ellos inmigrantes temporales. Un estudiante extranjero que acepta un trabajo de verano se convierte en emigrante temporal.
Después de graduarse, puede aceptar otro trabajo, quedarse más tiempo y, finalmente, solicitar la residencia en el país elegido. Esta persona se convierte entonces en un emigrante «permanente». Como puede ver, estas distinciones son más difusas en la vida real porque alguien puede solicitar un visado temporal con intenciones claras, pero sus planes pueden cambiar. Cuando cambian de visado, resulta más difícil seguir sus movimientos y comprender las protecciones laborales de los distintos trabajadores.
Históricamente, los inmigrantes temporales han tenido menos derechos laborales y, en algunos casos, incluso han sido excluidos de la legislación laboral de los países que los acogen. Incluso si existen leyes laborales, no necesariamente se aplicarán. Los inmigrantes temporales también tienen menos oportunidades de integrarse en las sociedades de acogida. Por lo tanto, tenemos que abordar estas lagunas de protección si queremos garantizar los derechos laborales, asegurar una oferta de mano de obra estable y recompensar a los empresarios que se ajustan a la legislación laboral.
Lo que aporta este trabajo sobre la regulación de la migración laboral
Christiane Kuptsch: declaro que en la actualidad hay muchos debates sobre la ampliación de las «vías legales» para que los trabajadores migrantes reduzcan la migración irregular. Algunos programas temporales se están considerando vías para lograrlo. Pero tenemos pruebas fehacientes de que los migrantes temporales sufren déficits de trabajo decente y quedan excluidos de la protección laboral. Por ello, es imperativo que encontremos soluciones eficaces y diseñemos programas que protejan a los migrantes temporales y, al mismo tiempo, equilibren los distintos intereses y factores -políticos, jurídicos, económicos, etc.- de forma justa.
Por su parte Fabiola Mieres, señalo que una de las principales conclusiones del libro es que algunos programas temporales que se presentan como «nuevos programas de movilidad» pueden en realidad parecerse mucho a los antiguos regímenes de trabajadores invitados, con todas sus deficiencias y lagunas de protección.
También aprendimos que el concepto de «cualificación» sigue siendo un factor de diferenciación entre los emigrantes. Los países de destino ofrecen beneficios atractivos a los migrantes altamente cualificados, pero esos mismos migrantes pueden carecer de ciertas protecciones, como el derecho a la libertad de asociación y a la negociación colectiva, cuando se desplazan en el marco de acuerdos de libre comercio. Otra idea clave es que los marcos migratorios pueden rediseñarse de forma que se adhieran a los principios de equidad y diálogo social, y mostramos cómo se ha hecho de hecho en un estudio de caso concreto en el libro.
Mas adelante Christiane Kuptsch , especialista en Política Migratoria en la OIT en Ginebra, realizó dos conclusiones. En primer lugar, las medidas de protección pueden parecer muy buenas sobre el papel, pero lo que realmente importa es su aplicación. Uno de los capítulos muestra que la portabilidad del visado, es decir, la posibilidad de que los trabajadores migrantes temporales cambien de empleador sería un avance en muchos casos, pero puede no ser suficiente para proteger a los trabajadores de los abusos si el cambio se ve dificultado por trabas burocráticas o elevadas tasas, por ejemplo. El libro también muestra que la firma de acuerdos bilaterales de migración laboral por sí sola no garantiza la protección de los derechos laborales y, por tanto, no cambia la vida de los trabajadores migrantes.
Segundo: Cuando la legislación sobre inmigración prevalece sobre la legislación laboral, por ejemplo, cuando los salarios mínimos de los programas de migración laboral temporal son diferentes de los salarios mínimos locales, no puede establecerse la igualdad entre los migrantes laborales temporales y los trabajadores locales. Este desequilibrio afecta a los trabajadores migrantes y locales, así como a los empleadores, y dificulta la consecución de resultados justos.
El futuro
Interrogadas sobre ¿Cómo ve el futuro de la migración laboral temporal en una economía global que cambia rápidamente?
Fabiola Mieres, Investigadora en el Departamento de Investigación de la OIT y Doctora en Política por la Universidad de Manchester, Reino Unido. manifestó que la economía mundial está cambiando rápidamente debido a los cambios geopolíticos, los avances tecnológicos, el cambio climático y las transiciones demográficas. Todos estos factores influyen en la demanda del mercado laboral. También influyen en la noción de «escasez de mano de obra» en sectores como la agricultura, la hospitalidad y los cuidados.
Esto significa que la escasez de mano de obra no se debe simplemente a que la demanda supere a la oferta de trabajadores, sino a que en estos sectores suelen predominar los migrantes temporales y no hay suficientes migrantes temporales para el número de puestos de trabajo disponibles. En consecuencia, los países de destino pueden adoptar vías flexibles hacia la residencia permanente para este tipo de empleos, pero también se corre el riesgo de alimentar narrativas negativas sobre la migración en los países de acogida.
El futuro de la migración es incierto, pero las preocupaciones en materia de justicia social seguirán siendo fundamentales, y la OIT está bien situada para trabajar con sus mandantes a fin de garantizar la igualdad de trato, la aplicación efectiva de los derechos y la adaptación de los mercados de trabajo a las nuevas demandas.
Pero cuando de capitalismo neoliberal se trata …
Llevamos decenios escuchando y teorizando la vulnerabilidad del trabajo forzoso que sufren los migrantes, pero es escandaloso que la situación de la esclavitud moderna no mejore, por lo tanto, nada puede justificar la persistencia de este abuso fundamental de los derechos humanos.
No basta proclamar dialécticamente los derechos humanos en su lucha contra el trabajo forzoso y toda serie de injusticias, se trata esencialmente de crear aquel horizonte que de sentido a estas injusticias generando una comunidad de hombres libres e iguales.
Claro se trata de la autoproclamada democracia del capitalismo, esa de libertades y privilegios, pero para unos pocos, que pregona una cierta idea de dignidad humana, reñida con la realidad que esbozan los informes…
*Periodista uruguayo residente en Ginebra, exmiembro de la Asociación de Corresponsales de Prensa de Naciones Unidas en Ginebra. Analista Asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la