Noboa no logra privatizar campo petrolero y contrata soldados mercenarios
Eloy Osvaldo Proaño
El derechista presidente ecuatoriano Daniel Noboa, quien el 13 de abril intentará ser reelegido, falló en su intento de privatizar el mayor yacimiento petrolero ecuatoriano, el Campo Sacha: la escasa transparencia en la negociación desató una cascada de críticas, pues una de las empresas de ese consorcio tendría lazos familiares con el mandatario
Y lo que ya constaba en el presupuesto general del Estado como un ingreso por mil 500 millones de dólares, se esfumó tras la fallida privatización con el consorcio chino-canadiense Sinopetrol. La poca transparencia en la negociación desató una cascada de críticas, pues una de las empresas de ese consorcio sería socia de una firma de una tía del presidente Daniel Noboa.
Noboa impuso un plazo hasta las 21 horas (local) del martes para que Sinopetrol pagara la prima inicial de mil 500 millones de dólares, los cuales, dijo, invertiría en salud, educación, seguridad y bienestar para los ecuatorianos.
La Asociación Nacional de Trabajadores de la Energía y el Petróleo (ANTEP) tildó de “estafa disfrazada de buenas intenciones” a la adjudicación a un consorcio internacional de la operación del campo Sacha, y cuestionó la versión oficial sobre el mal estado del mismo. Recordó que actualmente, el Estado ecuatoriano tiene el control total de la producción petrolera en el campo Sacha, operado por la empresa pública Petroecuador.
Sinopetrol está conformado por las empresas Petrolia Ecuador (subsidiaria de la canadiense New Stratus Energy), que tiene 40 por ciento de participación, y Amodaimi Oil Company SL (subsidiaria de la estatal china Sinopec), que tiene 60 por ciento.
Los mismos ejecutivos del consorcio que se favoreció con la adjudicación directa dejaron entrever que sería difícil conseguir esa suma en tan poco tiempo: el representante de Petrolia Ecuador, Ramiro Páez, señaló que “ninguna compañía tiene 600 millones de dólares en su caja”
La ministra de Energía, Inés Manzano, indicó que todo quedaba igual y que más adelante la estatal Petroecuador podría insistir en la privatización. Sacha es el campo más importante del país, con una producción de 77 mil191 barriles diarios y es considerado la joya de la corona porque tiene reservas probadas de 350 millones de barriles de crudo.
Según el movimiento indígena, ese proceso para ceder el control del campo más productivo de Ecuador a manos privadas se llevó a cabo “de manera oscura y sin transparencia”. La Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE) alertó que, de firmarse el contrato, el 87,5 por ciento de las ganancias quedará en manos de la empresa extranjera, mientras que el país solo recibirá el 12,5 por ciento.
La Conaie sostuvo que esa privatización representaría una pérdida de más de ocho mil millones de dólares para Ecuador. “Este saqueo no es casualidad. Daniel Noboa está desesperado por recursos para usar el Estado con fines electorales y pretende hipotecar el futuro del país para mantenerse en el poder”, añadió.
Mientras el país enfrenta hambre, crisis y desempleo, el gobierno entrega recursos a intereses extranjeros, señaló el líder de la Conaie y excandidato presidencial, Leonidas Iza, quien consideró que la adjudicación, al finalizar el mandato, es ilegítima, por lo cual emprenderá las acciones necesarias “para frenar este intento de saqueo a la Patria”.
Noboa contrata mercenarios
Asimismo, Noboa anunció en su cuenta de X una alianza estratégica para enfrentar el narcotráfico con apoyo del fundador de la firma de seguridad privada Blackwater, involucrada en la matanza de 17 civiles en Bagdad en 2007. El crimen organizado ha sembrado miedo y ha creído que puede operar con impunidad. Se les acaba su hora. Empieza la ayuda internacional en Ecuador, agregó.
La decisión de recurrir a los servicios de los mercenarios paramilitares acusados a matar civiles ha generado otra polémica, y preocupación porque Noboa, si no es reelegido, deberá entregar el mando a la progresista Luisa González.
En el anuncio incluyó una foto con Erik Prince, militar, descrito como mercenario estadounidense y fundador de dicha organización paramilitar. “Hemos establecido una alianza estratégica para fortalecer nuestras capacidades en la lucha contra el narcoterrorismo y la protección de nuestras aguas de la pesca ilegal. No hay tregua. No hay retroceso. Vamos adelante”, aseveró Noboa.

Erik Prince es conocido por lucrarse de conflictos bélicos en todo el mundo, como es el caso de Afganistán. En agosto de 2021, Prince afirmó que evacuaría personas del país centroasiático por un monto de 6.500 dólares. En medio de la intervención mercenaria de EEUU., el empresario también fue denunciado por aprovecharse de la desesperación de la gente por dinero.
Otro caso es el de Irak. En 2007 se conoció que los guardias de seguridad de Blackwate masacraron a 17 civiles en Bagdad. En aquel momento, la matanza fue percibida como un ejemplo de impunidad de la que gozan las empresas de seguridad contratadas por Washington en Irak.
Prince no solo apuntó a Oriente Medio, sino también a Venezuela, siendo uno de los más acérrimos partidarios de la extrema derecha que destapó la violencia tras las elecciones del 28 de julio. En 2020, Nicolás Maduro denunció que EEUU negoció con Blackwater para invadir su país por un costo de hasta 50 millones de dólares, un fallido intento conocido como la Operación Gedeón.
*Analista e investigador ecuatoriano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)