Milei en Davos contra feministas, ecologistas y socialistas: risas y tenues aplausos
Isabella Arria
En el foro mundial organizado por corporaciones y organismos financieros, el ultraderechista Javier Milei disertó por primera vez como presidente argentino. Con estadísticas de dudoso origen les dijo a los magnates del mundo que “occidente está en peligro” porque ellos están “cooptados” por una visión “socialista”.Pidió más superexplotación y demonizó a feministas, ecologistas y al “socialismo”
Su objetivo pareció ser justificar “teóricamente” ante el poder económico concentrado internacional su “plan de guerra” contra la población argentina en beneficio de las corporaciones nacionales y multinacionales, a las que invitó a su vez a hacer nuevos negocios a partir del remate al mejor postor de las riquezas y bienes naturales comunes de 47 millones de argentinos.
Sin medias tintas Milei acusó a la élite política global de estar “cooptada por una visión que conduce al socialismo y la pobreza”. “Estoy acá para decirles que Occidente está en peligro”, los retó. Desde la platea, representantes de organismos multilaterales escuchaban atónitos.”No se dejen amedrentar por la casta”, aleccionó a los empresarios presentes, a quienes calificó de “héroes”.
Sus palabras generaron algunas risas, tenues aplausos y mucho silencio. Previo a su exposición, Milei se había reunido con el canciller británico David Cameron y hablaron de un tema que no lo interpela: la causa Malvinas. Por la tarde, mantuvo encuentros con la reina de los Países Bajos, la argentina Máxima Zorreguieta; y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva.
Milei se despachó con un discurso de fuerte tinte libertario, sin hacer mención al plan de ajuste que lleva adelante y los desafíos que enfrenta para controlar una inflación que alcanzó el 211% anual y las presiones cambiarias, después de aplicar una devaluación del 55% en diciembre junto con un duro recorte del gasto público y un paquete de reformas apoyado por El Fondo Monetario Internacional y Estados Unidos.
Los más de 20 minutos de intervención de Milei estuvieron plagados de duros cuestionamientos al Estado y nostálgicos elogios a la economía mundial del siglo XIX. Con el manual de la escuela austríaca bajo el brazo, Milei sostuvo que “el capitalismo de libre empresa es la única herramienta que tenemos para terminar con el hambre, la pobreza y la indigencia a lo largo y a lo ancho de todo el planeta”.
“No hubo nunca en toda la historia de la humanidad un momento de mayor prosperidad que el que vivimos hoy. El mundo de hoy es más libre, más pacífico y más próspero…el capitalismo de libre empresa y la libertad económica han sido herramientas extraordinarias para terminar con la pobreza en el mundo, y nos encontramos hoy en el mejor momento de la historia”, celebró.
En contraposición, y como el peor mal de todos los males, remarcó que la “justicia social” es “injusta” y “violenta” porque “el Estado se financia a través de impuestos y los impuestos se cobran de manera coactiva”.
Milei acusó de “socialistas” a los más poderosos capitalistas del mundo, esos que según el último informe de la red de ONGs Oxfam, presentado en Davos, son los verdaderos causantes y garantes de la miseria de miles de millones de habitantes del planeta. En ese informe se detalla que en los últimos cuatro años, la riqueza de los cinco hombres más ricos del mundo se ha duplicado”.
“Buena parte de las ideas aceptadas en Occidente son variantes colectivistas, ya sea que se declamen comunistas, fascistas, nazis, socialistas, socialdemócratas, keynesianos, progresistas, populistas, nacionalistas o globalistas. En el fondo no hay diferencias sustantivas, todos sostienen que el Estado debe dirigir la vida de los individuos”, argumentó ante la sorpresa de los asistentes, en un auditorio con la mitad de las butacas vacías.
Ya había señalado poco antes de la reunión, cuando aseguró que la cumbre que opera como altar de los meganegocios globales era un evento “contaminado por la agenda socialista”.
El libreto que Milei llevó a Davos es el mismo que difundió los últimos años como panelista de televisión, el calco de una charla TED que dio en 2019 y la carta de seducción que utilizó durante la campaña electoral. Repitiendo los mismos conceptos, puso como ejemplo a la Argentina, al asegurar que su mejor época fue “cuando adoptó el modelo libertario en 1860 y se convirtió en la primera potencia mundial”, hasta que ingresaron “las ideas del colectivismo y comenzó a empobrecerse”
En esa misma bolsa, de actores que dañaron al capitalismo en el último tiempo, incorporó al “feminismo radical”. Lo señaló como el culpable de “una pelea ridícula y antinatural entre el hombre y la mujer”. “En lo único que devino esta agenda del feminismo radical es en mayor intervención del Estado para entorpecer el proceso económico, darle trabajo a burócratas que no le aportan nada a la sociedad, sea en formato de ministerios de la mujer u organismos internacionales dedicados a promover esta agenda”, lanzó con furia.
También desenfundó su postura antiambientalista, al indicar que el socialismo “sostiene que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser protegido a toda costa”. Y de paso habló de políticas de “control poblacional” que incluyen “la agenda sangrienta del aborto”.
Joe Goldman, periodista de ABC News de EEUU en Sudamérica señaló que “Milei no entiende al mundo y según él el feminismo y el cambio climático son agenda del socialismo, y lo dice en un foro donde han dedicado mucho espacio a estos temas. Habló de un mundo apocalíptico, en peligro ante el socialismo, feminismo, el ambientalismo, con nazis y populistas ¡Guau, que discurso! Si yo fuera un empresario ante este discurso, pondría mi dinero en otro país” advirtió.
Tras su polémico discurso en el Foro de Davos, Javier Milei se ocupó personalmente de compartir y valorar en sus redes el contenido de los seguidores que consideraron que la suya fue una “gran intervención” y no filtró ni siquiera los mensajes vulgares.
Entre ellos, le dio me gusta a un meme que lo representa como el macho alfa de una tribu, con un pene gigante, que dos mujeres esclavas cargan al hombro, junto al mensaje: “Javier Milei dejando Davos después de decirle a Klaus Schwab (empresario alemán, presidente del Foro Económico en cuestión) que se joda”.
Le dio “me gusta” a varios mensajes con connotación sexual, que calificaron a su discurso como “el mejor de la historia de la humanidad” y que lo representaron como “una escena de sexo explícito” que dejará a “marxistas y globalistas sin poder sentarse por varios días”.
¿Quién es el enemigo?
La alocución del mandatario tuvo primero una cálida recibida del titular ejecutivo del Foro Económico Mundial, Klaus Schwab, quien no solo lo felicitó al dirigente por la elección sino también a su hermana, Karina Milei, actual secretaria general de la Presidencia, por “manejar” la campaña. “Introdujiste un nuevo espíritu para la Argentina haciendo que esté más relacionada a la libertad de empresa. Estamos esperando escucharte”, le dijo .
El País de España señaló que Milei “abroncó a todos los líderes del mundo, especialmente a los organismos internacionales”. “Fue recibido con entusiasmo en el corazón del capitalismo, el foro de Davos, como un gran defensor del mercado, palabra sagrada para los ejecutivos que llenaban a reventar la sala principal, algo muy poco habitual cuando habla un político, pero rápidamente las caras empezaron a cambiar en la sala en cuanto Javier Milei empezó a hablar”.
La defensa del capitalismo y del mercado que hizo el mandatario argentino fue catalogada por El País como “apocalíptica” y “fundamentalista”, una posición que “ni siquiera” se asume en Davos, donde “todas las empresas están acostumbradas a las colaboraciones público-privadas que reivindican otros presidentes”.
En Italia, el Corriere della Sera destacó las declaraciones de Milei sobre la pobreza.“Desde que abandonamos el modelo de libertad, hace cien años, estamos atrapados en una espiral que nos hace cada vez más pobres. Si se toman medidas contra el libre mercado y la libre competencia, el único destino es la pobreza”, dijo Milei, en declaraciones seleccionadas por la publicación italiana.
El estadounidense The Wall Street Journal tituló: “El Presidente Libertario de Argentina insta en Davos a los líderes mundiales a abrazar el libre mercado”. “Milei dijo que los líderes occidentales sólo necesitan mirar la historia de Argentina para comprender los riesgos de socavar la libre empresa y aumentar la intervención estatal”. Y resaltaron que: “El capitalismo de libre empresa como sistema económico es la única herramienta que tenemos para acabar con el hambre y la pobreza”.
Milei apuntó contra los propios jefes de Estado occidentales por “cooptados” por el socialismo, y rompió con la tónica marcada en la apertura del encuentro con el discurso del presidente del Foro, el ex ministro de Industria y Ambiente de Noruega Børge Brende, quien llamó a enfrentar los desafíos de la incorporación de las nuevas tecnologías y el cambio climático con la cooperación entre los países. “Trabajar en unidad, incluso en este contexto complejo. La cooperacion es posible y está sucediendo”, dijo Brende.
Desde el Vaticano, el papa Francisco envió una carta al presidente ejecutivo y fundador del Foro, Klaus Schwab, para impulsar la fraternidad y atacar las injusticias: “¿Cómo es posible que en el mundo actual la gente siga muriendo de hambre o siendo explotada?”, presguntó Francisco en su misiva, desde una mirada de “justicia social”.En su discurso, Milei volvió a calificar a esa idea como “injusta” y “violenta”.
Hasta el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, llegó a Davos con una propuesta de Estado fuerte frente a las corporaciones. Biden anunció que en este año de campaña presidencial irá contra los sobregiros cobrados por los bancos, a los que calificó de explotar a los ciudadanos más vulnerables. “Hoy nos enfrentamos a ellos”, fue el mensaje de Biden.
*Periodista chilena residenciada en Europa, analista asociada al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, estrategia.la)