Lacalle y Milei se reunieron con un presidente que no es (González Urrutia)
Rubén Armendáriz
La gira del internacional de Edmundo González Urrutia tuvo este sábado dos importantes escalas, en países donde los gobiernos han respaldado a la oposición venezolana, que busca hacer valer la idea de que él fue el ganador en las elecciones del 28 de julio y debe asumir la Presidencia de Venezuela el próximo 10 de enero.
El veterano diplomático llegó al Río de la Plata el viernes por la noche desde España, en donde fue aceptado como asilado político luego de que la justicia de Venezuela lo denunciara por haber creado una suerte de organismo opositor paralelo para hacer el escrutinio de los resultados que le reclamaron a la Corte Suprema Electoral, pero que nunca mostró.
Tras su encuentro mañanero con el mandatario libertario argentino Javier Milei y su gabinete en Buenos Aires, el venezolano continuó su viaje hacia Uruguay donde, en Montevideo, lo esperaban el aún presidente Luis Lacalle Pou (su mandato termina el 1 de marzo, cuando asumirá Yamandú Orsi, del progresista Frente Amplio) y el canciller Omar Paganini para una reunión.
“Estamos con el presidente de Uruguay, Luis Lacalle, a quien le hicimos entrega del testimonio documental de la gesta cívica de los venezolanos el 28J: las actas que testifican el triunfo del cambio”, escribió el mandatario electo en sus redes sociales.
Sobre el próximo 10 de enero, González Urrutia ratificó nuevamente su decisión de volver a Venezuela y asumir como presidente.“Quiero agradecer al buen amigo el presidente Lacalle, por haber sido solidario con la causa venezolana, no desde hoy, sino desde hace mucho tiempo atrás. Él se ha jugado con declaraciones muy importantes que han sido clave para el desarrollo político de la campaña electoral”, cerró.
“El gobierno (de Nicolás Maduro) podrá cerrar el espacio aéreo, podrá cerrar las autopistas, podrá cerrar los accesos a Caracas, pero no van a impedir el resonante triunfo que ya obtuvimos. Esa victoria es hacer respetar la voluntad de más de 7 millones de venezolanos desplazados por el régimen, y la culminación de ello será la toma de posesión el próximo viernes 10″, aseguró.
En Venezuela resta menos de una semana para que se cumpla la fecha en la que debe asumir el próximo presidente: tanto Maduro como González Urrutia dicen haber sido los vencedores de los comicios.
Maduro anunció en los últimos días que ofrece una recompensa por 100 mil dólares por información para capturar a González Urrutia., asilado en España, desde donde viajó hacia el Cono Sur,
Milei fue uno de los primeros en reconocer al dirigente venezolano como ganador de las elecciones presidenciales del 28 de julio, mientras que denunció un “fraude masivo” perpetrado por Maduro, obviamente sin prueba alguna. Tras esto, el gobierno venezolano expulsó al cuerpo diplomático argentino, que tuvo que abandonar el país en pocas horas.
Milei recibió en la Casa Rosada de gobierno al autoproclamado presidente González Urrutia. El presidente argentino no puede visitar Venezuela porque rige un pedido de arresto por conspiración, usurpación de funciones, forjamiento de documentos, desconocimiento a las instituciones del Estado e instigación a la desobediencia de las leyes, entre otros cargos.
“Estamos haciendo lo que la causa de la libertad requiere, ni más ni menos”, dijo Milei. La audiencia inició cerca de las 11 y se extendió hasta las 11.35 y se realizó en el marco del nuevo conflicto diplomático que enfrenta Milei con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro: la detención del gendarme espía argentino Nahuel Gallo.
Antes de ser recibido por Milei, afirmó que el eje de la conversación serían “todos los presos políticos y los asilados en la Embajada Argentina en Caracas”. “Enviamos un cordial y afectuoso saludo, en especial a todos los presos políticos y a los asilados en la Embajada Argentina en Caracas; esa es y será nuestra preocupación en todas las conversaciones que sostendremos en Buenos Aires”, dijo en un video que circuló por redes sociales.
Con la reunión en la Casa Rosada, Milei se pone en un lugar expectante para la próxima política de Donald Trump respecto de Venezuela y al mismo tiempo se despide de la administración demócrata con un gesto que los deja satisfechos. Su norte es Washington: él mismo lo proclama y este encuentro con González Urrutia hay en enmarcarlo en esa línea.
*Periodista y politólogo, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)