¿La tecnología impulsa el trabajo por cuenta propia… o lo está imponiendo?

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Eduardo Camín

Esta es a priori la interrogante que se plantean Ronald Bachmann (1) y Santo Milasi (2) en un reciente blog publicado por la Revista Internacional del Trabajo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en el cual se analiza cómo la Inteligencia Artificial (IA) y la automatización están transformando el trabajo por cuenta propia en Europa.

Según los expertos su análisis muestra que, si bien la tecnología puede generar nuevas oportunidades para algunos,
también corre el riesgo de empujar a otros —especialmente a los trabajadores con bajos salarios— hacia formas precarias de trabajo autónomo.Inteligencia Artificial: 9 de cada 10 profesionales la usan en su trabajo y la principal deuda de las empresas es la formación - Infobae

Ya sea que seas un abogado que trabaja en un bufete y estás pensando en abrir tu propia práctica, una persona de limpieza que navega entre horarios impredecibles y busca un empleo más estable, o un programador que sopesa la libertad del trabajo freelance frente a la estabilidad de un puesto en el sector tecnológico, tu elección entre trabajar por cuenta propia o para otra persona está influida por muchos factores.

La investigación muestra que las preferencias personales y las condiciones económicas y sociales más amplias desempeñan un papel importante. Lo que resulta menos evidente es cómo la tecnología que utilizas en tu trabajo —como las herramientas de inteligencia artificial o la automatización de tareas— puede estar inclinando la balanza.

En nuestro estudio,  queríamos entender cómo la tecnología —especialmente la inteligencia artificial  (IA) y la automatización— afecta las decisiones reales de las personas de pasar del empleo asalariado al trabajo por cuenta propia, y si ciertos grupos de trabajadores (según sus habilidades, ingresos o edad) se ven afectados de manera diferente.

Analizamos las transiciones de los trabajadores entre empleo asalariado, trabajo por cuenta propia en solitario y trabajo por cuenta propia con empleados, en 31 países europeos. ² Esto nos permitió observar cómo la exposición a diferentes tipos de tecnología influye en las trayectorias profesionales: si las personas permanecen empleadas, se
vuelven autónomas o alternan entre ambas situaciones a medida que avanza el progreso tecnológico.

Al definir el trabajo por cuenta propia, distinguimos entre el trabajo por cuenta propia en solitario (trabajar de manera independiente, sin empleados) y el trabajo por cuenta propia con empleados (dirigir un negocio con personal contratado).

La inteligencia artificial, clave para reimaginar el futuro del empleo y la educación | Formación | Economía | EL PAÍSEn cuanto a la tecnología, analizamos dos tipos: la IA —una tecnología que a menudo complementa el trabajo, ayudando a las personas a hacer más y mejor su labor— y la automatización —una tecnología que tiende a reemplazar tareas, especialmente las repetitivas. Descubrimos que las personas expuestas a la IA en sus trabajos tienen más probabilidades de pasar al trabajo por cuenta propia en solitario, pero también más probabilidades de regresar al empleo asalariado.

Esto sugiere que la IA puede crear nuevas oportunidades para el trabajo independiente,especialmente para quienes cuentan con las habilidades y la flexibilidad necesarias para aprovecharlas. Pero también podría implicar que el trabajo autónomo en solitario no siempre es deseable, especialmente a largo plazo. Nuestro análisis —señalan los expertos — muestra que estos riesgos son especialmente pronunciados para los trabajadores con baja cualificación y salarios reducidos.

Por el contrario, los trabajadores en ocupaciones donde la automatización desempeña un papel importante tienen menos probabilidades de convertirse en trabajadores autónomos. Parece que cuando la automatización limita los tipos de tareas que requieren intervención humana, también reduce las posibilidades de establecer un negocio viable en solitario en esos sectores.

Informe del Foro Económico Mundial: nuevas perspectivas respecto al futuro del trabajo - Forbes ArgentinaSugiere que la tecnología puede abrir nuevas puertas para los trabajadores altamente cualificados, pero para otros puede significar perder seguridad laboral y verse obligados a emprender en solitario, a menudo con poco apoyo. Muchos de estos trabajadores no se vuelven autónomos por elección, sino porque no encuentran un empleo decente y estable.

Esto desafía la idea de que la tecnología siempre empodera. Más bien, existe el riesgo de que la tecnología aumente la desigualdad en cuanto a quiénes se benefician de ella. Sin políticas inteligentes, corremos el riesgo de que la transformación digital deje atrás a demasiadas personas.

Nuestros hallazgos apuntan a varias áreas en las que se necesita acción política:

1. Competencias e inclusión digital: Los trabajadores necesitan apoyo para adaptarse a las nuevas tecnologías. Esto requiere formación específica —especialmente para aquellos en empleos vulnerables o de baja cualificación— que les ayude a mantenerse empleables o a emprender negocios sostenibles.

2. Protección social moderna: Muchos trabajadores autónomos quedan fuera de las redes tradicionales de protección social. Los sistemas de protección deben reflejar la realidad de la fuerza laboral actual, incluyendo el empleo no estándar y el trabajo por cuenta propia en solitario.

3. Apoyo al trabajo decente: No basta con celebrar la flexibilidad o el espíritu emprendedor. Es necesario garantizar que el trabajo por cuenta propia —especialmente en solitario— sea una vía hacia un empleo decente y seguro, y no simplemente una opción cuando no hay otras alternativas disponibles.

El trabajo entre la innovación y la flexibilidad

Flexibilidad e innovación en los nuevos modelos de organización del trabajo: ¿necesidad o moda? - AEC - Asociación española de empresas de consultoríaEl trabajo por cuenta propia suele considerarse un signo de innovación y flexibilidad. Y a veces lo es. Pero esa no es toda la historia. Los trabajadores altamente cualificados que están expuestos a la IA pueden elegir entre seguir empleados o convertirse en emprendedores. Otros —a menudo en empleos mal remunerados o rutinarios— pueden verse empujados al trabajo autónomo en solitario por la falta de buenas alternativas en el mercado  convencional.

Vivimos una época caracterizada por un entorno cada vez más globalizado, en un contexto sujeto a continuos cambios, propiciados, en particular, por los avances tecnológicos. Estas transformaciones afectan de manera transversal a toda la sociedad, a todos los sectores y a las empresas de cualquier tamaño, que tienen que adaptarse a asumir nuevos retos, pero que también pueden aprovechar las nuevas oportunidades de la digitalización.

En particular, las empresas pueden beneficiarse de las múltiples ventajas que brindan las nuevas tecnologías y la digitalización en términos de acceso a nuevos clientes y mercados, flexibilidad, agilidad, personalización, eficiencia y
productividad: nuevos procesos, nuevos productos o servicios y nuevos modelos de negocio.

Además de esta repercusión sobre el crecimiento económico, la digitalización contribuirá a la creación de empleo de calidad: cada puesto de trabajo digital podría generar entre 2 y 4 empleos en otro sector de la economía y con salarios por encima de la media.La flexibilidad laboral: características y beneficios | UNIR

La economía digital impulsa, por tanto, el crecimiento y el empleo de calidad, pero, además, mejora la productividad e impulsa la internacionalización y el crecimiento de la dimensión empresarial. Actuar para garantizar que las
políticas apoyen las transiciones laborales de los trabajadores es importante no solo para ellos individualmente, sino también para la cohesión social y la sostenibilidad a largo plazo de los mercados laborales y los sistemas de bienestar.

Las investigaciones futuras deberían analizar si las tendencias que hemos identificado con respecto a la IA continúan o incluso se intensifican a medida que su adopción se expande en la economía y el mercado laboral. En este contexto, los análisis que examinan los efectos de las diferencias normativas entre países parecen especialmente importantes.

K.arl Marx, el ignorado … que tenía razón

Hace años que repetimos, sin cesar que hay una tendencia generalizada en muchos informes de prescindir de una herramienta de análisis en temas de desarrollo laborales y de crecimiento como el marxismo, y es una lastima o mejor dicho una estupidez intelectual. A pesar de ser el olvidado de siempre en estos Informes o Blog el marxismo indaga la incidencia de la lucha de clases sobre la innovación, de una forma implacable.

El auge de la aplicación de la Inteligencia Artificial (IA) sintetiza y automatiza tareas para cualquier ámbito de actividades intelectuales humanas, mecanismos que abarcan campos genuinamente universales, pero innovar no supone necesaria e inexorablemente un «progreso» debido a sus consecuencias sociales. En la fase actual del capitalismo en innovar o perecer rige la dinámica actual de la acumulación capitalista, pero no es suficiente con comprender una tecnología aislada, sino el conjunto del dispositivo técnico y social contemporáneo que lo lleva a su nuevo destino en la explotación.

La tecnología del capital juega un papel centralmente político en el proceso de producción, el capitalista, ejerce poder de mando sobre los trabajadores a partir del dinero, lo que Adam Smith llamó: “labour commanded”, mediante la compra de la fuerza de trabajo del obrero ejerce el poder de mando sobre los trabajadores a partir del dinero, el obrero no puede concurrir al mercado sino vendiendo como mercancía su propia fuerza de trabajo.

Marx lo analiza en el fragmento inédito del Capítulo VI de El Capital explicando las dos maneras de la “subsunción del trabajo”—la formal: cuando el trabajador vende su fuerza de trabajo deja de ser dueño de sí mismo y se enajena al patrón y formalmente deja de ser propietario de sí mismo, —la real en el puesto de trabajo, cuando del trabajo activo del trabajador, el capitalista consigue el aumento de la productividad laboral y el incremento de la tasa de plusvalía.

Ambas formas son específicas de la explotación capitalista, con la inserción del nuevo fenómeno tecnológico de la IA, también se vuelven a modificar las relaciones sociales y la lucha de clases, los sujetos están obligados a adaptarse y disputar la hegemonía dentro del proceso de cambio social.

 • DataGénero
La explotación laboral detrás de la Inteligencia Artificial

Para el capital, las innovaciones en los procesos de cambio tecnológico crean un vasto dominio de posibilidades siempre cambiantes para mantener o aumentar la rentabilidad. La búsqueda de tecnologías genéricas que pudieran aplicarse casi en cualquier campo, como ha sucedido durante los últimos años con la computarización. Surge así un vasto territorio empresarial en torno a la invención y la innovación.

Es lo que Brian Arthur en “The Nature of Technology” llama «nichos de oportunidad» que suministran por doquier nuevas tecnologías que inciden en la producción, circulación comercial, unidades militares de investigación que implican dominio geopolítico, vigilancia de individuos y trámites burocráticos. El cambio tecnológico recrea choques entre los empresarios que introducen innovaciones para incrementar su beneficio, y trabajadores que buscan evitar el impacto negativo de esta transformación sobre el empleo, el salario, y las condiciones laborales frente a los Estadosoccidentales capitalistas que muestran sus debilidades en la gestión de su política fiscal.

La innovación es un proceso objetivo, cuyos efectos potencialmente progresivos están en permanente conflicto con la acumulación del capital. En realidad, y según la concepción ideológica que tengamos, podemos analizar que el cambio tecnológico equivale al desarrollo cualitativo de las fuerzas productivas, en un marco de relaciones de propiedad definidas a un marco específico del modo de producción dominante.

Lo cierto es, que a medida que la IA reconfigura el panorama laboral, los temores a un desempleo generalizado chocan con el optimismo por potenciales aumentos de la productividad. Por su propia estructura del reparto de la riqueza no consiguen revertir la creciente tendencia a la concentración de la riqueza y el traslado de ésta desde los
trabajadores (secuestro de rentas) hacia el capital concentrado.

El epicentro de la lucha de clases en la época contemporánea se encuentra en la brecha cada vez mayor entre los ricos y el resto de la sociedad. Pero quien le pone el cascabel al gato.

Notas

1. Ronald Bachmann, Jefe de unidad de Mercados Laborales, Educación y Población en el Instituto Leibniz de Investigación Económica (RWI), Alemania
2. Santo Milasi,Economista en el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea en Bruselas, Bélgica
Bachmann, R., M. Gonschor, A. Mitra, S. Milasi (2025), Technological progress and the dynamics of self-employment: Worker-level evidence for Europe. International Labour Review 164(2): 1-23

3. Nuestros análisis se basan en datos de las Estadísticas de la Unión Europea sobre ingresos y condiciones de vida (EU-SILC) para el período 2014-2019.

*Periodista uruguayo residente en Ginebra, exmiembro de la Asociación de Corresponsales de Prensa de
Naciones Unidas (ACANU) en Ginebra. Analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico
(CLAE, www.estrategia.la)
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