La irresponsabilidad de unas Academias
Red de Historia Memoria y Patrimonio.
Las academias que son cuerpos colegiados constituidos por hombres y mujeres dedicados al estudio, investigación y análisis de asuntos de interés humano y científico son sensibles a una razón ética, sus actos deben ser responsables, serios, probados y medibles en razón de una verdad de ensayos corroborables, De lo contrario su mérito se ponen a prueba y la sociedad inteligente puede apuntar críticas, como es el caso de la Academia de Ciencias Económicas de Venezuela al fijar más que un criterio, una opinión política al fuego de la estridencia mediática mal intencionada.
El comunicado “Academia de Ciencias Económicas alerta sobre la grave situación de la economía en Venezuela” hecho público el 18 de mayo de 2020 en el portal Prodavinci[1], creemos razonadamente que lo expresado en ese comunicado es una sarta de barbaridades y mentiras dirigidas a la manipulación de la opinión pública nacional e internacional y que supuestas mentes iluminadas escribieran en palabras con asombro y estupor un análisis tan simple y parcelado.
Tomemos tres párrafos del mencionado comunicado para darnos cuenta del sesgo y la falta de rigurosidad que contempla este texto cuando señala:
“…régimen cuya legitimidad se cuestiona como consecuencia de la violación persistente de los derechos humanos, las agresiones a las instituciones democráticas y su asociación con los delitos del narcotráfico y la corrupción”.
El cuestionamiento del régimen lo hacen ellos que lo eluden diciendo “se cuestiona”, pero además resulta un desparpajo las afirmaciones de vínculos con el narcotráfico, con lo cual concomita con la arrogancia enarbolada por la administración estadounidense y sus adjuntos al calificar a Venezuela como narcoestado cuando en las narices de los Estados Unidos, el tráfico de estupefacientes colombiano pone los polvos de la droga en territorios norteamericano con el aval de la DEA.
Sería bueno preguntar a los excelentísimos integrantes de la academia sobre las reciente develaciones de los malhechores de la “Operación Gedeón”, asimismo los vínculos de algunos sectores de la oposición con la banda narco-criminal “Los Rastrojos”, el expendio de estupefaciente para animar los actos terroristas (conocidos como guarimbas) para que participarán en la desestabilización y violencia política en Venezuela.
Señala el comunicado de la Academia de Ciencias Económicas que “..nuestro signo monetario fue pulverizado y con ello su capacidad adquisitiva interna y externa, imponiéndose por la vía de los hechos, y de manera en extremo desordenada, un sistema de monedas múltiples.”
¿Quién lo pulveriza y por qué? Son preguntas cuyas respuestas la pueden encontrar en lo señalado desde hace algún tiempo por la profesora Pascualina Curcio cuando analiza la moneda como arma de guerra contra Venezuela:
1) Atacan la moneda mediante la manipulación del tipo de cambio con la complicidad y apoyo de los medios de comunicación; 2) al aumentar el tipo de cambio, aunque éste sea ficticio, inciden sobre los precios de los bienes importados; 3) estos aumentos de los precios de los bienes importados, a su vez, impacta los costos de producción; 4) los costos más altos se ven reflejados en el precio final de todos los bienes y servicios de la economía”.[2]
Como algunos medios de comunicación privados, preñados de campañas desinformativas, ANCE se enfoca en las consecuencias sin observar ni señalar causas, eso no es propio de científicos y menos del respeto que merece la Academia.
En las Disposiciones legales y reglamentarias vigentes que rigen la Academia Nacional de Ciencias Económicas, el artículo 4to señala como actividades de esta organización: “Tomar iniciativas y hacer saber su opinión razonada en la elaboración de proyectos de leyes en materia económica, así como en todo asunto de interés público que directa o indirectamente concierna a las Ciencias Económicas.”[3]
Al parecer la Academia no razonó bien el contenido de ese comunicado que la deja ante la opinión pública como una entidad poco responsable en tanto se presume su rigurosidad.
Los asuntos económicos son temas especializados que contemplan variables históricas, políticas y sociales y cuyos problemas ameritan respuesta razonadas sobre la base de dinámicas múltiples y complejas por eso extraña que una academia haga un análisis tan simple como este:
“…el país está en situación de cesación de pago de su deuda externa desde el 2017, el descontrol fiscal y las restricciones financieras internacionales llevaron a una monetización descontrolada del déficit impulsando un proceso hiperinflacionario sostenido, a expensas de asfixiar al sector bancario nacional, anulando el proceso de intermediación financiera.”
En contraste a estas rumiadas mentiras, Pascualina Curcio escribió en una columna de un diario nacional “… pocos sugieren qué hacer con las ganancias exageradas de la burguesía, este tema ni se toca, al parecer es tabú. Al final, el acuerdo fue acordar los precios y oficializar su actualización diaria”.
Pero además señaló que “no se trata solo de solicitar mayores porcentajes de aumentos salariales, o acordar el precio de 27 rubros de alimentos, cuando la realidad es que estamos en medio de una hiperinflación inducida cuya causa no es la ambición de un capitalista que caprichosamente fija un precio arbitrario (claro que también los hay quienes se aprovechan más de la cuenta) sino un ataque desmedido a nuestra moneda en el marco de una guerra sin cuartel que nos declaró el imperialismo estadounidense.”[4]
La Academia Nacional de Ciencias Económicas obvia el robo sistemático de nuestros activos nacionales a nivel mundial, omite el bloqueo comercial y financiero instrumento de lesa humanidad, promovido por los sectores hegemónicos mundiales.
Habría que preguntarle a los representes de la ANCE: ¿Existe guerra multifactorial contra la Patria?, ¿Se han aplican sanciones unilaterales contra Venezuela? ¿Existe robo, piratería y congelamiento de cuentas y bienes de Venezuela en el mundo? Escuchar respuestas a éstas y otras preguntas es interesante para merecerle respeto o no de dicha institución.
No se trata de descalificar a la Academia, es que ellos mismo se descalifican, a pesar que en esa institución hay científicos que deben merecer el respeto de quienes redactaron ese comunicado y de la comunidad, porque además, es el gobierno es el que paga sus nóminas y los acredita como partes del Estado.
Finalmente y guardando sincronía con la Academia de Ciencias Físicas, Matemáticas y Naturales en el informe titulado “Estado actual de la epidemia de la COVID-19 en Venezuela y sus posibles trayectorias bajo varios escenarios”, del 8 de mayo del presente año, descalifica las políticas acertadas aplicadas por el gobierno venezolanos para enfrentar la pandemia CIVID 19, que azota a la humanidad y a la fecha de hoy, tiene su epicentro los Estados Unidos, Brasil entre otros paraísos del neoliberalismo. Mientras en Venezuela los índices de atención, recuperación y letalidad son envidiables, si los comparamos con muchos países del mundo y la región.
El asunto de la agresión económica contra Venezuela, debería unir a todos los factores democráticos porque es claro que las sanciones, el bloqueo y las agresiones no miden posiciones políticas, a todo nos afecta y lo peor es que instituciones como esas nos pretenden engañar aduciendo que la culpabilidad de la crisis económica la tienen el gobierno, son conductas propias de quienes niegan la soberanía del Estado nación venezolano al que intentan destruir.
Notas
[1] Disponible en: https://prodavinci.com/academia-nacional-de-ciencias-economicas-alerta-sobre-profundizacion-de-la-crisis-socioeconomica-en-venezuela/
[2]Disponible en: https://observatoriodetrabajadores.wordpress.com/2019/10/24/consecuencias-de-la-hiperinflacion-pascualina-curcio/
[3]Disponible en : https://www.ancevenezuela.org.ve/ance/sites/default/files/field/pdf/disposiciones_legales_reglamentarias_ance.pdf
[4]Disponible en: http://www.ultimasnoticias.com.ve/noticias/especial-coronavirus/abrebrecha-salario-precio-y-ganancia/