Israel lanza su ofensiva para “conquistar” Gaza (mientras Trump se va del Golfo Árabe)

(Xinhua/Rizek Abdeljawad)

Qassam Muaddy y Tareq Hajjaj | Mondoweiss

Israel anunció la fase inicial de «los carros de Gedeón», la invasión terrestre ampliada para «conquistar» permanentemente Gaza, en medio de informes de que Trump renegó de su acuerdo con Hamás para levantar el bloqueo, y supuestamente expulsará a 1 millón de gazatíes a Libia.

Explosiones masivas sacudieron la Franja de Gaza en las primeras horas de la mañana del sábado cuando aviones de guerra israelíes lanzaron intensos ataques aéreos sobre el norte, el sur y el centro de Gaza, en lo que el ejército israelí calificó de «preparativos para ampliar las operaciones» en la Franja.

Los ataques aéreos israelíes alcanzaron Jan Yunis, Deir al-Balah, varias zonas de la ciudad de Gaza y Yabalia. Un residente del campo de refugiados de Shati’, en la ciudad de Gaza, declaró a Mondoweiss que «el ejército de ocupación había dado órdenes de evacuar el campo de Shati’, pero anularon las órdenes, y luego volvieron a pedir la evacuación, manteniendo a los residentes en constante zozobra.»

«Luego, ayer por la noche, empezaron a bombardear toda Gaza, incluido el campo de Shati’», añadió el residente de Shati’. «Duró toda la noche».

(Xinhua/Rizek Abdeljawad)

Los ataques aéreos estuvieron acompañados de incursiones de vehículos explosivos israelíes teledirigidos en el norte de Gaza, y los periodistas locales informaron de que el vehículo explotó en el barrio de Tal al-Zaatar, al este de Yabalia, entre edificios habitados. Los trozos de metralla alcanzaron el Hospital Indonesio de la vecina localidad de Beit Lahia, causando daños en el edificio, informaron periodistas locales. Según el Ministerio de Sanidad palestino, los ataques israelíes contra la Franja de Gaza han matado ya a 250 palestinos sólo en los dos últimos días.

La nueva oleada de bombardeos se produce pocos días después de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, prometiera la semana pasada «entrar en Gaza con toda su fuerza» en aplicación de una nueva ofensiva terrestre ampliada aprobada por el gabinete de guerra israelí hace casi un mes, apodada «Carros de Gedeón».

Con el asalto israelí, el ejército «conquistaría» Gaza y la ocuparía permanentemente, según funcionarios israelíes. Poco antes de que comenzara la invasión el sábado, el ejército israelí lanzó octavillas sobre Gaza, en las que aparecía una escena bíblica del mar partiéndose y engullendo los edificios destruidos de la Franja, con una insignia de la estrella de David en la esquina bajo las palabras «justa conquista».

‘¿Todo este horror es para nosotros? Los habitantes del norte de Gaza huyen de los bombardeos

Según Mahmoud Basal, portavoz de Defensa Civil en Gaza, el asalto israelí ha causado la muerte de más de 100 personas en menos de 12 horas. «Es un día sangriento y difícil para el norte de la Franja de Gaza», declaró en Telegram. Según el informe diario del Ministerio de Sanidad, «153 mártires y 459 heridos han llegado a los hospitales de la Franja de Gaza en las últimas 24 horas.» El Ministerio aclaró que el número de muertos había ascendido a 53.272 desde el comienzo de la guerra.

Cientos de miles de familias desplazadas del este de la ciudad de Gaza, que evacuaron sus hogares hace más de un mes debido a la invasión israelí del barrio de Shuja’iyya, se han hacinado en las zonas occidentales de la ciudad. Han establecido nuevos centros de desplazamiento en parques, estadios y universidades de la ciudad de Gaza, como el estadio de Yarmouk y la Universidad Islámica.

Durante la última semana, el ejército israelí ha amenazado con evacuar también estos centros de desplazados, señalando zonas como la Universidad Islámica y otras escuelas convertidas en refugios como zonas previstas para la evacuación.

El 16 de mayo, un gran número de personas fueron desplazadas de zonas del norte de Gaza, donde se ha intensificado la escalada de la invasión terrestre, lo que ha llevado a algunos residentes a abandonar sus hogares para dirigirse a la ciudad de Gaza.

(Xinhua/Abdul Rahman Salama)

A pesar de la incursión del ejército israelí en varias zonas del centro de la Franja de Gaza y al este de Jan Yunis, en la zona de Al Qarara, los residentes describen la situación del norte como la más grave.

Sulaiman Abu Sultan, de 41 años y originario de Beit Lahia, afirma que la intensidad de los bombardeos en el norte de Gaza le obligó a abandonar su casa. Cuenta a Mondoweiss que el ejército israelí está disparando misiles mortíferos contra barrios abarrotados sin previo aviso ni notificación de evacuación. «Los misiles mortíferos son la advertencia», aclara Abu Sultan.

«Se acabó el tiempo de las advertencias mediante mensajes y llamadas telefónicas. Ahora, están matando a cientos para advertir a los que se quedan», añade. «Están enviando misiles mortíferos que desgarran nuestros cuerpos».

Abu Sultan decidió llevar a su familia de cinco miembros a la ciudad de Gaza para alojarse con unos parientes en la zona de Tal al-Hawa, pero afirma que la situación allí no era mejor.

«No podíamos soportarlo en Beit Lahia. Los ruidos eran aterradores y los bombardeos aleatorios. Los escombros volaban sobre nuestras cabezas mientras estábamos en nuestras casas destruidas», explica Abu Sultan. «Pensábamos que la ciudad de Gaza sería menos terrorífica, pero nos encontramos con la misma situación: sonidos aterradores y aviones volando sobre nosotros».

«¿Todo este horror es para nosotros?» reflexiona Abu Sultan. «Cuesta creer que toda esta potencia de fuego en el cielo esté reservada a familias civiles cuya única preocupación es salvar a sus hijos de los bombardeos y darles de comer para que no mueran de hambre».

Israel planea una limpieza étnica de Gaza con el apoyo activo de Estados Unidos

El asalto israelí sin cuartel estuvo precedido por más de una semana de intensificación de los bombardeos sobre la Franja tras la liberación por Hamás del soldado israelí-estadounidense cautivo Edan Alexander como «gesto de buena voluntad» hacia Donald Trump, que debía llegar a Oriente Próximo en su gira prevista por los países árabes del Golfo. El ejército israelí bombardeó intensamente el Hospital Europeo y el Hospital Nasser de Jan Yunis durante toda la semana, supuestamente contra altos dirigentes de Hamás en un complejo de «mando y control» situado bajo el Hospital Europeo, aunque Haaretz informó de que Israel no aportó pruebas que respaldaran sus afirmaciones.

Según una entrevista de Drop Site News con el funcionario de Hamás Basem Naim, la liberación de Alexander formaba parte de un acuerdo que Hamás alcanzó con el enviado de Estados Unidos a la región, Steve Witkoff, que debía obligar a Israel a levantar el bloqueo de Gaza y permitir la entrada de ayuda humanitaria en la Franja. Naim dijo también que Witkoff se había «comprometido personalmente» a poner fin al bloqueo y que Trump debía pedir públicamente un alto el fuego.

Pero según el alto dirigente de Hamás, Estados Unidos «tiró el acuerdo a la basura».
Naim dijo a Drop Site que había «cero» progreso en las conversaciones para un alto el fuego, mientras que Witkoff habría dicho a los mediadores árabes que Estados Unidos no presionaría a Israel para que pusiera fin a la guerra contra Gaza.

Mientras tanto, Netanyahu parece tan inamovible como siempre, hablando al diario israelí Maariv la semana pasada sobre cómo el ejército israelí está «destruyendo más y más casas [en Gaza], y ellos [los palestinos] no tienen a dónde volver», añadiendo que «el resultado lógico será el deseo de los residentes de Gaza de marcharse». Netanyahu también señaló que la mitad de los gazatíes ya quieren marcharse, y que «la dificultad está en encontrar países que acepten recibirlos».

(Xinhua/Rizek Abdeljawad)

Como parte del plan de Israel de ocupar Gaza indefinidamente, Israel pretende encargarse de la distribución de ayuda a la población civil en un nuevo plan distópico en el que se investigaría a las familias con derecho a recibir ayuda con la participación de contratistas militares estadounidenses. Según se informa, el plan acorralaría a los gazatíes en un campo de concentración en lo que queda de Rafah, que ha sido arrasado y desalojado por el ejército israelí, y posteriormente Israel expulsaría gradualmente a la población de Gaza de la Franja bajo la rúbrica de la llamada «migración voluntaria». En esencia, esto supondría el aplanamiento y exterminio del resto de Gaza y la limpieza étnica de su población.

En línea con este plan israelí, la NBC informó el viernes de que la administración Trump estaba trabajando en un plan para reubicar permanentemente a un millón de palestinos en Libia a cambio de levantar las sanciones impuestas al país árabe hace más de una década. NBC habló con cinco fuentes no identificadas «con conocimiento del esfuerzo».

Según el Ministerio de Sanidad palestino, un millón de niños de Gaza corren riesgo de inanición, de los cuales 70.000 se enfrentan a «graves grados de malnutrición» debido al bloqueo. Según la Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria (CIF), el organismo de vigilancia de la hambruna afiliado a la ONU, el 96% de los gazatíes se enfrentan a «altos niveles de inseguridad alimentaria aguda», y el 22% a «niveles catastróficos».

Además, el Ministerio de Sanidad anunció que el número de palestinos muertos por las fuerzas israelíes en Gaza ha superado los 52.000 fallecidos, a los que hay que sumar al menos 10.000 desaparecidos bajo los escombros.

Los que han sobrevivido hasta ahora se preparan ahora para el próximo episodio del asalto genocida israelí respaldado por Estados Unidos.