Hollande defiende intervención militar en Malí
Hollande aseguró que la intervención está “dentro del derecho internacional”. Sin embargo, en la última semana se han multiplicado las denuncias de crímenes de guerra perpetrados por los soldados en la región en conflicto.
Al repetir el discurso de George Bush durante las guerras de Irak y Afganistán, el presidente francés declaró la intervención militar como un nuevo episodio de la lucha contra el terrorismo.
“No había tiempo que perder, si hubiéramos dejado pasar el tiempo, en este momento el terrorismo habría conquistado todo Malí”, dijo el mandatario galo.
La palabra terrorista ha sido utilizada para juntar en un mismo saco a los tuareg del Movimiento Nacional de Liberación de Azawad (MNLA) y a los islamistas radicales de Al Qaeda, así como a todos los grupos étnicos que reclaman la independencia de la región de Azawad, rica en oro.
Al respecto, el analista político Thierry Meyssan advirtió que la técnica de Hollande reproduce la de la Casa Blanca durante la era Bush: “Utilizar grupos islamistas para crear conflictos y posteriormente intervenir e instalarse en el terreno con el pretexto de resolver esos mismos conflictos”.
“Malí tendrá su integridad territorial; está cercano el tiempo de la reconciliación, de la estabilidad de ese país, está también el tiempo del desarrollo”, dijo el presidente francés.
Los intereses de Francia en Malí trascienden el pasado colonial. Recientemente, el analista Luis Zhu recordó que la empresa francesa Orange controla la telefonía en el país; la compañía Dagris “cuenta con una posición privilegiada tras la privatización del monopolio estatal Compañía Malí para el desarrollo del textil” y la empresa Bouygues controla el sector eléctrico.