En Londres, Lacalle obvió el Mercosur y se teme que Uruguay sea trampolín para Malvinas
Luvis H. Pareja |
El presidente uruguayo Luis Lacalle visitó el Reino Unido, donde se reunió no solo con el primer ministro conservador Boris Johnson, sino con el príncipe Carlos de Gales, para profundizar –según se comunicó- vínculos económicos y comerciales. Expresó su “prisa” por jugar “en cancha grande” y, a pesar de sus socios del Mercosur, “de abrirse al mundo”
“Las relaciones entre ambos países se remontan a mucho tiempo atrás, han sido excepcionalmente cercanas y creo que este es el momento de llevarlas a un nuevo nivel y particularmente en lo que tiene que ver con comercio”, remarcó Boris Johnson.
En el encuentro fue abordada la intención de profundizar el vínculo comercial, el potencial agroexportador de Uruguay, las inversiones en el sector tecnológico, y la condena a la invasión de Rusia en Ucrania, afirmó el gobierno británico en un comunicado.
“El primer ministro y el presidente Lacalle Pou se comprometieron a tomar medidas inmediatas para reducir las barreras comerciales entre nuestros dos países, intensificando el comercio y la inversión en industrias como la farmacéutica y la tecnológica”, señaló el comunicado. Otro punto conversado fue fomentar el aumento de la inversión del sector privado en las finanzas verdes y energías renovables”, añadió.
“Venimos a hablar con funcionarios y el sector privado sobre el comercio, las finanzas verdes y la energía. Podemos ofrecer esperanza. Estamos generando facilidades para vivir, estamos poniendo exenciones fiscales para invertir”, dijo Lacalle. Uruguay se encuentra en la definición de aspectos técnicos de la emisión de un bono en dólares estadounidenses atado a metas sustentables, para el que ya mantiene conversaciones con inversores.
Lacalle ofreció a Uruguay como un refugio de “confianza y esperanza” en tiempos de incertidumbre, en una conferencia ante inversores y empresarios británicos en Londres. “Intentamos ir juntos (con el Mercosur); tendríamos una posición mucho más fuerte si vamos con nuestros socios, pero hoy no quieren ir tan rápido. Así que hemos empezado (a hablar) con Turquía, seguimos con China, ahora Reino Unido….”, señaló.
“Es un gran gran placer dar la bienvenida al presidente Pou de Uruguay. Las relaciones entre ambos países se remontan a mucho tiempo atrás, han sido excepcionalmente cercanas y creo que este es el momento de llevarlas a un nuevo nivel y particularmente en lo que tiene que ver con comercio”, remarcó el primer ministro. Respecto a la seguridad, “los líderes acordaron impulsar la cooperación en defensa, incluida la adquisición de defensa, en apoyo de la seguridad regional e internacional”, agrega el comunicado oficial de Londres.
Las Malvinas en la agenda
Cabe recordar que Uruguay es un “estado tapón”, invento inglés de 1825. Lord Ponsonby actuó en la intermediación entre las Provincias Unidas del Río de la Plata y el Imperio de Brasil proponiendo como solución definitiva la independencia de la Provincia Oriental, creándose el Estado Oriental del Uruguay.
Según la información que manejan medios locales en base a fuentes oficiales, Lacalle buscaba cerrar un acuerdo de libre comercio como intentó hacerlo con China, de forma individual ante las negativas de sus socios del Mercosur de flexibilizar el bloque. La apuesta de Lacalle es oficiar de mensajero de Johnson respecto de la intención de Londres de firmar un acuerdo con el bloque, algo que Argentina y Brasil rechazarían.
La posibilidad de un acuerdo bilateral entre Reino Unido y Uruguay incluye un tema que podría generar fuertes tensiones con Argentina: los vuelos desde Montevideo a las Islas Malvinas. Argentina ha sido taxativa respecto al rechazo a terceros países que permitan vuelos a la isla sin pasar por su territorio. Detrás del gesto de Johnson de invitar al mandatario uruguayo está la intención de, como desde 1983, de usar a Montevideo como base continental para facilitar el abastecimiento y las comunicaciones de las islas.
Desde el año pasado, el gobierno argentino pide el restablecimiento del servicio regular directo entre las Islas Malvinas y Punta Arenas con dos escalas mensuales en Río Gallegos, enmarcado en la Declaración Conjunta de Madrid del 19 de octubre de 1989 y el Canje de Notas del 14 de julio de 1999. Los vuelos fueron suspendidos en marzo de 2020 debido a las restricciones impuestas por Reino Unido.
Los analistas señalan que es extraño que Lacalle visite Reino Unido –país que ya no integra la Unión Europea- en su primer viaje a Europa y no elija Francia e Irlanda que son quienes ponen reparos en el acuerdo entre la UE y el Mercosur, por un Tratado de Libre Comercio que negociaron casi 20 años.
Algunas actitudes recientes de Lacalle Pou respecto a las Malvinas generaron molestia en el gobierno argentino. En abril del año pasado, el gobierno de Alberto Fernández presentó una queja contra Uruguay por haber permitido el reaprovisionamiento de un avión militar británico en vuelo entre las Malvinas y el Reino Unido.
El avión, un Airbus A330 MRTT, había partido desde la isla con destino al Reino Unido e hizo una escala técnica en Montevideo, lo que viola acuerdos entre Argentina y Uruguay que limitan esa asistencia a cuestiones humanitarias, porque la ONU reconoce que existe una disputa sobre la soberanía de las islas.
Y en setiembre de 2020, Argentina repudió la presencia de un stand que promociona a Malvinas bajo el nombre “Falkland Islands” y como territorio separado de Argentina en una feria comercial en Montevideo.
*Periodista uruguayo, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)