Diálogo social: la panacea neoliberal se agota y se remplaza por el fascismo     

Hay que cultivar, proteger y practicarlo

Eduardo Camín  

Un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) destaca cómo el diálogo social puede permitir que los países busquen el desarrollo económico al mismo tiempo que el progreso social, mientras que aseguran transiciones digitales y de baja emisión de carbono que sean justas e inclusivas. El informe denominado El diálogo social en el más alto nivel para el desarrollo económico y el progreso social, es la nueva pericia del capitalismo que centra en el ” diálogo social en el más alto nivel” (DSAN): un conjunto de instituciones y procesos en los que los gobiernos, las organizaciones de empleadores y de trabajadores negocian, consultan entre sí e intercambian información sobre asuntos laborales, económicos y sociales a nivel nacional o sectorial.  

Con cierta ironía diremos que todas estas son las características salientes del modelo económico neoliberal actual y que se aplica desde hace décadas, cambiando las siglas.  El informe se afana en demostrar que el DSAN puede contribuir al trabajo decente, a una distribución más equitativa de los ingresos laborales y a transiciones digitales y ecológicas justas. Trabajo decente del que hablamos desde hace 25 años. La OIT publicará un nuevo informe sobre el diálogo social | International Labour Organization

Tal vez impregnados en este aire navideño los delegados y expertos elaboraron un nuevo/viejo mito, del dialogo social, más aún cuando en Marne-la- Valle, al este de Paris se sitúa el Parque europeo de Disneylandia apenas a un poco mas de 500 km lo separan de Ginebra, esta proximidad geográfica a veces me lleva a pensar que influencia ciertos pensamientos que pretenden ver una ilusión fantasiosa donde hay nubarrones que estremecen realidades.  

Está claro que este comentario lleno de cinismo obedece a conceptos y fundamentos ideológicos más definidos, que aparecen en la obra de Marx y Engels, analizando los aportes terminológicos de su primera obra conjunta de la Sagrada Familia, en la cual específicamente, indaga la posible existencia de uno o más conceptos detrás del campo semántico, que hacía referencia justamente a la ilusión imaginación y fantasía.  

El Informe de la OIT, subraya que el respeto a la libertad de asociación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva en la legislación y en la práctica son esenciales. Sin embargo, la capacidad del DSAN para moldear los cambios se ve debilitado cuando las políticas socioeconómicas están impulsadas por consideraciones a corto plazo y excluyen a segmentos importantes de la sociedad. 

De ahí que se insista con el tripartito – que reúne a gobiernos, empleadores y trabajadores – que aporta un valor agregado al mundo del trabajo, percibido además como un antídoto muy poderoso contra ciertas tendencias negativas que observamos en el discurso político y el debate público. Pero en este camino de “cultivar, proteger y practicar” el diálogo social, con rostro humano, encubre las clásicas medidas encaminadas a salvar el capitalismo, aplicando el principio lampedusiano que consiste en que es necesario que todo cambie para que todo permanezca igual. 

 “Esta edición del Informe sobre el Diálogo Social se publica en un contexto de inestabilidad económica y geopolítica”, dijo Manuela Tomei, Subdirectora General de Gobernanza, Derechos y Diálogo de la OIT. Agregando que estamos “En un contexto donde los avances tecnológicos, el cambio climático y los cambios demográficos están transformando profundamente los mercados laborales, el diálogo social sigue siendo un modelo de gobernanza creíble para navegar la complejidad, identificar soluciones justas y avanzar hacia la justicia social”.  

El informe se basa en estudios de caso, datos sobre relaciones laborales, una revisión global de los procesos y resultados del DSAN, y una encuesta de percepción a 71 organizaciones de empleadores y trabajadores en 38 países sobre la efectividad e inclusividad de las instituciones nacionales de diálogo social (INDS). El informe enfatiza los requisitos esenciales para un DSAN efectivo. En particular, señala que el cumplimiento de los países con la libertad de asociación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva ha disminuido en un 7 % entre 2015 y 2022. Esta disminución fue impulsada por un aumento en las violaciones de las libertades civiles fundamentales y los derechos de negociación de empleadores, trabajadores y sus organizaciones representativas. “Los países que respetan estos derechos laborales fundamentales están mejor posicionados para desbloquear el potencial transformador del DSAN, reforzando tanto la justicia social como la gobernanza democrática”, destacó Tomei. 

Pero este ejercicio dialéctico de mediación, de paz social, de dialogo es tan viejo como la propia injusticia que lo precede. La mediación con rostro humano tratara de organizar y financiar ciertas actividades que mitiguen las tensiones que produciría una población marginada desatendida. Desde esta imagen de neutralidad, el Estado tratara de consensuar formas pacificas de convivencia entre la población propietaria, la población mercancía, y la población marginada, lo que en definitiva supone la legitimación y estabilidad del verdadero causante del caos. 

Diálogo Social: presencia, con poca inclusión  

Lenguaje e inclusión, la nueva guía del Tecnológico de MonterreyEl informe revela que las INDS están presentes en el 87 % de los Estados Miembros de la OIT. Tres cuartas partes de los trabajadores y dos tercios de los empleadores las consideran efectivas, pero persisten preocupaciones sobre el seguimiento inadecuado por parte de los gobiernos o las autoridades públicas a los resultados del diálogo social, como destacó la encuesta de percepción realizada para este informe.

Otra preocupación es la falta de inclusividad de las INDS y las brechas en relación con las necesidades de grupos subrepresentados, como las mujeres, los jóvenes y los trabajadores y unidades económicas de la economía informal. 

En muchos países se reconoce la importancia de la participación de las organizaciones de empleadores y trabajadores en el diseño y la gobernanza de las políticas de empleo o los sistemas de protección social. Por ejemplo, más del 30 % de los servicios públicos de empleo incluyen a representantes de empleadores y trabajadores en sus juntas de gestión, mientras que el 25 % de las políticas nacionales de empleo identifican la consulta tripartita como un requisito clave.

Aproximadamente el 80 % de los 187 Estados Miembros de la OIT han establecido cuerpos tripartitos de seguridad y salud en el trabajo (SST) de alto nivel, mientras que las reformas de protección social en 65 países han ampliado la cobertura de pensiones, salud y beneficios para los empleados con la participación de los socios sociales. 

El informe también revisa el papel de la fijación de salarios mínimos, que involucra a los socios sociales y la negociación colectiva sectorial en la lucha contra la crisis del costo de vida y la promoción de la igualdad salarial. Destaca que, cuando los salarios mínimos nacionales fijados por los gobiernos en consulta con los socios sociales coexisten con salarios mínimos sectoriales determinados mediante negociación colectiva, el DSAN es más efectivo para abordar la alta desigualdad de ingresos laborales. El Sistema de Gestión de la Seguridad y la Salud en el Trabajo - Evolución histórica de los instrumentos normativos | PPT

Fomentar el DSAN para transiciones digitales y verdes justas 

La evidencia sugiere que el DSAN fomenta el consenso social sobre la transformación digital y las políticas de descarbonización. Sin embargo, la dependencia del DSAN para gestionar esta doble transición es más frecuente en países con instituciones de diálogo social bien establecidas y donde la penetración digital es más intensa. Una revisión de 118 procesos de diálogo social entre 2022-2023 muestra que alrededor de una cuarta parte abordaron temas relacionados con la doble transición, principalmente en Europa. Una nueva generación de políticas industriales orientadas a la diversificación económica y la transformación estructural, centradas en la doble transición, presenta una ocasión muy oportuna para avanzar en el papel del DSAN en la guía de esta transición. 

Un llamado a la acción para desbloquear el poder del DSAN 

Para desbloquear completamente la inclusividad y efectividad del DSAN, el informe insta a los países a: 

  • Respetar los principios y derechos fundamentales en el trabajo, especialmente la libertad de asociación y el reconocimiento efectivo del derecho a la negociación colectiva. 
  • Dotar a las administraciones laborales y a los socios sociales de los recursos y capacidades técnicas necesarios para participar eficazmente en el DSAN. 
  • Ampliar el alcance de las INDS y los socios sociales hacia los grupos subrepresentados. 
  • Realizar evaluaciones regulares basadas en evidencia sobre el papel e influencia de las instituciones de DSAN en la toma de decisiones socioeconómicas. 
La contracara de la fase superior del capitalismo… el fascismo  

Vivimos en medio de una enorme falacia, de un mundo desaparecido que nos empeñamos en no reconocer como tal y que se pretende perpetuar mediante políticas artificiales. Vemos cómo se construyen y reconstruyen las historias nacionales, con esa ilusión de sube y baja, que nos hacen seguir administrando crisis al cabo de las cuales se supone que saldríamos de la pesadilla. 

Cada vez más el poder económico y su institucionalización (las organizaciones políticas de la burguesía) dominan el planeta y deciden por millones su destino. La feroz competencia entre megacorporaciones y otras de menor importancia impulsa a la sobreproducción desesperada y absolutamente disociada de las necesidades sociales pertinentes a la humanidad. El fascismo y las vísperas - Revista Zoom

Es de por sí evidente que dialécticamente coexisten en el sistema contra tendencias que frenan o amortiguan la evolución de estas bases funcionales, según períodos históricos de auge o retroceso de la lucha de clases. Sin embargo, la realidad nos muestra que a medida que se desarrolla el sistema, agudiza todas sus contradicciones y se muestra más reaccionario, salvaje y beligerante. 

Pero sin dudas, cualquiera puede imaginar o advertir sentimientos del todo nuevos en estas conferencias sin una correspondiente experiencia empírica, cualquier mente puede formar ideas nuevas y originales, en la materia, con la mejor de las intenciones.  No obstante, creemos que la precisión de su prosa hace cuasi imposible encontrar sinónimos explicativos de los términos en las palabras más actuales del lenguaje onusiano que pretende diluir lo esencial del problema que es el propio sistema capitalista. Ignorarlo en el debate parece ser la nueva misión de los intelectuales funcionales a estas corrientes de pensamiento.  

Por mucho que se modifique la semántica por mucho se le dote de “rostro humano” o se le denomine con términos eufemísticos (capitalismo social, economía social de mercado) el capitalismo será siempre capitalismo y tendrá sus propias limitaciones.  Ahora bien, la falta de interés, la resignación, la apatía mundializada podrían permitir que se instaure lo peor. Y lo peor ya está en nuestras puertas y se denomina fascismo. 

 

*Periodista uruguayo residente en Ginebra, exmiembro de la Asociación de Corresponsales de Prensa de Naciones Unidas en Ginebra. Analista Asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la