El cierre del estrecho de Ormuz en caso de agresión estadounidense contra Irán paralizaría la economía mundial
A medida que se intensifican las tensiones regionales en medio de la brutal agresión del régimen israelí contra la República Islámica, la posibilidad de que se cierre el estrecho de Ormuz es una posibilidad, según los expertos.
PressTV
La probabilidad de que la guerra impuesta a Irán se extienda al mar ha aumentado después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, se entregara a una retórica belicista contra la República Islámica.
Trump, bajo la presión del poderoso lobby sionista en Washington, ha insinuado que intervendrá directamente en la guerra de Israel contra Irán, ignorando el consejo de sus asesores.
Expertos estratégicos, en declaraciones al sitio web Press TV, afirmaron que la intervención militar directa de Estados Unidos resultará costosa para el país y para la administración de Donald Trump.
El líder de la Revolución Islámica, el ayatolá Alí Jamenei, en un mensaje de vídeo difundido el miércoles, advirtió categóricamente contra cualquier intervención militar estadounidense.
«Los sabios, que realmente comprenden a Irán, a su pueblo y su larga historia, nunca hablan a esta nación con lenguaje amenazante. Irán no cederá», afirmó.
«Los estadounidenses deben comprender que cualquier incursión militar de Estados Unidos tendrá sin duda consecuencias irreversibles».
Los expertos creen que una de las repercusiones del aventurerismo militar estadounidense contra la República Islámica sería el cierre del estrecho de Ormuz, controlado por Irán.
Según datos de Tanker Trackers, más del 80 % del petróleo pasa por esta estrecha franja y, si se cierra, la economía mundial y el sector energético sufrirían un duro golpe.
La mayoría de las multinacionales de todo el mundo cerrarían en cuestión de días, ya que se agotarían los suministros energéticos necesarios para su funcionamiento.
Muchos países, incluidos los de la región del Golfo Pérsico, sufrirían enormemente en términos de producto interior bruto (PIB), entre ellos Qatar y Arabia Saudí, advierten los expertos, ya que se detendrían las exportaciones de GLP.
Europa tendrá que hacer frente a una nueva ola de crisis energética, más devastadora y devastadora que cualquier otra que haya visto antes, según un experto, incluidos los tres países europeos que respaldaron la resolución contra Irán en la reunión del consejo de gobernadores de la agencia nuclear de la ONU.
El fuerte aumento de los precios de la energía obligaría a cerrar importantes industrias en el Reino Unido, Alemania, Francia y otros países europeos.
Estados Unidos, que ha amenazado con emprender acciones militares contra Irán en nombre de su representante en la región de Asia Occidental, el régimen sionista, también se verá gravemente afectado, advierten los expertos.
Los precios de la gasolina en el país subirían, lo que obligaría a cerrar muchas industrias que contribuyen a la economía estadounidense y dejaría sin trabajo a millones de personas.
Según algunas previsiones, los precios del petróleo podrían subir un 80 % en la primera semana si se cierra el estrecho de Ormuz, ya que las rutas alternativas supondrían unos costes elevados.
«Por lo tanto, lo más sensato es que Estados Unidos se mantenga al margen de esta guerra, por su propio bien y el de sus aliados», afirmó un experto. «Dejemos que el régimen sionista afronte las consecuencias de su terrorismo».