Comienza el congreso del Partido Comunista de China

El XVIII Congreso del Partido Comunista elegirá desde mañana a la “quinta generación de líderes”, que gobernará el país durante la próxima década. Participarán más de dos mil delegados.

Télam

En medio de extremas medidas de seguridad se iniciará mañana el XVIII Congreso del Partido Comunista de China (PCCh), de cuyas deliberaciones saldrá la “quinta generación de líderes” que regirá los destinos del país los próximos 10 años.

En el cónclave, que se celebrará entre el 8 al 14 de noviembre según informó hoy el portavoz gubernamental Cai Mingzhao en una conferencia de prensa, 2.270 delegados de la formación que gobierna China desde 1949 se reunirán para remodelar los tres principales órganos del Partido: Comité Central, Politburó y Comité Permanente.

En la clausura del Congreso se suele anunciar la lista de miembros del Comité Central, tradicionalmente formado por 350 delegados, y un día después el Comité Central debate y aprueba el Comité Permanente, un reducido grupo de líderes que rige de facto los designios del país más poblado del mundo.

Finalmente, el Comité Permanente debate y elige la formación del Politburó, formado por 25 miembros, informó la agencia de noticias EFE.

Se espera que esta decimoctava edición marque la retirada del Comité Permanente, por edad, de al menos siete de los nueve actuales miembros, próximos a cumplir los 70 años, entre ellos el actual presidente y secretario general del PCCh, Hu Jintao, y el primer ministro, Wen Jiabao.

En tanto, los dos llamados a conservar su lugar en el grupo son el vicepresidente Xi Jinping (actual “número seis”) y el vice primer ministro Li Keqiang (“número siete”), que probablemente ascenderán al primer y segundo lugar del nuevo Comité Permanente, lo que en 2013 les otorgaría los cargos de presidente y primer ministro.

La mayoría de las reuniones en el Congreso serán a puerta cerrada, y en ellas se vivirá un debate entre las diversas facciones para escalar puestos en las distintas jerarquías, si bien muchas decisiones ya se tomaron de antemano.

El cónclave se produce en medio de un gran escándalo político tras la expulsión del partido de Bo Xilai, ex-secretario del PCCh en la municipalidad de Chongqing y estrella ascendente de la política china, juzgado por corrupción, abuso de poder, recibir sobornos e intentar ocultar un asesinato.

En el Congreso se debatirá seguramente el futuro del dirigente caído en desgracia.
Asimismo, se espera que se debatan cambios ideológicos del partido, como la composición de su Constitución, creada en 1982 y que suele enmendarse para incluir las teorías de algunos máximos mandatarios, con el fin de que “pasen a la Historia”.

Los Congresos del PCCh habitualmente debaten y renuevan o ratifican la composición de la Comisión Militar Central, el máximo órgano de poder castrense.

Aunque suele estar compuesta en su mayoría por oficiales del ejército, su presidente suele ser el secretario general del PCCh, para así erigirse en supremo líder de las tres ramas del poder nacional (Partido, Estado y Fuerzas Armadas).

Desde 1977 se celebran puntualmente cada cinco años, normalmente en los meses de octubre y noviembre. En los años en que no hay Congreso también se celebra por esas fechas una reunión del Comité Central en Beijing.

Desde hace días, el Gobierno puso bajo vigilancia a varios activistas y disidentes y forzó a algunos como Hu Jia y la escritora tibetana Woeser a dejar la capital, Beijing.

Hu Jia, que debió irse a casa de su familia en la provincia de Anhui hasta que finalice el congreso, criticó duramente las medidas y aseguró que las mismas alcanzaron “un nuevo nivel de psicosis”.

La policía incrementó la vigilancia en el centro de la capital y restringió la circulación de taxis y colectivos por algunas zonas céntricas.