Caen testigos de la fiscalía en el juicio contra Pérez Becerra

INGRID STORGEN |  El martes pasado en el juicio contra Joaquín Pérez, el testigo de la Fiscalía, un desertor o infiltrado en la guerrilla, dice haber visto a Joaquín Pérez en un campamento con ‘Iván Márquez’. Pero hay mucha inconsistencia en su declaración. Abel Pedraza, alias ‘Ernesto Medina’, ex integrante del frente 41 de las Farc, fue quién reveló que Pérez sí se reunió en los campamentos de las Farc, según publica El Tiempo [1].

Ingrid Storgen – ANNCOL

“Observé a Pérez en enero del 2003 en el campamento con Iván Márquez, jefe internacional de Paz de las Farc, haciendo charlas de orden político e ideológico, presentando informes e informando cómo estaban los partidos políticos en el mundo y de la importancia de la publicidad”, dijo el desmovilizado.

Dick Emanuelsson, subdirector de ANNCOL y testigo en la audiencia el mismo día, cuestiona la veracidad del testigo de la inteligencia militar:

– Hay una falla también en este caso y los periodistas o conocedores del conflicto colombiano nos damos cuenta de eso. El desertor dijo “observé a Pérez, en el 2003, en el campamento con Iván Márquez, jefe de la Comisión Internacional de las Farc”.

– El detalle no es menor, es un escándalo del absurdo, ya que Iván Márquez no era jefe de la Comisión Internacional de las Farc, sino que ese cargo recaía en Raúl Reyes. Para nadie es un secreto que Reyes recibió a mucha gente del exterior en los campamentos suyos, también este reportero estuvo en varios de ellos en 1998, 1999, 2001 y en abril del 2005, cada vez en un diferente campamento. La razón es sencilla; Reyes era la persona encargada del Secretariado de las FARC que solía dar declaraciones públicas a la prensa. También se que encontraba con personajes como Piedad Córdoba y otros en el trabajo para el intercambio de prisioneros entre Estado y guerrilla. Reyes tenía ese cargo hasta su muerte 1 de marzo 2008.

– Si efectivamente Joaquín Pérez era de la Comisión Internacional de las FARC, no era en el campamento de Iván Márquez que se reunía con su “jefe” sino en el Bloque Sur, donde estaba ubicado el comandante Reyes. Márquez mandaba en el Bloque Caribe, en el extremo norte de Colombia, mientras Reyes estaba ubicado en el Bloque Sur de las FARC, es decir, en el extremo sur de Colombia, frontera con Ecuador.

¿“Medios amigos” o medios de las FARC?

En el próximo renglón dice el testigo de la Fiscal:

“Nos informaban que Anncol y Café Stereo eran medios amigos para apoyar a las Farc, para difundir y discutir sus propósitos y en éstos, Alberto Martínez (Joaquín P.) tenía participación” añadió Pedraza.

– Este desertor es presentado como guerrillero raso y no es de ningún mando medio o del frente. Cualquier conocedor de las FARC sabe que los guerrilleros rasos ni los mandos medios estan sentados en la mesa en donde es recibido una visita por un comandante del frente o del Bloque y menos comparten información delicada. Entonces, ¿de donde saca el desertor esa información, comenta Emanuelsson y sigue:

Segundo; es interesante que el testigo de la fiscalía, preparado por la inteligencia militar para actuar en casos como éste, solo admita que “Anncol y Café Stereo era medios amigos”, es decir, ni siquiera dijo que eran “órganos que obedecen las directrices de las FARC”, como la inteligencia militar y el DAS siempre han sostenido. Hay que registrar también la declaración en donde dice que “Alberto Martínez tenía participación”, o sea como cualquier integrante de un medio y no un control y función líder del medio. Muy vaga la declaración en esa parte.

Sabido es que un desertor tiene que dar algo para recibir los beneficios (que van desde dinero hasta rebajas de penas) y a nadie pudieron convencer. Por eso, si el juez no quiere quedar en la historia como un funcionario del Estado que administró un caso dirigido desde las altas esferas militares y oligarcas, pues esperamos que entienda que este caso no va a terminar así no más, concluye el subdirector de ANNCOL su relato sobre la audiencia el martes pasado.

El testimonio de Dick Emanuelsson concluye con la misma firmeza con la que se manifestó en cada párrafo transcripto. Queda ampliamente demostrado que Joaquín Pérez Becerra y ANNCOL no pertenecen a ninguna organización guerrillera, estimo que así habrá de interpretarlo la justicia si mantiene toda la independencia que corresponde.