Balcanización del euro: “riesgo estratégico” para el Pentágono
ALFREDO JALIFE RAHME| Surgen “señales de desintegración” del sistema financierista a los dos lados del Atlántico Norte (USA Watchdog, 12/12/11), mientras Jon Corzine, anterior director del vilipendiado Goldman Sachs (GS) y ex gobernador de Nueva Jersey, en forma desvergonzada (después de haber quebrado a la empresa MF Global por mil 200 millones de dólares) declaró desconocer “dónde se encuentra el dinero” (Financial Times, 12/12/11).Lo más interesante es que Gary Gensler, anterior empleado de GS y quien ahora preside la vigilancia financiera de Estados Unidos (CFTC, por sus siglas en inglés), se rehúsa a perseguir penalmente al indiciado defraudador Corzine. Todo queda (en)cubierto entre los colegas cleptomaniacos de GS.
Me concretaré a exponer dos frases de Der Spiegel (12/12/11) alusivas a la grave crisis de la eurozona: 1. “La cumbre de la crisis del euro provocó una profunda crisis en la Unión Europea (UE). Gran Bretaña (GB) ha sido puesta de lado y otros miembros sienten estar arrollados por Alemania y Francia. El futuro de la divisa común está más incierto que nunca” (“Porque el triunfo de Merkel se hará a un alto precio”); y 2. “La crisis ha alcanzado un nivel sistémico”, según “Andrea Enria, directora de la Autoridad Europea Bancaria”.
Un artículo de Defense News (9/12/11) apunta un estudio dramático del muy influyente Consejo de Relaciones Exteriores (CFR, por sus siglas en inglés), con sede en Nueva York, sobre Europa (sic) considerada como “una de las principales amenazas (¡súper sic!)” que debe enfrentar Estados Unidos (EU) debido a la “intensificación de la crisis de la deuda soberana europea que lleva al colapso del euro, desencadenando una recesión de doble hundimiento en EU y aún limitando los recursos presupuestarios”. En forma asombrosa, el CFR identifica a otros seis países como “prioritarios a los intereses nacionales de EU”: China, Irán, Norcorea, México (¡súper sic!), Pakistán y Arabia Saudita (sic)”.
Entendemos que entre los “riesgos estratégicos” del Pentágono se encuentren China, Irán, Norcorea, Pakistán y hasta Arabia Saudita (esta última susceptible de ser desestabilizada para despojarla de su inmensa riqueza pecuniaria y petrolera). Pero, ¿por qué aparece “el itamita México neoliberal calderonista” que ha obedecido supinamente en todo a EU? Curioso: el Pentágono no colocó como “amenazas” esta vez a Cuba ni a Venezuela.
El portal iraní Press TV (12/12/11) fue el primero en señalar la ominosa advertencia del general Martin Dempsey, jefe de las fuerzas armadas conjuntas de EU, sobre la potencial balcanización política de la UE, concomitante con disturbios civiles, durante una conferencia en el Atlantic Council (Washington).
Es poco usual que un general de la talla de Dempsey se adentre a formular críticas públicas en materia financiera y, en específico, en referencia a la gravísima crisis del euro que puede desencadenar un efecto dominó en todas las bancas occidentales: “La eurozona se encuentra en serio riesgo”.
El máximo militar profesional de EU expresó sus dudas sobre “la practicidad de las medidas adoptadas por los líderes europeos” y puso en tela de juicio que sean susceptibles de cohesionar al bloque: “Estamos preocupados (sic) en forma extraordinaria (sic) por la salud y viabilidad (sic) del euro, ya que en varias formas estamos expuestos literalmente a contratos, pero también debido al potencial de disturbios civiles y a la fractura de la UE”.
De dos cosas una: o bien los dos principales líderes de Europa continental, la canciller Merkel y el presidente Sarkozy –cuando el primer ministro David Cameron prácticamente se ha desvinculado de la UE– están jugando al borde del precipicio para detectar in extremis la probable jugada maestra de la dupla anglosajona (de acuerdo con la hipótesis de la “guerra de las divisas”: dólar vs euro) para sacarse un as final bajo la manga, o bien pecan de ineptitud egoísta cuando nadie se salvará del hundimiento del Titanic financierista.
No sin razón, la dupla franco-alemana ha fustigado todo el manejo financierista anglosajón de Wall Street y la City, y hasta ahora no ha hecho caso alguno a los “consejos” perversos del secretario del Tesoro de EU, Timothy Geithner, quien se ha pasado de la raya en sus intromisiones con los europeos.
Los alemanes temen revivir el trauma de la hiperinflación de la República de Weimar, que luego desembocó en el nazismo, y no desean imitar la estéril impresión masiva de billetes (eufemísticamente bautizada como “facilitación cuantitativa”: QE, por sus siglas en inglés) de Obama, que solamente sirvió para rescatar a los parasitarios banqueros de Wall Street en detrimento de la gran nación estadunidense.
La agencia francesa de prensa (Afp), después de dar a conocer la ominosa advertencia del general Dempsey, comenta que “los militares de EU están revisando su estrategia para adaptarse a los recortes presupuestarios diseñados en reducir el exagerado déficit estadunidense”.
La BBC de Londres (¡súper sic!), luego de comentar que 26 de los 27 países de la UE acordaron crear “una unión fiscal más imbricada” (con la notoria excepción de GB, que no quiso ceder a sus privilegios financieristas desregulados), coloca en relieve, para darle mayor dramatismo a las advertencias del Pentágono, que las “fuerzas de EU tienen más de 80 mil militares y 20 mil trabajadores civiles en Europa, muchos radicados en Alemania (¡súper sic!)” ¿Es simple narrativa o se trata de una brutal amenaza transmitida por la BBC?
La BBC recalca las amenazas militares de corte financierista del general Dempsey y su “preocupación (sic)” de que “el proyecto internacional para desarrollar” un súper avión sofisticado (el F-35 Joint Strike Fighther: JSF)” podría ser puesto en riesgo si los presupuestos nacionales de defensa de Europa fuesen recortados”. ¿Dio el general Dempsey doble línea, tanto militar como financierista, a Alemania, recordándole que EU ganó la primera y segunda guerra mundiales, además de la guerra fría?
La amenaza del Pentágono es prístina: “Si todas las predicciones económicas sobre un potencial colapso (¡súper sic!) ocurriesen, claramente pondría los presupuestos en riesgo”. ¿Si Alemania no obedece las órdenes perentorias de Geithner (y de sus amos de GS), entonces el Pentágono descobijaría a Alemania de su máxima protección aérea del futuro (léase: los aviones F-35 JSF)?
¿GB regresaría al redil de la UE siempre y cuando Alemania repita el fallido experimento hiperinflacionario que vivió durante la aciaga República de Weimar?
Cuando las finanzas fallan aparecen los militares y ahora la eurozona ha entrado a una peligrosa fase de disturbios sociales, quizá de preguerra civil, y hasta de vulnerabilidad militar sin la protección del paraguas nuclear del Pentágono.
A mi juicio, como nadie serio en Europa le ha hecho caso a Geithner –un solapador de las exacciones inimputables de GS–, ahora EU eleva la puja amenazante y lanza al ruedo a su máximo profesional militar, el general Dempsey, con el fin de que Alemania sea obligada a optar por la “facilitación cuantitativa”(QE), es decir, una hiperinflación monetarista para salvar ante todo a GS y luego a los otros bancos insolventes trasatlánticos, entre los que brillan Bank of America, Citigroup, Banco Santander y otros más.
*Analista internacional mexicano, columnista de La Jornada