AMLO a Trump: cerrar la frontera causaría una rebelión en ambos países
Gerardo Villagrán del Corral
El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador señaló que pretender cerrar la frontera con Estados Unidos sería equivalente a convocar a una rebelión en ambos lados de la frontera, porque los cuatro estados fronterizos estadounidenses y los seis mexicanos representan la cuarta economía mundial.
López Obrador lo planteó en una carta dirigida al candidato presidencial republicano Donald Trump, quien lanzó esa posibilidad en la Convención de su partido. Ante la intensa integración económica que tienen México y Estados Unidos, el presidente mexicano señaló que es fundamental consolidar la integración económica en América del Norte y, después, ampliarla al resto del continente, porque sólo así la región podrá hacer frente a la expansión económica y comercial de China.
De acuerdo con la planeación del país asiático, para 2040 pretenden controlar la tercera parte del producto interno bruto mundial, mientras América del Norte, si no avanza en una mayor integración, para entonces representará 23 por ciento del PIB, esto es, se correría el riesgo de quedarnos rezagados, subrayó.
Como había anunciado desde que Trump hizo duros señalamientos contra los migrantes y la correlación económica en la convención republicana, y dijo que ataques militares estadounidenses contra los cárteles que controlan México son absolutamente una opción si el gobierno mexicano no resuelve el problema de la manera debida y rápida.
“El problema es que México está aterrorizado por los cárteles, porque pueden eliminar a un presidente en dos minutos”, declaró Trump en una entrevista con Fox News, donde –junto a su candidato a la vicepresidencia, J.D. Vance- Trump afirmó que los cárteles están dirigiendo a México.
Trump afirmó que los narcotraficantes están asesinando a cientos de miles de estadounidenses cada año con fentanilo y agregó que la trata de mujeres a través de la frontera ahora es gran parte del negocio del crimen organizado en México. “Tenemos que sacar a los criminales, son asesinos”, indicó el candidato presidencial.
Afirmó que los ataques militares contra los cárteles en México aún están sobre la mesa, y señaló que “ México tendrá que enderezarse muy rápidamente”.
De paso, López Obrador le precisó a Trump que sigue siendo presidente de México: “termino hasta finales de septiembre. Le aclaro, porque hace unos días comentó que ya me había retirado. Por favor, amigo, no me ande mandando a La Chingada antes de tiempo. Aunque se ría y siempre le parezca extraño, ahí le va de nuevo otro abrazo’”.
Le planteó las dimensiones de los efectos que tendría el cierre de la frontera: impediría el cruce de las aduanas y los puentes fronterizos a un millón de personas y a 300 mil vehículos, de los cuales 70 mil transportan mercancías de un país a otro que diariamente transitan por la línea divisoria en ambas direcciones.
Tampoco es recomendable, añade en la misiva, restringir la importación de vehículos a Estados Unidos, porque esto no es conveniente para ambos países ni para el consumidor estadounidense. En la actualidad, comprar un automóvil hecho en México le representa al consumidor estadounidense, un ahorro de entre 10 mil y 15 mil dólares.
López Obrador indicó que no es porque EEUU tenga la capacidad tecnológica ni la experiencia en sus plantas automotrices, sino que sus costos de producción son muy elevados. Es que no sólo son vehículos los que se producen en México; se producen muchísimos productos, muchas mercancías, autopartes que son fundamentales para la industria estadounidense.
López Obrador expresó que le “inspiraba confianza el haber sabido de mi amigo Trump como candidato y posteriormente como gobernante, que fue partidario del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en una interacción económica y comercial respetuosa de la soberanía nacional”.
El mandatario mexicano destacó que la forma más eficaz de enfrentar el fenómeno migratorio es atendiendo las causas que obligan a las personas a salir de sus países; ayudar a que haya trabajo y mejorar las condiciones de vida en sus naciones. “Esto es, en lugar de adoptar medidas unilaterales, dañinas para las economías y las poblaciones, es preferible optar por el diálogo, la cooperación y el acuerdo”, dijo López Obrador.
Para López Obrador es fundamental consolidar la integración económica en América del Norte y, después, ampliarla al resto del continente, porque sólo así la región podrá hacer frente a la expansión económica y comercial de China.
De acuerdo con la planeación del país asiático, para 2040 pretenden controlar la tercera parte del producto interno bruto mundial, mientras América del Norte, si no avanza en una mayor integración, para entonces representará 23 por ciento del PIB, esto es, se correría el riesgo de quedarnos rezagados, subrayó.
En tono afectuoso, López Obrador le planteó las dimensiones de los efectos que tendría el cierre de la frontera: dicha decisión impediría el cruce de las aduanas y los puentes fronterizos a un millón de personas y a 300 mil vehículos, de los cuales 70 mil transportan mercancías de un país a otro que diariamente transitan por la línea divisoria en ambas direcciones.
Tampoco es recomendable, añade en la misiva, restringir la importación de vehículos a Estados Unidos, porque esto no es conveniente para ambos países ni para el consumidor estadounidense. En la actualidad, comprar un automóvil hecho en México le representa al consumidor en el país del norte, un ahorro de entre 10 mil y 15 mil dólares.
Es decir, no es porque Estados Unidos no tenga la capacidad tecnológica ni la experiencia en sus plantas automotrices, sino que sus costos de producción son muy elevados. Es que no sólo son vehículos los que se producen en México; se producen muchísimos productos, muchas mercancías, autopartes que son fundamentales para la industria estadounidense.
López Obrador expresó que le inspiraba confianza el haber sabido de mi amigo Trump como candidato yposteriormente como gobernante, que fue partidario del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), en una interacción económica y comercial respetuosa de la soberanía nacional.
Insistió en que la forma más eficaz de enfrentar el fenómeno migratorio es atendiendo las causas que orillan a las personas a salir de sus países; ayudar a que haya trabajo y mejorar las condiciones de vida en sus naciones. Esto es, en lugar de adoptar medidas unilaterales, dañinas para las economías y las poblaciones, es preferible optar por el diálogo, la cooperación y el acuerdo, apuntó López Obrador.
*Antropólogo y economista mexicano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)