Estados Unidos, OTAN y el 5% en Defensa

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Fernando Ayala

 

Durante aproximadamente 500 años, hasta su decadencia en el siglo XV, con la aparición de las ciudades y el comercio, los señores feudales gobernaron en Europa bajo una fórmula muy simple: el Señor otorgaba un trozo de tierra a los campesinos para que vivieran y produjeran alimentos. En la ceremonia de vasallaje, los campesinos se arrodillaban frente a su Señor, le juraban fidelidad, se comprometían a entregar parte de sus cosechas, pagar impuestos y tributos, así como el diezmo de lo producido para la iglesia. A cambio el Señor feudal le ofrecía seguridad, con protección militar con sus tropas y consejos oportunos.

En la reciente cumbre de la OTAN celebrada en La Haya, entre el 24 y 26 de junio pasado, donde asistió el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, los países miembros escucharon al secretario general de la organización, Mark Rute, quien señaló que “Rusia podría estar preparada para usar la fuerza militar contra la Alianza Atlántica en un plazo de cinco años”.

Con un libreto previamente establecido, entonces los países miembros se comprometieron a cumplir lo exigido por el presidente Trump: aumentar el gasto militar de 2 al 5% del PIB en un plazo de 10 años. Rutte, quien no esconde su admiración por el líder estadounidense, resumió muy bien las palabras del presidente Trump, cuando también se discutía el conflicto entre Irán e Israel: “Sometimes, daddy has to use strong language” (A veces, papi tiene que usar un lenguaje fuerte.

En el desglose preparado por los estrategas estadounidenses se estableció que un 3,5% se destinaría directamente a la compra de material militar y mantenimiento de las tropas y un 1,5% para inversiones en el plano de la defensa, que incluye ciberseguridad y la mantención de las infraestructuras críticas, entre otras cosas. A cambio, los países miembros gozarán de la protección militar de los Estados Unidos. Washington destina en la actualidad, el 3,36% del PIB a defensa.

El 5% del PIB de los países OTAN, excluyendo a los Estados Unidos, asciende aproximadamente a 1,2 billones de dólares, es decir 1.200.000.000.000 o 1012. La deuda pública estimada de los países de los 27 países de la Unión Europea, en el primer trimestre de 2025, ascendía a 16,14 billones de dólares, destacando entre ellos a Italia, que llega a 137,9% del PIB, equivalente a 3,1 billones de dólares; Francia con el 115,9% o 3,4 billones; España donde asciende la deuda al 102,6% o 1.70 billones y Alemania con una deuda pública de 99,3% del PIB equivalentes a 2,98 billones de dólares.

Destinar el 5% del ingreso nacional a la defensa constituye desde el punto de vista económico, un verdadero desafío cuyas consecuencias políticas pueden ser devastadoras por cuanto se requiere reducir o recortar los presupuestos de salud, pensiones, educación, cultura y otras áreas altamente sensibles en el Estado de Bienestar al cual están acostumbrados a vivir los europeos. Además, será inevitable la reducción de la ayuda y proyectos de cooperación a los países en desarrollo, cediendo espacio al rival estratégico de Estados Unidos y por lo tanto de la Unión Europea, que representa China. OTAN: definición, historia y características

En países como España, de acuerdo con el periódico El País, un aumento del 5% en el plano militar, supondría unos 80 mil millones de euros al año, es decir casi la mitad del presupuesto que se destina a las pensiones. Asimismo, Madrid ya estaría en el 2% de gasto en defensa al haber aumentado sus compras a Estados Unidos en 2024, que ascendieron a 2.904 mil millones de dólares. En Francia, donde el presidente Emanuel Macron enfrenta una crisis política mayor -que ha tenido cuatro gobiernos en un año- no ha logrado un compromiso político para reducir el déficit fiscal de 44 mil millones de euros, ni extender la edad de jubilación, entre otros temas.Reducir presupuestos e incrementar el gasto militar en las dimensiones impuestas por Estados Unidos hará extender las protestas.

En Alemania, con la sombra de la ultraderecha constituida en segunda fuerza política, y que se extiende por Europa, se suman las declaraciones militaristas del Canciller Federal, Friedrich Merz, quien advirtió que espera tener el ejército más fuerte del continente. Será cosa de tiempo para ver cuáles serán los resultados.

El presidente Donald Trump puede estar tranquilo. Ha logrado importantes acuerdos en diversos conflictos. Tiene la libertad de enviar sus aviones y bombardear donde estime conveniente o hacer volar embarcaciones en el mar Caribe, con total impunidad. Ahora tiene una demanda asegurada para su industria militar que durante años venderá sus productos a los europeos. Ante el aviso de España que no podría cumplir la exigencia de gasto del 5%, el presidente Trump respondió sin vacilar que podría ser expulsada de la OTAN o aplicarle aranceles que hagan gritar a su economía.

La Unión Europea, que debe actuar unida, ha guardado silencio. Tal vez sería hora de establecer una cláusula como la número 5 del Tratado OTAN, donde se establece que un ataque a un país es un ataque a todos. La amenaza de la imposición de aranceles de manera unilateral a España, debiera ser un ataque a todos.

“Papi” debiera tener presente que los hijos también se pueden cansar de tantas imposiciones y que mejor sería destinar esos billones de euros al pago de la deuda pública, a generar programas de construcción de viviendas para dar confianza a los jóvenes, e invertir más en investigación y ciencia para fortalecer la democracia y la tranquilidad social.

* Embajador, economista de la Universidad de Zagreb, Croacia, y Máster en Ciencia Política de la Universidad Católica de Chile. Ex Subdirector de asuntos estratégicos de la Universidad de Chile y ex Subsecretario de Defensa