¿Venezuela retoma el diálogo con la oposición radical?
Marcos Salgado |
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, confirmó que una delegación diplomática de Noruega visita Caracas y se ha reunido con el vicepresidente de Comunicación y jefe del diálogo por el gobierno, Jorge Rodríguez, para avanzar en acercamientos con la oposición más levantisca.
Mientras, el gobierno mantiene la fecha de las elecciones parlamentarias para el 6 de diciembre próximo, con un esquema de representación proporcional acorde a la necesidad de los partidos de oposición que sí dialogan. Comicios que el sector radical pro estadunidense de la oposición intenta sabotear.
Maduro saludó a la delegación de Noruega, que ya ha mediado en ocasiones anteriores en la crisis venezolana, y ha reiterado su intención de continuar con el proceso y su compromiso con “el diálogo, la democracia y la libertad”. “Todo lo que se conversó ahí, lo vamos a continuar”, dijo.
El canciller Jorge Arreaza, aseguró que el Gobierno venezolano está dispuesto a dialogar con la oposición. Gobierno y la variopinta oposición se han embarcado en varios intentos de diálogo en los últimos años para resolver la crisis política desatada tras la muerte del comandante Chávez, en 2013.
El más reciente tuvo lugar en 2019, entre Oslo y Barbados y, aunque las partes estuvieron cerca del acuerdo, finalmente se frustró por las nuevas sanciones estadounidenses que sabotearon, otra vez, el intento de soluciones pacíficas.
La última propuesta emanada de Washington proponía que tanto Maduro como Guaidó se apartaran para dar paso a un gobierno de transición que guiara al país hacia unas elecciones creíbles para ambas partes y para la “comunidad internacional”. Aunque hizo ruido en los medios, el intento fue vano e -incluso- a destiempo, y solo sirvió para desdibujar aún más al “presidente encargado”, Juan Guaidó, quien desde hace semanas, solo acumula pulgares abajo.
El último fue el del ex candidato presidencial Henrique Capriles, hábil a la hora de no embarcarse en fracasos ajenos. “Vamos a seguir con la perorata: que el gobierno legítimo, que el gobierno encargado, que el embajador en no sé dónde. ¡Por favor! ¿Vamos a seguir haciendo política con los pies adónde? Los pies hay que tenerlos en la tierra. Usted tenía un plan y fracasó”, dijo Capriles durante una transmisión en vivo a través de Instagram.
Si bien no mencionó a Guaidó, el comentario fue suficientemente explícito como para que no quedaran dudas sobre el destinatario de sus críticas. Igual, Capriles matizó coqueteando con la idea de una “rebelión” el próximo 6 de diciembre. “La oposición tiene que barajar la partida para avanzar en su objetivo que es el cambio político”, dijo.
Los de Noruega
La visita de diplomáticos noruegos fue confirmada primero por el equipo del autoproclamado Guaidó, que al mismo tiempo aclaró que “el proceso de mediación que realizó Noruega finalizó el año pasado cuando la dictadura se negó a que se celebren elecciones presidenciales y parlamentarias libres y justas”. “No existe en este momento ningún proceso de negociación”, afirmaron.
Pero muchos grupos opositores se han distanciado de Guaidó a medida que se confirmaban varios actos de corrupción mayor en su equipo. La diputada opositora Manuela Bolívar aseguró que Guaidó había pasado a la clandestinidad.
El presidente de Datanálisis y cabildero opositor, Luis Vicente León, dijo que los últimos sondeos de opinión pública reflejan la pérdida de popularidad de Guaidó y una caída estrepitosa en su respaldo, al pasar de 61 por ciento de respaldo en febrero de 2019 a 25 en la última encuesta, y con tendencia a la baja.
León explicó que la ausencia de resultados y las promesas incumplidas del “cese de la usurpación” y el tan mentado “gobierno de transición”, colaboraron con la caída del apoyo político a Guaidó. “Solo 19 por ciento piensa que la oposición puede hacer un cambio. Esto es un cambio dramático. El apoyo de Guaidó viene de la esperanza de cambio”, alertó.
Por su parte, Alfredo Coronil Hartman, otro referente opositor, escribió una carta en la que dice: “debemos admitir que todas las estrategias han fallado, sin importar las declaraciones rimbombantes de la comunidad internacional. El ensayo y error desde enero de 2019 hasta hoy no parece sino haber sido fiel discípulo del viejo lema romano: pan y circo. Tenemos que ponernos de acuerdo, aunque nos exaspere tanto pensar siquiera en el diálogo”, reconoció.
Parecía que en esta oportunidad el gobierno de Estados Unidos no iba a boicotear las negociaciones, tras un mensaje de Elliot Abrams a Maduro, que este respondió así: “mi saludo. Está pendiente la conversación, ya me llegó tu mensaje. Estoy de acuerdo, Vamos palante”. Pero inmediatamente Abrams se apresuró a responder que “EEUU no ha enviado ningún mensaje”, declaración que dificulta la posibilidad de un entendimiento.
En este contexto, vuelven los negociadores noruegos. ¿Para negociar con quién? ¿Habrá nuevos actores en la oposición?