Carlos Rabascall, precandidato en Ecuador: Por una economía con rostro humano

Mariano Ferreira-Nodal

El  periodista, analista político y económico Carlos Rabascall anunció su precandidatura presidencial en Ecuador generando mucha expectativa en los sectores ligados al progresismo de ese país. Rabascall comenzó su recorrida por la región de Manabí, donde lo recibieron con mucha expectativa diversos sectores del interior Ecuador.

Es el primero en lanzarse como candidato de caras las elecciones que se realizarán en febrero del 2021 para elegir al Presidente y Vicepresidente Constitucional de la República del Ecuador. La aparición de Rabascall en el escenario político ya ha comenzado a cosechar simpatías tanto en sectores correistas como en el progresismo que no simpatiza con el ex presidente Rafael Correa.

–¿Por qué ésta decisión de anunciar la precandidatura presidencial?

Las sociedades que no se construyen a partir de la ciudadanía y por la ciudadanía están destinadas, lamentablemente, al fracaso. Eso es lo que debemos evitar en el Ecuador, en Latinoamérica, en esta Patria Grande y todo el mundo. Nos debe preocupar más la gente.

-Entonces, ¿por qué esta decisión?

-Ejercí el periodismo de opinión durante quince años, tal como lo he expuesto a la luz pública no soy periodista, soy ingeniero comercial. He trabajado en bases como la economía popular y solidaria durante mucho tiempo en Guayaquil. Cuando ejercí el periodismo hice muchas preguntas pero realmente fueron pocos los que me brindaron respuestas al amparo de una visión y desarrollo del país. Al amparo de una visión de desarrollo con equidad y de crecimiento con inclusión social.

En los últimos años he podido constatar que esta polarización violenta y absurda que estamos viviendo, en la que se nos ha enfrascado a toda la sociedad, está haciendo no sólo en la economía, sino en lo social. Porque el hecho de que 6 de cada 10  ecuatorianos no tengan trabajo ni ingresos seguros en el país, no es un problema sólo económico sino que es de carácter social.

Es un problema que está afectando la vida de las familias ecuatorianas. Que la inequidad desde el 2017 se haya incrementado en un 4% es el reflejo de que las políticas se están agotando, son las políticas neoliberales que están llevando al deterioro la vida de los ecuatorianos.

Pobreza extrema, que haya crecido un 44% significa que algo estamos haciendo mal, ejemplo que las zonas rurales estén sumidas en cordones de pobrezas y sin posibilidades de desarrollo. No podemos seguir permitiendo que la pobreza siga creciendo, ante eso me revelo.

Por eso tomo la decisión, primero porque creo que esta polarización violenta no nos lleva a ningún punto, o mejor dicho nos lleva al deterioro. No nos estamos dando cuenta de eso, mientras sigamos en esta polarización  violenta y absurda estamos dejando los problemas fundamentales de la patria y cuando hablo de los problemas fundamentales  no debemos ser retóricos. Lo traduzco en la vida del ecuatoriano, de la ecuatoriana.

Quiero construir y proponer la unificación de la tendencia del progresismo, que nos lleve a sacar a la gente de la pobreza. ¿Qué es el progresismo? No es otra cosa que mirar a la gente. Construir una economía con rostros, con equidad, con oportunidades a nuestras personas y reivindicar el acceso al trabajo pero no estamos generando y garantizando aquello. Debemos comenzar con la reorganización de la democracia ecuatoriana.

-Estamos viviendo una total desinstitucionalización a partir de esta polarización, que mencionas, y tenemos una democracia fragmentada sin embargo asumes el riesgo ¿Qué más le propones al pueblo ecuatoriano que no se haya propuesto?

-Quiero recuperar la forma de hacer política en el Ecuador. No estoy aquí para luchar por el poder, estoy aquí para crear una nueva pedagogía de la política y esa nueva pedagogía de la política debe nacer a partir de la ciudadanía y debe construirse por la ciudadanía. Basta ya de alejarse de la representación, hoy la tienen que tener los ciudadanos. ¿Por qué quiero incorporarme a la vida activa en la política ecuatoriana?

Es porque todos los ciudadanos tenemos que tener la responsabilidad y empoderarnos por nuestro país, tenemos que construir un sentido de pertenencia que tiene un valor superior el cual está por encima de lo que me puede aplastar a mí. Al interior de las mismas tendencias hay divisiones, peleas intestinas, tenemos que empezar a construir al interior de esos espacios de inmadurez, tener renunciamientos.

No he dicho a rajatabla que voy a ser el candidato del progresismo, voy a construir la posibilidad de ser un candidato que unifique al progresismo. En caso que el día de mañana hay un candidato que lo pueda lograr, bienvenido sea, conversemos.

Debemos emprender nuestra ruta a rescatar el país pero con una visión de desarrollo que contemple aquello que llamo, una economía con rostro. Tenemos que comprender que la economía no es un fin es una herramienta, también lo es la propia política.

-En caso que se concrete la candidatura, ¿cómo enfrentar los problemas del endeudamiento ante los organismos internacionales que no están claros ya que desconocemos cifras y utilización de ese dinero?

-A mayo de 2017 la deuda agregada del Ecuador estaba al 39% en relación al tamaño de la economía, ese techo se eliminó. Ahí está el riesgo, es necesario analizar,  ver y contrastar para ver las condiciones en las que está. Recordemos que la eliminación del techo era transitoria y temporal, vamos a ver cuándo tenemos que regresarlo porque el problema lo va a tener el próximo gobierno.

A mí no me asusta el tema de la deuda, tampoco el déficit. El tema es para qué se genera. La economía del país no puede ser manejada con una visión de financistas privados, el déficit se produce cuando las economías no crecen adecuadamente o se estacan. O bien creciendo, se concentra demasiada riquezas. Lo que nos tenemos que asegurar es un crecimiento de calidad con distribución, desarrollo, equidad e inclusión social.

Si nosotros sacamos a la gente de la pobreza esa migración de estratos de los pobres a una clase que pueda tener ingresos permanentes y estables para poder consumir va a haber más producción. Al haber más consumo y producción va haber más empleo. A la ecuación hay que regularla para que no se nos salga del andarivel, cuando esa inversión privada falta lo compensa una economía social, una con rostro de ciudadanos de ciudadanía; es la inversión pública.

Hoy no tenemos inversión privada ni pública, eso debemos corregir. Por eso estoy en esto, sé cómo hacerlo. Tengo una visión clara del desarrollo del país y de la gente, estoy proponiendo estas acciones claras y pragmáticas en función del desarrollo.

El próximo gobierno, independientemente quién sea el candidato del progresismo, va a tener que gobernar no sólo en el gobierno en término de políticas públicas sino también desde los propios movimientos y organizaciones sociales y políticas. Uno de los grandes pecados que ha tenido el Ecuador es que cree que toda política nacional puede ser replicada en territorio, estamos viendo que no es así.

Tenemos que rescatar la ruralidad del país, no digo el sector agropecuario sino de la ruralidad que es una parte mayor. Los ciudadanos deben ser claves en la planificación territorial, debemos darles oportunidades. Dice el Papa Francisco “no puede haber democracia cuando hay hambre”.

–Una de las preocupaciones del próximo gobierno son las monetizaciones de ciertos sectores, ¿cómo enfrentar la posible venta de muchas empresas del Estado?

Con decisión política. Primero es una equivocación en el enfoque, las monetizaciones de los activos estratégicos de un Estado tienen que ser en beneficio del pueblo, los bienes estratégicos no se pueden vender. Está prohibido constitucionalmente. Sí se puede usar la figura de la concesión pero eso no resuelve el problema de la economía ecuatoriana como propuesta gubernamental.

Se nos está diciendo que se la quiere concesionar de la delegación y operación, buscamos terminologías muy adecuadas en el ámbito de la comunicación estratégica: ya no decimos concesión decimos monetización y ahora delegación. Primer punto, el que venga, ¿va a asegurar que nos va reconocer lo que ya se está produciendo como utilidades y regalías de los superávit para el Ecuador?

Segundo punto, esto no es cuestión de declaraciones, suponte que dentro de un análisis se diga sí es conveniente, ¿cuál es el cronograma de inversión que va a tener, cuál es la proyección de ingresos para el estado ecuatoriano producto de esas inversiones? Quiero que recuperemos el país, no hablo en primera persona, cuando recorro la patria, los territorios de nuestro país le digo a la gente “yo no vengo a buscar un voto, no soy candidato. Yo vengo a que me conozcan, que conozcan mis ideas.

Vengo a escucharlos para que a partir de esta relación ciudadana de amistad y compromiso por el país, construyamos el Ecuador que queremos, deseamos y anhelamos. Que por justicia social, merecemos”.

-¿Has conversado con alguna organización política que pueda proponerlo para poder ir a primarias?

-Eso sería irresponsable de mi parte. Si estoy queriendo que esto se construya a partir del conocimiento que tengan nuestros conciudadanos de los candidatos, es obvio que nos tienen que conocer y generar elementos diferenciadores. No he conversado con organizaciones políticas inscriptas ni Consejo Nacional Electoral.

He conversado con ciudadanos y ciudadanas porque ahí está el elemento diferenciador que propongo, si vamos a construir algo es a partir de la ciudadanía y de los territorios. Mantengamos los principios de equidad, crecimiento,  desarrollo, inclusión social y transparencia.

-¿Qué hacer si se divide la tendencia? ¿Tomarías igual la decisión de ir solo o harías un paso al costado?

-Creo que lo peor que le podría pasar a un país es dividir la tendencia. Eso sería reducir las posibilidades del rumbo que debe tomar el país. Primero luchemos por la unificación, luego decidamos. Como siempre lo dije, cuando ejercí el periodismo, mi responsabilidad y compromiso será siempre con los ciudadanos.

-Obviamente tendrá ataques políticos y de los medios de comunicación…

-Ya los tengo. Estoy proponiendo construir un país que salga de la polarización y no es simplemente una salida retórica. No permito que nadie ni nada me distraiga del norte de mi vida, asumí el compromiso de construir una sociedad más justa, peldaño a peldaño, y no voy a descansar en aquello. Sea candidato o no sea candidato. Ante la pregunta de Fabricio Vega si está la decisión tomada, dije “Claro que sí, está la decisión tomada de caminar, la decisión tomada de construir, estoy expuesto”.

-En una sociedad justa hay empleo, ¿Cómo generarlo?

– Somos un país que desde hace 20 años estamos dolarizados pero no hicimos nada como Ecuador para poder sostener la dolarización como gran aporte al desarrollo de los ecuatorianos. Resulta que, seguimos viviendo en una dependencia del petróleo en términos a la liquidez del Ecuador.

La defensa de la dolarización permite mantener la capacidad adquisitiva de los ecuatorianos pero para proteger la dolarización y generar empleo ¿qué hay que hacer? Hay que fortalecer la economía interna para que esta economía sirva como base amortiguadora de los choques internos por la disminución de los precios de los hidrocarburos.

Esa economía interna se debe construir a base de una economía solidaria, popular, asociativa y poder reactivar el  cooperativismo que esté orientada a una inclusión social, local, territorial y nacional. Es ahí dónde vamos a generar el empleo, esa es la base. En esa economía popular y solidaria, son la pequeña y la mediana las que más generan trabajos en el país.

El sector agropecuario genera el 30% del trabajo, que sea de mala calidad es otra cosa; el sector industrial tiene que potencializar y cambiar la estructura del país en términos productivos. No puede ser que el sector agropecuario e industrial siga representando el 12% y 13 % del PBI del tamaño de la economía, tenemos que ver cuáles son las principales fuentes de ingresos por exportaciones para poder protegerlas, tenemos serios problemas con las del banano y camarón.

La solución es trabajar en los dos frentes, la economía interna es fundamental para el empleo y la externa a través de las exportaciones. En relación a la Alianza con el Pacífico nos ponen como pretextos que vamos tener mercados más grandes para exportar pero ¿estamos preparados para recibir el vendaval de las importaciones e incrementar el déficit comercial no petrolero?

¿Dónde está el trabajo y la industria nacional? En una economía social, el objetivo es el ser humano. Garantizar el empleo e industria nacional significa que la gente tenga más para poder redistribuir. Si tengo más universo de productores, voy a tener más base imponible, más facturación, por tanto va haber una base imponible para cobrar impuestos. En el volumen redistribuyo la riqueza.

-También mayor inversión pública…

-La inversión pública es muy importante como la inversión privada. Las dos categorías de inversiones son tremendamente importantes.

-Dentro de este proyecto, ¿te has trazado recorrer el país?

-Tomé la decisión de recorrer el país y lo voy a seguir haciendo, dialogar. Permíteme cambiar el término, voy a conversar, voy a escuchar. A partir de la escucha vamos a construir.

-¿Ha tenido acercamiento con los movimientos indígenas?

-No, no los he tenido. No hemos conversado.

-¿Con otras organizaciones sociales?

-Ciudadanas, estoy empezando a caminar, conversar, escuchar. Dentro de esto vamos a tener que hacer discusiones. El Ecuador ha tenido un problema, que es el problema cultural de la exclusión. Vengo a incluir.