Chavistas, opositores y “nini” confirman que están dialogando y lanzan su declaración de principios
“Es urgente un acuerdo político institucional para sacar a Venezuela de su actual situación. Una crisis multidimensional abarca cada una de las principales áreas de la sociedad y se expresa en el deterioro de las condiciones de vida de la población del país”, sostuvieron actores de sectores académico, político y social enmarcados en la Iniciativa de Diálogo Plural por Venezuela, en la que convergieron figuras como Maryclen Stelling y Pedro Nikken .
La posibilidad de que la situación en Venezuela empeore ha alentado a chavistas, opositores y “nini” a buscar soluciones en conjunto, en esta iniciativa que hizo pública al siguiente declaración de principios el viernes 23 de agosto.
1)Es urgente un acuerdo político institucional para sacar a Venezuela de su actual situación. Una crisis multidimensional abarca cada una de las principales áreas de la sociedad y se expresa en el deterioro de las condiciones de vida de la población del país.
2)En el transcurso de los últimos años se ha agudizado progresivamente una crisis política que, entre otros efectos, priva al país de las condiciones de gobernabilidad indispensables para hacer frente a la situación que atraviesa Venezuela.
La lucha política exacerbada se ha prolongado indefinidamente, en una espiral de intentos de los contendores por acorralarse y destruirse recíprocamente, sin otro resultado que debilitarse ellos mismos y al país profundizando la animosidad que los separa. Este es el escenario en el que se agravan las privaciones del pueblo, cuya debida atención es vulnerada por la confrontación política.
3) Tal situación requiere atención inmediata. Urge resolverlo, sin perderse en una interminable discusión sobre atribución de responsabilidades. Una discusión pendiente que no ayuda a abordar la presente problemática aun cuando tampoco es excusa para no hacerlo. El deber de quienes lideran al país desde los distintos sectores políticos y sociales es sacarlo adelante y poner fin cuanto antes al sufrimiento del pueblo, al riesgo de una confrontación armada y hasta de una inaceptable intervención militar extranjera.
No puede postergarse la estabilización política e institucional, indispensables para la recuperación de la economía, acometer la grave crisis social y la problemática humanitaria que agobian a Venezuela.
4)Quienes esto declaramos provenimos de sectores diversos y muy heterogéneos en su manera de ver al país desde el punto de vista político-ideológico. Mantenemos diferencias que nos han separado por años y aún nos separan, pero nos congrega la aspiración a debatir libremente, dentro del marco de la Constitución y los valores de la democracia. A tal fin, en días recientes, hemos mantenido varias reuniones con miras a reconocernos y compartir nuestra preocupación por Venezuela, que está muy por encima de nuestras diferencias.
5)Por ello hemos decidido dialogar, pronunciarnos y actuar conjuntamente. Concordamos sin la menor duda en que el camino para enfrentar este momento es el del reconocimiento y el entendimiento entre los actores y partidos políticos, a través de mecanismos en los que generosamente se acerquen las diferencias que nos separan para llegar a acuerdos por Venezuela.
Acuerdos que habrían evitado males mayores y sufrimientos innecesarios. La experiencia de otros países indica que al final siempre se termina negociando, aun cuando con mayores costos y más obstáculos.
6) Queremos dar nuestro respaldo a quienes actualmente se están esforzando en procura de ese entendimiento, particularmente en el proceso iniciado con la ayuda del gobierno de Noruega, el cual esperamos pueda ser culminado exitosamente a pesar de los contratiempos y provocaciones que puedan surgir en el camino”.
7)Expresamos igualmente nuestro categórico rechazo a cualquier forma de violencia, injerencia o imposición foránea. Hacemos un llamado a las partes para que dialoguen con el firme compromiso de alcanzar acuerdos que aseguren por la vía pacífica, constitucional, electoral y democrática, las transformaciones necesarias para garantizar la gobernabilidad.
8)La solución no vendrá de otros. Está a nuestro alcance, si verdaderamente la queremos, si actuamos con humildad republicana y si tenemos por norte el supremo interés del país y no la prevalencia de otros intereses.