Xabier Benito (eurodiputado): “Es la vuelta de las intervenciones militares y la guerra a América Latina”

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Jorge Marchini|

Xabier Benito Ziluaga, activista y político español, diplomado en trabajo social, eurodiputado por Podemos desde noviembre de 2015, señaló que con el reconocimiento a Juan Guaidó el Parlamento Europeo se convirtió en una institución más al servicio de los intereses transnacionales que ven en la crisis de Venezuela la oportunidad para ampliar su margen de negocio, a través del acceso a las reservas de petróleo.

-¿Cuáles son los motivos que interpreta  usted que han llevado al Parlamento Europeo a tomar una decisión tan inmediata de reconocimiento de  un gobierno paralelo en Venezuela, siendo que no se aplica la misma consideración en relación a conflictos democráticos o de denuncias de  violaciones de derechos humanos  en los propios  países europeos o extrarregionales ?

Los grupos de populares, socialistas y liberales en el Parlamento Europeo llevan tiempo participando en la campaña de “más gasolina al fuego” en la cuestión de Venezuela. Antes de esta última resolución ha habido otras 7, ninguna de ellas favorable al diálogo en el país latinoamericano.

Con esto el Parlamento Europeo se convierte una institución más al servicio de los intereses transnacionales que ven en la crisis de Venezuela la oportunidad para ampliar su margen de negocio, a través por ejemplo del acceso a las reservas de petróleo. Pensar esto no es ningún disparate pues es parte de la historia reciente: tras el golpe en Brasil, una de las primeras medidas del presidente “interino” Temer fue la privatización y liberalización de sectores clave y de los recursos naturales.

Fue el paquete de privatizaciones más grande en la historia reciente de Brasil con 57 empresas públicas e infraestructuras brasileñas sacadas a subasta. Varias de estas privatizaciones coincidían con distintas peticiones formuladas por empresarios españoles en años anteriores. Las constructoras españolas Abertis, Sacyr, ACS, Ferrovial y OHL por supuesto, participaron en esas subastas.  

-¿Qué entiende que está en juego en la crisis de Venezuela que ha llevado a una creciente y peligrosa  polarización no sólo interna sino también geopolítica?

-Lo que está en juego ahora no es ni más ni menos que la vuelta de las intervenciones militares y la guerra a América Latina. Al tiempo que Europa estaba reconociendo a un autoproclamado presidente respaldado por Trump, fuerzas armadas de distintos países se congregan en Colombia. Hoy sabemos a través de las filtraciones que desveló el New York Times que EE.UU. planeaba desde hace meses un golpe así que incluye también la posibilidad de una intervención militar.

La UE podría haber estado a la altura, marcar un perfil propio y unirse a las declaraciones de Uruguay, México, el Vaticano o el Secretario General de Naciones Unidas y urgir el diálogo y la desescalada. Ha preferido hacer el caldo gordo a la política desquiciada de Trump o Bolsonaro.

-¿ Cuál es su opinión sobre la intención de ampliar sanciones económicas y financieras contra Venezuela en el marco de una crisis humanitaria crecientes y la definición realizada por el Presidente de EE.UU, Donald Trump que “todas las opciones están sobre la mesa”?

-Mi opinión es claramente contraria a las sanciones económicas contra Venezuela. Esas sanciones están teniendo impacto directo sobre la ciudadanía venezolana en forma de desabastecimiento de alimentos y medicinas. Lo más grave en mi opinión es que la oposición esté usando esa situación de urgencia social provocada en gran medida por las sanciones como arma política para agravar la crisis.