Un pedazo de luna

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Laura Antillano|

Hemos vivido una semana de movilización continua en torno al evento del “12° Encuentro con la literatura y el audiovisual para niños, jóvenes y adultos”, que tuvo como lugar de actividades centrales al Museo de la Cultura de Valencia , con apoyo de la Gobernación de Carabobo, la junta de amigos e interesados fue tan grata que en circunstancias en que la luz eléctrica “nos dejó a pie”, no tuvimos que suspender nada, dado el ánimo de los participantes, quienes continuaron sus ponencias e intervenciones en la penumbra, como si tal cosa. Y leemos un poema de Eduardo Gallegos Mancera que dice: “Córtale, niña, a la luna un pedazo, y guárdalo/guárdalo en tu regazo,/para que cuando se vaya la luz/haya luz en tu cuarto”.

El hecho es que fueron tres días de intercambios entre la poesía, la música y el cine, con la mejor de las actitudes, y el colectivo probó su manifiesto interés por lo que ha significado un camino de doce años eligiendo temas y manifestaciones que nos interesan y queremos seguir con ello construyendo vías, las que sobre todo en el tiempo en que vivimos son necesarias, y sirven de fortaleza ante graves vicisitudes que laceran la cotidianidad, y el espacio vital de todos.Resultado de imagen para 12° Encuentro con la literatura y el audiovisual para niños, jóvenes y adultos

Ello nos lleva a ubicarnos en el análisis de lo que las posibilidades del hecho creativo y su repercusión conllevan, para quien crea y para quien es espectador o lector de lo creado. El ser humano en el hecho vital que lo califica como tal. La música, la danza, la poesía, el teatro, el cine, las artes visuales la construcción del objeto, el gesto que busca comunicar, la palabra conmovedora, la imagen, la acción, todo conjugado para recordarnos la materia esencial de construcción del mundo interior, con el cual luego haremos la memoria de la vida misma.

No está fácil el día a día en el País, confluyen un gran listado de dificultades, y la voz de los creadores es necesaria, y cada gesto al respecto se hace necesario y alimentador.

Morela Maneiro, la poeta kariña, (quien nos ha acompañado en alguno de estos encuentros), lo remite a la araña y su arte: “Tejedora, cada acción es equivalente al tejido de nuestro cuerpo/Tejedora, como te enseñó vuestra maestra-celeste- la araña, para atrapar los sueños.

Y como una vez escribió la poetisa Enriqueta Arvelo Larriva: “Este mensaje que ha nacido ciego/ha de ir a los ojos de cálida experiencia, /de mirada sin sesgo, de balanza cumplida./Este mensaje ha de vivir antenas.(…)Este mensaje puro va a los ojos amigos,/a los ojos enteros, de pestañas honradas,/ de insospechables párpados”.

Dentro de esa ecuación entra el “alimento cultural” , como la propuesta del Ministro Villegas de que con cada clap se organice un cine-club, (con lo cual recordamos aquello que decía José Ignacio Cabrujas con relación a los escritores, que debíamos convertirnos en tan necesarios para la gente como el INOS).

Este es pues, un momento tangencial que requiere de la solidaridad colectiva, la bondad comprensiva, y en ello “el poema con su savia de instantes”.