Historias de ricos y pobres

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JUAN GUAHÁN| A nadie le caben dudas que en el mundo ha habido y hay pobres y ricos. Eso no es ninguna novedad. Pero en momentos de crisis, como la actual, el tema se vuelve recurrente.

Cuba, un país sin desnutrición

Cuba es uno de los países más estigmatizados de la tierra. De Cuba se dicen muchas cosas… que faltan libertades; que la democracia representativa al estilo occidental no se practica; que no hay libertad de expresión; que llama la atención la pobreza de su pueblo que no tiene recursos, ni posibilidades para acompañar al consumo al que no quieren acostumbrar las sociedades más ricas. Se dicen… se dicen muchas cosas sobre lo que pasa en Cuba, lo cierto es que se ha anunciado que en Cuba no hay desnutrición. Justamente en uno de los pueblos más pobres de la tierra, según los cánones impuestos por el mundo occidental, no hay desnutrición. La misma que –precisamente- agobia a muchos de los países que tienen “altos niveles de ingresos”

México: suicidios por hambre

Según un informe de Telesur (cadena televisiva -con sede en Venezuela- en la que participan varios países de Nuestra América, Argentina entre ellos), unos 50 indígenas del estado de Chihuahua, al norte de México, se suicidaron a fines del año pasado, arrojándose a un barranco o ahorcándose. La causa es la hambruna, por la sequía y falta de asistencia, lo que no les permitía alimentar a sus hijos. ¡Pobre Méjico, lindo y querido!

La pobreza infantil en la región

La Comisión Económica para América Latina (CEPAL) y UNICEF han hecho público, recientemente, un “Informe” que refleja la situación de pobreza infantil en la región. Según dicho “Informe” el 45% de los niños de la región viven en la pobreza. Para medirla se tuvieron en cuenta los ingresos, la vivienda, educación, el agua potable y la alimentación de la que disponen en sus hogares. Entre los países con menor nivel de pobreza infantil se encuentran –ordenados- Costa Rica, Chile, Uruguay y Argentina. En el otro extremo se encuentran Perú, Bolivia, Guatemala, cerrando la lista El Salvador.

La crisis y los ricos, el discurso y la práctica

Las “mentes más brillantes” de los sectores económicos más poderosos desarrollan –en general- un mecanismo perverso. Un discurso que reconoce el peligro de las desigualdades sociales existentes y una práctica empresarial que tiende a profundizarlas.

El texto que van a discutir los hombres y mujeres más poderosos de la tierra, en su próximo encuentro anual en Davos –Suiza-, coloca su eje discursivo en el peligro que entraña, para las políticas globalizantes, la desigualdad social. Ven al movimiento de “indignados”, que recorre el mundo, como una respuesta a esas desigualdades. En ese sentido han colocado en la agenda de sus debates el futuro del capitalismo y el temor al enfrentamiento entre ricos y pobres.

Pero la práctica de esta misma dirigencia va en el camino inverso. Por medio de sofisticados mecanismos financieros, los más ricos del mundo, incrementan notoriamente sus fortunas. La volatilidad de los mercados con sus importantes variaciones en las cotizaciones de las Bolsas de Valores es uno de los instrumentos que les permiten multiplicar sus riquezas.