CRBZ: La batalla de la Luz/ Cuando la cosa es seria hay que ponerse serio

People cross a street during a power cut in Caracas on March 7, 2019. - The government of Nicolas Maduro denounced a "sabotage" against the main electric power dam in the country, after a massive blackout left Caracas and vast regions of Venezuela in the darkness. (Photo by YURI CORTEZ / AFP)

Gerónimo Paz

Nos encontramos en medio de una gran batalla por el vital servicio eléctrico saboteado por el cruel y despiadado ataque de la élite neoconservadora norteamericana. Es un ataque más fuerte que el paro petrolero del 2002-2003. Es un claro hecho de negación plausible que busca dirigir la culpa hacia el gobierno.

El apagón fue diseñado con ese propósito, por eso ejecutan 3 acciones simultáneas: 1) el ataque físico, saboteando plantas claves del sistema, para mostrar la supuesta evidencia de que la causa del apagón es la falta de mantenimiento y, por lo tanto, la responsabilidad es del gobierno, 2) el ataque electrónico: un ciber ataque al sistema central de control y 3) el ataque electromagnético. Esto suena a ciencia ficción, pero ojo, que la guerra de 4ta generación tiene mucho de eso y por eso mismo es negable.Resultado de imagen para venezuela apagon

La guerra de Cuarta Generación que enfrentamos fue formulada para el caso específico venezolano: implica guerra económica, guerra psicológica, guerra comunicaciónal, guerra electrónica y electromagnética. Comprender este modelo de conflicto es clave para poder enfrentarlo y derrotarlo.

El plan de ataque del enemigo está perfectamente estructurado, es una plan que se ejecuta en su fase final. Es una ofensiva final según sus apreciaciones, que tiene grandes operaciones distractivas: el 23F fue eso, así como la amenaza de intervención. El verdadero golpe era el apagón.

Debemos desplegar un esfuerzo doble para vencer en esta batalla. Por un lado, garantizar los servicios vitales como agua, alimentos, salud y seguridad al pueblo, mientras se recupera el servicio eléctrico. Hay que evitar la caotización del país, porque eso es lo que quiere el enemigo, mientras damos la otra batalla, por la otra luz, la luz de la verdad.

Maximizar las operaciones comunicacionales, dar elementos sólidos, mostrar evidencia, desplegar esfuerzos masivos de información en todos los niveles organizados del proceso bolivariano será determinante.

No pudimos anticipar las verdaderas intenciones del enemigo. Queda eso como lección, dimensionar el carácter del conflicto, cubrir todos los flancos, todos los frentes. La Batalla de la luz es en esencia una batalla de los sentidos, de la percepción de la realidad, de la verdad.

En estas dimensiones se define la batalla, quien logre establecer su verdad habrá triunfado aún siendo culpable. En este caso el culpable es el poder norteamericano y sus peones criollos. Pero eso lo sabemos nosotros y nosotras. Lo más importante es que lo sepan las mayorías con fiabilidad.

*Corriente Revolucionaria Bolívar y Zamora

Cuando la cosa es seria hay que ponerse serio

José Manuel Rodriguez |Resultado de imagen para venezuela apagon

Escribí estas líneas a las once de la noche del día 8 de marzo. Había logrado escuchar en un radiecito de pilas que tenía guardado en el closet de los cachivaches, al ministro de información y comunicación, era seguramente una reposición. Nos contaba que los truhanes que forman el gobierno gringo estaban implicados en la mayor agresión que el país había recibido en 200 años de república. No tengo ninguna duda que es así.

En ese momento llevábamos treinta horas sin electricidad en la mayor parte del territorio, con las terribles consecuencias que esto tiene. Y me preguntaba: no es esta terrible circunstancia suficiente razón para declarar la emergencia nacional, el estado de excepción o que sé yo, alguna vaina que valorando la magnitud del ataque y el gravísimo sufrimiento que está viviendo nuestro pueblo permita tomar las medidas políticas, militares y jurídicas que se correspondan con esos daños producidos (celebrados por la derecha).

Es también necesario para controlar inevitables situaciones de orden público, pues no se trata sólo de resistir y trabajar para recuperar lo dañado. Los traidores a la patria, como los delincuentes, deben ser castigados de inmediato. Como miembro de una sociedad humana me tiene sin cuidado los tiempos de dios y su justicia divina.

Resultado de imagen para venezuela apagonEn una sociedad el que comete un delito es detenido de inmediato impidiendo así que continúe haciendo daño, y el delito de traición a la patria en tiempos de guerra es el peor de los delitos. Y por cierto, ¿qué van a hacer con ese ministro que salió muy orondo a decir que el asunto lo arreglaba en tres horas? En tiempos así un militar con honor, es decir, un hombre, se pegaría un tiro.

No somos una tribu, somos ciudadanos

No vagamos por cerros y llanuras cazando, domesticando animales y luchando por defender el territorio de otras correrías. No somos frágiles criaturas sometidas a los avatares naturales y menos a los tiempos de dioses y justicias divinas. Formamos parte de sociedades complejas con variedad de orígenes, asociaciones, aspiraciones, capacidades y necesidades.

Estamos sobre un territorio común para desarrollar la más amplia capacidad ordenadora y productiva. Para lo primero tenemos al Estado que hace posible el funcionamiento de tan compleja organización, para lo segundo a la gente.

Sin embargo, no se ha podido superar el control que, las cúpulas políticas, militar, sacerdotal y corporativas, mantienen de los aparatos estatales. Insisten con su tutela determinista en tratarnos como tribus. La razón primigenia de toda revolución ha sido romper el principio de la razón suficiente. Si no modificamos el aparato del Estado para que el colectivo tome control de él, no hay revolución que valga.