V Internacional

chavez v internacionalFernando Bossi Rojas-Portal Alba|

Ya se van a cumplir siete años desde que el Comandante Chávez convocó a la conformación de la V Internacional. Fue durante dos eventos, el Encuentro de Partidos de Izquierda realizado en Caracas los días 19, 20 y 21 de noviembre de 2009 y en el acto de instalación del Congreso Extraordinario del PSUV para esa misma fecha.

En ambas oportunidades el Comandante hizo hincapié en esa necesidad. Dijo frente a la dirigencia del PSUV: “No hay tiempo que perder. Si le tocara al PSUV y a un partido más de este mundo conformar el primer núcleo, lo haríamos. Pero estoy seguro de que serán más los dispuestos a la tarea, que es de suma urgencia, porque la crisis mundial se acelera”.

Tanto en uno como en el otro encuentro se resolvió conformar una comisión que se encargaría del tema. Lamentablemente recuerdo aquello que siempre decía el General Perón: “si usted quiere que algo no se realice, conforme una comisión”. Y a la luz del tiempo, esta sarcástica frase del líder argentino, parece de nuevo verificarse.

Traigo a la memoria también la cara de muchos asistentes al encuentro internacional cuando el Comandante lanzó, a quemarropa, esa propuesta. El desconcierto reinó, no primó el entusiasmo ni la algarabía; no aparecieron muchos gestos espontáneos de aprobación. Nada de eso, y aún más, en los pasillos, y finalizada la reunión, hubo algunas manifestaciones de preocupación y también de desacuerdo. Seguramente algunas “izquierdas” –fundamentalmente aquellas de los países imperialistas–, se vieron desorientadas por tan audaz iniciativa. Pero otras organizaciones, principalmente las ubicadas en los países del Tercer Mundo, recibieron con beneplácito la convocatoria.

¿Es que el mundo actual no necesita de una herramienta de unidad y coordinación de las fuerzas antiimperialistas y socialistas para encarar las luchas actuales y las que se avecinan de manera mancomunada? Se entiende que todo verdadero revolucionario ha asumido que el capitalismo no va a “implosionar”, no va a derrumbarse si no es por la acción consciente de las masas populares. Entonces ¿por qué muchas organizaciones autodenominadas de izquierda miran para otro lado cuando se habla de la V Internacional? ¿Es que no es necesaria? ¿No es el momento para conformarla? ¿No hay correlación de fuerzas?

Chávez fue categórico a la hora de lanzar la iniciativa, afirmando que esta vez, la Internacional tenía que ser convocada por quienes están a la vanguardia de la lucha contra antiimeprialista. Decía el Comandante, refiriéndose a las otras Internacionales y justificando por qué Venezuela podría ser el impulsor de esta organización de fuerzas antiimperialistas: “ …todas fueron convocadas desde Europa, desde aquella Europa donde nació con fuerza esa tesis del socialismo científico, al calor de grandes luchas populares… pero pudiéramos decir que el centro de gravedad de las luchas revolucionarias en este planeta ya no están en Europa, el centro de gravedad dije, porque esto hay que decirlo con mucho respeto a todos los movimientos por más modestos que sean en la Europa, en el Asia, en el África, en el Oriente Medio, en Oceanía, en Norteamérica… pero cualquier observador, cualquier analista, no hace falta ser analista, sólo hace falta seguir el consejo de la Biblia, ‘el que tenga ojos que vea, el que tenga oídos que oiga’, sabe que el epicentro de las luchas revolucionarias, de las luchas socialistas hoy en el mundo, comenzando el siglo XXI, está aquí, en nuestra América, y a Venezuela le toca ser epicentro en esa batalla”.

¿Hay fuerza y voluntad suficiente para conformar una V Internacional antiimperialista? Podríamos afirmar que sí, pero si no hay una convocatoria seria y puntual la incógnita sigue abierta. ¿Hay causas que ameriten esa convocatoria? Sobran las razones. Estamos al borde de una nueva guerra mundial que puede acarrear consecuencias impredecibles, no solo para la región afectada directamente, sino para todo el planeta. El cambio climático ya está provocando calamidades apocalípticas. Los organismos internacionales clásicos, la ONU por ejemplo, con su Consejo de Seguridad y sus asambleas periódicas, demuestran que sólo sirven para lanzar discursos rimbombantes o meramente para hacerle el juego a los intereses de los países imperialistas… Las injusticias y la opresión crecen y el irrespeto a las soberanías nacionales y a los derechos humanos es moneda corriente…  Chavez Quinta Internacional

Ante toda esta realidad ¿por qué se sigue dilatando el llamado del Comandante, si cuando él lo realizó el mundo no estaba peor que ahora? Esa es una pregunta que debemos hacernos.

Chávez señaló con toda precisión la tarea a llevar a cabo: “Nos toca a nosotros asumir el papel de vanguardia y tenemos que asumirlo así, compañeros y compañeras, para que nos demos cuenta y tomemos conciencia de la gigantesca responsabilidad que tenemos sobre nuestros hombros, cada una de ustedes compañeras, cada uno de ustedes compañeros, camaradas, nosotros en el Partido Socialista Unido, los partidos aliados, nosotros en el gobierno la inmensa responsabilidad que tenemos… por eso honestamente creo que llegó la hora de convocar a la V Internacional y la convocamos desde Caracas y hacemos un llamado a todos los partidos socialistas revolucionarios, movimientos y corrientes de los que luchan por el socialismo, contra el capitalismo, contra el imperialismo para salvar el mundo”.

Me pregunto ¿no habría que hacer un esfuerzo para llevar adelante esta convocatoria tan necesaria en estos momentos? Tal vez no desde Venezuela, que hoy está afrontando una agresión interna y externa de dimensiones extraordinarias… O tal vez sí, precisamente por eso… Pero más allá de quién lo haga, de quién pueda convocar, creemos necesario, al menos, que se abra nuevamente el debate.

Las fuerzas antiimperialistas del planeta representan a millones y millones de seres humanos, y la verdadera izquierda socialista es parte de esa inmensa mayoría que enfrenta a los gobiernos imperialistas liderados hoy por los Estados Unidos. La dictadura imperialista pretende imponerse en todo el planeta, la respuesta debe ser también mundial, y seguramente será desde la periferia hacia las metrópolis del gran capital.