¿Se ha transformado la ONU en una gran organización de ayuda humanitaria?

Thalif Deen-IPS | 

Las Naciones Unidas, que no han logrado ayudar a resolver algunas de las guerras civiles y conflictos militares en curso y de larga data en el mundo, incluidos Palestina, Afganistán, Yemen, el Sáhara Occidental, Myanmar, Siria y, más recientemente, Ucrania, fue desafiada por el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy durante su fascinante discurso ante el Consejo de Seguridad en abril pasado.

“¿Dónde está la paz para la que se crearon las Naciones Unidas? Y “¿dónde está la seguridad que se suponía que debía garantizar el Consejo de Seguridad?”. preguntó, a través de una teleconferencia.

La ONU también ha permanecido indefensa, con un Consejo de Seguridad dividido y en virtual parálisis, en otro tema político de larga data: la amenaza nuclear de Corea del Norte, donde Rusia y China vetaron una resolución del Consejo de Seguridad para sanciones adicionales contra la RPDC el mes pasado. (pese a que obtuvo 13 de 15 votos).

Sin embargo, el papel decreciente de la ONU en la geopolítica ha sido compensado por su desempeño cada vez más importante como una organización de ayuda humanitaria masiva.

Estos esfuerzos están liderados por múltiples agencias de la ONU, como el Programa Mundial de Alimentos, la Organización Mundial de la Salud (OMS), el fondo de las Naciones Unidas para la infancia (UNICEF), la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de la ONU, entre otros.

Estas agencias, que han salvado millones de vidas, continúan brindando alimentos, atención médica y refugio a quienes están atrapados en países devastados por la guerra, principalmente en Asia, África y el Medio Oriente, mientras siguen de cerca los pasos de las organizaciones internacionales de ayuda, incluyendo Médicos Sin Fronteras, Save the Children, Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), CARE International, Acción contra el Hambre, World Vision y Relief Without Borders, entre otros.

El papel cada vez mayor de la ONU en el trabajo de ayuda humanitaria quizás podría ganarle al organismo mundial una nueva designación: Naciones Unidas sin Fronteras.

Además de la asistencia humanitaria, la ONU también supervisa a casi 90 000 pacificadores en más de 12 operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU y varias misiones de observación, principalmente en situaciones posteriores a un conflicto, “ayudando a los países a transitar el difícil camino del conflicto a la paz”.

En una entrevista con la embajadora de EEUU Linda Thomas-Greenfield, Anne McElvoy del podcast “The Economist Asks” dijo que “la ONU se está convirtiendo en una organización de ayuda humanitaria gigante… y realmente se está alejando de la geopolítica a lo grande simplemente porque esta fórmula de la ONU, el formato de la misma y la forma en que funcionan sus controles y equilibrios, no son lo suficientemente nítidos o efectivos en el mundo tal como es. ¿Qué piensas?”.

Al justificar la existencia de la ONU como organismo político, Thomas-Greenfield dijo: “La ONU es lo que tenemos, y todos somos miembros y tenemos que trabajar todos los días para garantizar que esta organización funcione y que proporcione la plataforma por acabar con el conflicto. Es el único lugar donde todos podemos sentarnos juntos a la mesa”.

“La ONU es el único lugar donde podemos tener discusiones sobre paz y seguridad. Y es responsabilidad de la ONU trabajar para prevenir el flagelo de la guerra. Para eso fue creado. Y así, no hemos renunciado a la organización. No hemos renunciado a los objetivos de la organización”, añadió.

El mes pasado, el Director Ejecutivo del PMA, David Beasley, dijo que el Programa Mundial de Alimentos alimentó el año pasado a unos 130 millones de personas, principalmente en zonas de conflicto. Este año, se espera que ese número aumente a unos 150 millones.

En las sesiones informativas diarias, el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, proporciona una lista de la ayuda humanitaria proporcionada por las agencias de la ONU en todo el mundo, particularmente en las zonas de conflicto. Al 26 de mayo, Dujarric dijo que la ONU y más de 260 de sus socios humanitarios en Ucrania han llegado a 7,6 millones de personas con asistencia. El apoyo en efectivo también continúa aumentando con 1,1 millones de personas adicionales alcanzadas en mayo.

De marzo a mayo, un total de 1,5 millones de personas recibieron asistencia en efectivo y atención médica, mientras que alrededor de 352 000 personas recibieron agua potable y productos de higiene. “También hemos llegado a casi 430.000 personas con servicios de protección, apoyo psicosocial y servicios legales críticos, incluido el apoyo a los desplazados internos”, agregó.

En el Cuerno de África, la ONU y sus socios han proporcionado alimentos a unos 4,9 millones de personas, mientras que más de dos millones de cabezas de ganado han sido tratadas o vacunadas, y más de 3,3 millones de personas han recibido asistencia de agua. En la República Democrática del Congo, la ONU y sus ONG asociadas comenzaron a distribuir ayuda a miles de personas en el territorio de Nyiragongo, incluidos alimentos para unas 35.000 personas, agua y medicamentos para al menos 10.000 personas.

Desde enero del año pasado, la ONU también se ha acercado a alrededor de 1,1 millones de personas afectadas por la sequía en Grand Sud, Madagascar, con asistencia crítica, que ha desempeñado un papel vital para evitar el riesgo de hambruna. Esto ha sido posible gracias a la generosidad de los donantes, quienes aportaron $196 millones de los $231 millones necesarios para la respuesta a la sequía en Grand Sud, entre enero del año pasado y mayo de este año.

En un artículo de opinión, el Dr. Alon Ben-Meir, profesor jubilado de relaciones internacionales en el Centro de Asuntos Globales de la Universidad de Nueva York (NYU), dijo que aunque la ONU se ha retrasado mucho en su propósito de mantener la paz internacional y seguridad, a lo largo de los años ha establecido muchas agencias que brindan asistencia humanitaria significativa en muchos campos. “En este sentido, la ONU se ha convertido en una organización de ayuda masiva”, declaró.

Kul Gautam, exsubsecretario general de la ONU y exdirector ejecutivo adjunto de Unicef, dijo que el sistema de la ONU no ha sido tan efectivo como sus fundadores esperaban para prevenir guerras y mantener la paz y la seguridad. También ha sido menos eficaz de lo que esperaban muchos países en desarrollo para ayudarlos a enfrentar los desafíos del desarrollo económico y el progreso social.

Su gracia salvadora, por lo tanto, ha sido en gran medida en el área de ayuda humanitaria y rehabilitación, un área que ahora está densamente poblada por agencias de la ONU, organizaciones no gubernamentales (ONG) y organizaciones benéficas basadas en la fe.

“Esto no significa subestimar el valor de la respuesta humanitaria de la ONU, ya que el mundo de hoy se enfrenta a un número históricamente sin precedentes de refugiados, personas desplazadas, víctimas de desastres naturales y provocados por el hombre y nuevas formas de violencia contra las mujeres, los niños y otros grupos vulnerables”. .

Pero como las guerras modernas, los conflictos violentos, las pandemias y las crisis ambientales cada vez más peligrosas ya no pueden contenerse dentro de las fronteras nacionales, sino que requieren una acción multilateral concertada, la necesidad de una ONU más fuerte y eficaz es más urgente que nunca, dijo Gautam, autor de “ Mi viaje desde las colinas de Nepal hasta los salones de las Naciones Unidas ”.

Andreas Bummel, director ejecutivo de Democracia sin Fronteras, dijo que las actividades humanitarias de la ONU son esenciales. Aquí es donde la ONU tiene el impacto más inmediato. En el campo de la paz y la seguridad no se debe olvidar que la ONU fue creada como una herramienta de sus estados miembros, puntualizó.

“La soberanía estatal es el principio más glorificado de la ONU. La ONU no tiene autoridad independiente ni medios para hacer cumplir la ley. Incluso si lo hubiera hecho, es difícil imaginar cómo podría interferir en un conflicto que involucra a una de las grandes potencias”.

La ONU no tenía la intención de hacer la guerra contra ninguno de ellos, argumentó, “Es por eso que se creó el derecho de veto. Aunque el veto está siendo mal utilizado con fines políticos. Esto no está en línea con el propósito de la ONU y el espíritu de su Carta”, declaró.

*Corresponsal de Inter Press Service en Naciones Unidas